"simplemente tú"

Capítulo N°68

-Es horrible tener un hijo –Exclamó Heechul sentándose en el taburete frente a la caja.

-¡Heemin! –Regañé a su lado mientras sacaba algunos trozos de pasteles.

-Aish, es cierto, nena. Ahora que a Aba le dio por ir a esas clases en donde te enseñan a como ser buenos padres, siento que perderé toda mi libertad –Suspiró fuertemente- Sin mencionar todos los gastos que se nos vendrán –Paso las manos por su rostro- Dios, ¿te conté que Aba ya compró la cuna y todas esas cosas?

-Heemin, yo fui con ella y Kate a comprar las cosas –Rodee los ojos por su dramatismo- No seas exagerado.

-Lo dices porque tú y Donghae ya están acostumbrados –Me miró mal.

-Heechul, ya detente –Lo miré seria- Tener un hijo es lo más maravilloso que te puede llegar a suceder. Sí, es un cambio muy drástico ya que tienes que preocuparte cien por ciento de él, los gastos aumentan y sobre todo por la ropa, ya que crecen muy rápido –Suspiré con una sonrisa- Pero cuando los ves sonreír, decir sus primeras palabras o cuando comienza a caminar, es algo tan hermoso que sientes tu corazón tan lleno de felicidad y amor. Luego lo miras y cuesta creer que esa pequeña criaturita naciera del inmenso amor que te tienes con tu pareja...

-¡Aterrador! –Exclamó y lo miré negando con mi cabeza- Por la forma en la que hablas, le diré a Donghae que se ponga en campaña, creo que necesitas otro bebé ahora ya.

-Aarón sigue siendo un bebé –Proteste con mis mejillas sonrojadas- Todavía es muy pronto para tener otro hijo...

-Como digas –Se encogió de hombros restándole importancia.

-Eres un exagerado y un hablador –Acusé- Te he visto cómo te brillan los ojos cada vez que estás con Aba y acaricias su vientre, sin mencionar que Aba me ha comentado que en las noches no la dejas dormir porque te la pasas hablándole a tu bebé –Sus mejillas de inmediato se sonrojaron y sonreí victoriosa tomando los platos con los postres para llevarlos a la mesa en donde una pareja me esperaba.

-¡Kim Ryeo Wook, atiende a la mesa 3! –Gritó Heechul y rodee los ojos al ver como Wookie se sonrojaba y corría a la mesa para tomar los pedidos. Sin duda Heechul nunca dejaría de ser tan mandón.

***

-Wookie, si quieres puedes irte, ya hemos cerrado –Exclamé tocando su hombro.

-Oh, no importa, me quedaré ayudando a limpiar –Sonrió y continuó barriendo, pero Heechul le quitó la escoba viéndolo serio.

-Tienes un examen importante mañana, te he escuchado hablarlo con la madre de __ -Este lo miró sorprendido.

-Es cierto, también te he escuchado –Tomé mi pelo en una coleta resoplando los rebeldes pelos que caían por mi frente y noté como se sonrojaba viéndome.

-Ey, despierta –Heechul chasqueó sus dedos frente a él y sonrió de lado- No me digas que...

-Ya hemos llegado –Habló Donghae entrando con Aarón en sus brazos y sonreí feliz.

-¡Mi amor! –Corrí hacia ellos y tomé a mi bebé en brazos para besarlo, sus pequeños brazos me rodearon por el cuello besando mi mejilla- ¿Cómo te has portado hoy? –Pregunté para ahora acercarme a Donghae y besar sus labios.

-Se ha portado muy bien, creo que ya tiene a una nueva amiga –Exclamó Donghae metiendo las manos en los bolsillos de sus jeans- La tía me ha comentado que siempre anda con ella –Sonrió de lado- Es todo un campeón.

-¿Qué? –Pregunté horrorizada-¡No! Es mi bebé, no dejaré que ninguna niñita me lo quité –Lo apreté a mi pecho y lo sentí reír en mi brazos al igual que a Donghae.