Me encontraba en la puerta de la casa de Slytherin y esperé paciente hasta que el reloj marcó 22:30 justo y se abrió la puerta, vi asomarse a Malfoy quien me sonrió al verme. Esa sonrisa me debilita fácilmente..
— Me alegra que hayas venido — Dijo alegre.
— ¿Para qué quería que viniera? —
— Si te pillan en el pasillo te retarán, ven pasa. — Me tomó de la mano, se aseguró que no haya nadie en la sala y me llevó hasta su cuarto. El cuarto lo compartía el solo, estaba adornado por los colores de su casa/equipo y estaba lindo.. pero no cálido como el mío.
— Ahora sí ¿Me vas a decir para que me llamaste? —
— Tengo ganas de ti. — Pronunció aquello y me hizo estremecer hasta siento punto. — Y sé que tu también de mi.. Te daré la oportunidad de que me pruebes, aunque tus padres sean unos jodidos muggles. —
— ¿Qué te hace pensar que tengo ganas de ti, Malfoy? Eres un puto egocéntrico. —
— Te excito.. te mojo.. te hago estremecer. Vamos, la única manera de calmar eso sabes que es sólo si nos damos placer nosotros mismos. — Me acarició la pierna con delicadeza.
— N.. no podemos hacer esto, no acá. — Dije débil.
— Hice un hechizo que dura toda la noche, nadie podrá oírnos.. Pero necesito escucharte gritar mi nombre, pidiendo más y más.. — Besó mi cuello tierno, ahí caí rendida.
— Sabes que no soy responsable de mis actos, Malfoy. —
— Nadie te dijo que esta noche tendrías que serlo.. yo tampoco voy a ser de los míos. —
— Haz que mi tiempo contigo, valga la pena. — Susurré y empezó a besar mi cuello mientras me sacaba la camisa que llevaba puesta, yo le empecé a desabrochar la de el, mientras unía mis labios con los suyos. El sacó mi falda y yo su pantalón, con algo de dificultad. Ambos quedamos acostado sobre aquella inmensa cama y el sobre mí. Nos seguimos besando hasta que el desabrochó mi sostén y paró un segundo para admirar mi cuerpo.
— Eres jodida-mente perfecta, dime porqué no te he querido probar antes — Susurró mientras besaba más abajo de mi cuello.
— Porque siempre estuviste ocupado diciendo que era un sangre sucia. — Respondí agitada y decidí bajarle los boxers. Me quedé asombrada por el tamaño de esa cosa, que tenía tan propio y que se estaba por volver tan mío esta noche. El sonrió al notar mi asombro y bajó mis bragas y así quedamos completamente desnudos, el bajó sus besos hasta mis pechos y mordisqueo uno de mis pezones, eso me hizo gemir.
— ¡AAAAH! — Gemí. El sonrió y siguió bajando sus besos hasta mi vientre plano, y luego hasta llegar a mi feminidad. Se detuvo un momento y me miró con una sonrisa traviesa y empezó a colocar besos en cada parte de ahí. Empezó a jugar con su lengua en mi feminidad y eso me desesperada. Le jalé del cabello jodida-mente excitada. Mientras acariciaba mi clítoris, introdujo dos dedos sobre mí, gemí nuevamente. Era fácil introducirlos ya que estaba lo suficientemente mojada para que pasen con facilidad.
— Hazlo de una puta vez — Supliqué.
— Sólo si prometes gritar mi nombre, tras mis embestiadas — Dijo sonriendo y agitado.
— Lo prometo, ahora hazlo — El me besó nuevamente los labios.. Qué ricos eran. Poco a poco empezó a entrar en mi. Se inclinó para llegar a mi oído.
— Virgen — Susurró y besó mi cuello. — Ahora entiendo todo.. —
— ¿Entender qué? — Pregunté agitada, ya que sólo había introducido una punta dentro de mí.
— Sólo tocándote el brazo, te estremecí. Y sólo tocando tu entrepierna, te convertí en un mar. — Sonrió.
— ¿Y qué harás ahora? ¿Me dejarás así sólo porque soy virgen? — Pregunté de mala gana. Se me acercó con una sonrisa.
— Me alegra saber que tu primera vez, es conmigo.. muggle. — Mordisqueó mi oreja y empezó a terminar de entrar en mí con cuidado.. noté que no quería lastimarme. Empezó lento y luego fue más rápido.. sus embestiadas eran jodida-mente únicas.
— ¡AAAAAH! — Gemí. — M..más rr..rápido Dr.aco — Grité agitada, esté sonrió y cumplió con mi petición.
— AAAAAAAAH DR..DRA..CO — Gemí nuevamente, echándome hacía atrás de placer y tirando de las sábanas.
— Nunca creí que ibas a gritar mi nombre en la cama, Dattia — Besó mi cuello, agitado.
— Ahora me toca jugar a mi.. ¿No crees? — Sonreí pícara dando vuelta aquel juego, quien quedaba arriba ahora soy yo.. Uní sus labios con los míos en un placentero beso, mientras el me acariciaba la espalda, bajé mis besos hasta su cuello dejándo algunas marcas y bajar hasta su torso desnudo.. El sonreía observando detenidamente pero se tensó cuando llegué a la bestia que tenía ahí abajo, su miembro. Lo acaricié con la lengua a su amiguito.. y este gimió.
— Tu también tienes que gritar mi nombre, Malfoy — Sonreí.
— Epa.. eso me ha gustado. — Me dedicó una de sus mejores sonrisas, y continué con mi juego dándole placer a el también.. sus miembro erecto. Seguí jugando con mi lengua.
— Da..DattiaAAAAAH — Gimió mientras acariciaba mi cabello, En un momento brusco el terminó encima de mi y volvió a la partida de antes.. introduciéndose en mi, para darnos placer a ambos. Llegué al orgasmo y caí rendida a su lado.
— Para no ser sangre pura y del equipo contrario.. tengo que reconocer que eras en la cama, tan buena como eres con la magia. — Dijo con una sonrisa, aún agitado.
— Bueno entonces yo tengo que reconocer que a pesar de tu ego y tus malas gañas, me ha gustado mucho esto. — Lo miré y el rió por lo bajo.
— Venga debes irte, pronto amanecerá y si te pillan aquí va a ser tu fin. — Tomé mis cosas, me vestí y antes de irme le dediqué una de mis mejores sonrisas a Draco y el me la devolvió placentero.
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Sex with the Enemy [Draco Malfoy] 1era Temporada Terminada.
Ficção AdolescenteOdio, amor, pasión, dolor. Lo que empezó como un juego, terminó con amor. 2da temporada: Haunted: If I Stay