"simplemente tú"

Epílogo

-Mmm... ¿No piensas despertar y saludarme como corresponde? –Preguntó Donghae susurrándome en el oído al mismo tiempo que sentía sus manos deslizarse por debajo de mi pijama acariciándome.

-Donghae... -Gemí en cuanto llegó a mi seno y girándome, me acomodé encima de él- Feliz día del papá –Sonrió de lado y acercándome, besé sus labios.

-¡Mamá! –Sentimos unos pequeños pies correr hacia nuestra habitación y en un pestañeo, Aarón ya estaba encima de la cama- ¡Oh, no!

-¿Qué sucede, campeón? –Preguntó Donghae suspirando con frustración al ver que casi fuimos pillados.

-¡No! –Lo miró con tristeza- Mi profe dijo que estarías dormido –Formó un puchero con sus labios y Donghae frunció su ceño.

-Oh, claro que está dormido, es solo que con tu grito lo has despertado un poco, pero mira –Miré a Donghae articulándole con mi boca para que se hiciera el dormido, por lo que captando el mensaje, cerró rápidamente sus ojos.

-¡Es mentira! –Gritó moviéndolo, pero Donghae se giró fingiendo que volvía a dormir.

-¿Ves? –Aarón me miró dudando unos segundos- Anda, vamos, antes de que despierte.

Levantándome, noté mi camisón subido hasta mi estómago y sentí mis mejillas arder de solo pensar en lo que estábamos a punto de hacer. Aarón me tomó de la mano y me arrastró hasta la cocina en donde subiéndose a la silla, nos pusimos a preparar un contundente desayuno especial para Donghae.

Aarón sacó la tarjeta y el regalo que le tenía preparado y envuelto a Donghae desde hace unos días y lo puso junto a la bandeja, y mientras preparaba su leche, la puse encima de la bandeja y juntos subimos hacia la habitación, Aarón abrió la puerta lentamente y haciéndome una seña, me indicó que él despertaría a su padre.

-¡Feliz día del papá! –Gritó Aarón alegremente y al ver que Donghae no reaccionaba, frunció su ceño y subiéndose a la cama, se sentó encima de él para moverlo lentamente-¡Papá! –Gritó nuevamente.

-¡Te tengo! –Gritó de pronto Donghae tomando a Aarón entre sus brazos y haciéndolo rodar en la cama junto con él, mientras este reía a carcajadas.

-¡Me has asustado! –Gritó Aarón riendo y al verme con una sonrisa y la bandeja en mis manos, se sentó rápidamente para levantarse y ganarse a mi lado- Te tenemos una sorpresa.

-¿A sí? –Preguntó Donghae encarnando una ceja y al incorporarse, quedó sorprendido de verme.

-Es para ti, por el día del papá –Sonrió mi pequeño alegremente mientras volvía a la cama y veía como yo me acercaba con la bandeja.

-Cariño, acuéstate para dejar la bandeja en tus piernas –Exclamé y asintiendo, se acomodó recibiéndome la bandeja.

-Dios, no puedo creer que hayan preparado todo esto para mí –Nos miró a ambos con una hermosa sonrisa- Muchas gracias.

-Mira, mira, te hice un regalo y te escribí una tarjeta –Comentó Aarón sonriendo ampliamente y Donghae tomó las cosas.

Sus ojos brillaban abriendo el pequeño paquete de regalo y quedó sorprendido de ver un portalápices hecho con palitos de helado, pintado y decorado con pequeños peces.

-Es para que guardes tus lápices en la oficina, le puse dibujos de Nemo –Sonrió feliz señalándolo.

-Está hermoso, Aarón –Exclamó lamiendo sus labios, estaba por tomar la tarjeta, pero Aarón se la quitó.

-Mi mamá dijo que te la leyera yo –Sonrió y cambiando su semblante a uno serio, comenzó a leer- Para mi papá. Mi papito es muy bueno igualito a mi mamá, se levanta muy temprano para vidas ir a salvar. Yo me subo a sus rodillas y me pongo a cabalgar, ico, ico, caballito, que bueno que es mi papá, y por todo lo que dije yo lo admiro de verdad- Terminó de leer y mirándolo, sonrió ampliamente.