(002)

10.2K 1.3K 115
                                    

Después de un agitado día laborar solo esperaba tirarme a mi cama a dormir, dormir y más dormir.

Pero tenía que ir a recoger a Jihoon a la casa de Tae, así que guarde mis cosas personales y salí de mi trabajo, buscando mi automóvil en el estacionamiento.

El cual no se encontraba muy lejos, acomode mi bolso y partí rumbo al hogar de mi castaño amigo, quien fielmente como cada día cuidaba de mi retoño.

No lo culpaba, gracias a él y su novio pude salir adelante, después de no poder encontrar al verdadero padre de mi hijo, entre en una gran depresión; en donde mis padres no estaban de acuerdo con mi decisión, me estaban obligando abortar al engendro que se estaba desarrollando en mi interior, según como decían.

"Pero para mí era una vida más, una felicidad que estaba trayendo al mundo."

Me daba igual de la forma en el que pasaron las cosas, solo el ver a mi hijo, llenaba mi pecho de orgullo solo eso ya me bastaba para hacerme inmensamente feliz."Solo soy un padre soltero, y eso es mucho mejor para mí"; así me preocupo de la vida de mi cachorro, de mi bebé y de mí nadie más en mi vida.

Solo faltaba estacionar el auto cuando un pequeño niño jugaba con un castaño, revolviendo mi estómago al notar la contagiosa risa de mi bebé y lo feliz que se encontraba, del como Tae tiraba la pelota y mi revoltoso bebé iba detrás de ella envuelto en risas.

Que daría por pasar más tiempo con mi bebé, el poder hacerle reír, el pasar cada tarde a su lado. Pero en cambio me la pasaba trabajando y trabajando para ganar una gran miseria.

Me golpe en el manubrio tratando de soltar mi frustración, para apagar el motor y salir a buscar a mi pequeño.

El cual al reconocerme le faltaron piernas para correr a mis brazos, saltando en estos, mientras le cargaba sintiendo su nariz buscando de mi cuello, buscando mi aroma natural a menta y moras. Su aroma favorito, siempre me lo hacia saber cuando trataba de relajarse en mis brazos.

— ¿Cómo se portó este revoltoso, Tae? —Pregunte en el momento que cargaba el bolso de mi pequeño, el cual me pasaba Taehyung divertido al notar como mi cachorro empezaba a dormitar.

— Con Hoseok tratamos de hacerlo dormir, pero solo se mantenía viendo series animadas. — Hizo un puchero, cruzándose de brazos.

— En la noche tuvo muchas pesadillas, quizás tenga eso que ver. —Murmure mientras tocaba el sedoso cabello de mi pelirosa, mientras caía en los brazos de morfeo poco a poco.

— Esperemos que mañana empiece a dormir, es muy divertido verle cargado por Hoseok cuando apenas puede ver el suelo. — 

—Espero que así sea Taetae, bueno nos vemos, saluda por mí a Hoseok. —Me despedí con una pequeña señal de mano y me camine a mi auto. Tratando de no despertar a mi cachorro que se encontraba dormido en mis brazos.

Físicamente era igual a mí, ojos gatunos, piel blanquecina, cuerpo débil y refinado. Era una fiel copia mía pero de pequeño.

Solo que su personalidad era tan diferente, podría ser el niño más dulce del mundo, como gruñón y mañoso. Su temperamento era muy impresionante, seguramente habría sacado los genes de su padre.

Aquel que desde que Jihoon aprendió hablar no lo ha mencionado, y agradezco que no lo haga. ¿Cómo le decía a un niño de 3 años que fue creado producto de una violación?, no sabría cómo decirle la verdad.

La vida puede llegar a ser muy injusta, como una verdadera maravilla, en estos momentos encuentro que mi vida es sencilla, llena de pobreza y normalidad pero inmensamente feliz con lo que he creado de apoco.


"Lustrum" » |JimSu. «Donde viven las historias. Descúbrelo ahora