Sex with the Enemy [Draco Malfoy] 1era Temporada Terminada.

Capítulo treinta y cuatro.

Dattia.

Unos cálidos dedos rosaban mi espalda con ternura. Sentí el calor de los rayos del sol sobre mi cuerpo y poco a poco fui abriendo mis ojos adaptándome a la claridad. Levanté la vista y ahí estaba el.. mirandome con sus ojos claros con una expresión de ternura. Me sonrió al ver que lo observaba y hice lo mismo.

— Draco — Murmuré pasando mi mano por sus labios con una sonrisa. Tenía el cabello alborotado al igual que yo, y estaba desnudo, también como yo. Tomó mi mano y la empezó a besar mientras sonreía. 

— Buenos días mi amor — Dijo con ternura. Mis ojos se abieron como plato, me había llamado Mi amor por primera vez y eso me gustaba. Me acerqué y le besé los labios.

— Sigues aquí — Le sonreí.

— Como lo prometí nena — Dijo pasando su pulgar por mi mejilla rosada. — Esta noche tengo algo pensado para ti, un juego — 

— ¿Un juego? — Repetí confundida y el asintió con mirada pícara. Oh joder ¿A qué se refiere?

— Te gustará — Dijo mientras repartía besos por mi cuello. — ¿Quieres unos masajes? — Preguntó mientras me acariciaba los hombros.

— Me encantarían, estuve demasiado tensa — Le dije y luego dirigí mi mirada a la cama de Ginny. ¡GINNY! Mierda me había olvidado por completo. — Draco ¿Donde durmió Ginny? —

— Con Potter ¿Se te olvidan que son novios? — Dijo alzando una ceja y sonreí.

— No, pero me refiero a que el cuarto de los chicos.. bueno son más o menos cuatro camas por cuarto a diferencia de las chicas —

— Vale bonita, pero solo durmieron.. no son como nosotros — Esbozó una sonrisa y hizo que me ruborice toda. 

— ¡Draco! — Reproché ruborizada.

— Eres aún más bonita ruborizada y desnuda — Murmura atrayéndome hacia el. Me mordí el labio. — Nena.. no te muerdas el labio o te haré el amor ahora mismo — Dijo advirtiendo y yo con una mirada burlona me lo volví a morder.

— No tengo miedo que me hagas tuya otra vez, Huroncito — Dije 

— Venga date la vuelta así te hago masajes — Dijo dulce. Asentí y sentada en sus piernas, el empezó a acariciar mi espalda y a masajearme lentamente. ¡Cuánto necesitaba un par de masajes! .. De pronto la puerta suena.

— JODER CHICOS ¿CUÁNTOS POLVOS SE VAN A HECHAR? NECESITO TOMAR MI PUTO CEPILLO DE DIENTES — Gritaba Ginny del otro lado de la puerta. Con Draco nos echamos a reír, qué inoportuna puede llegar a ser a veces. 

Draco empezó a ponerse los boxers, luego un pantalón y arriba nada. Yo me puse mis bragas, un short, un sujetador y arriba la camisa de Draco. Me quedaba holgada, pero bien. Era fin de semana, eso quería decir que hoy tendríamos el día libre.. merecemos un sábado al menos. Draco abrió la puerta y le dio paso a Ginny. 

— Dattia tienes el pelo de haberte echado un polvo terrible — Me dice horrorizada cuando me ve y Draco se reía mientras yo estaba toda roja.

— Venga Ginny, no es polvo.. se le llama hacer el amor eh — Dijo Draco aclarando. ¡Bien, debo estar hecha como un tomate! 

— Lo que sea — Dijo buscando algunas cosas en su estante. — ¿Bajarán a desayunar chicos? —

— Draco ¿Desayunamos? Bajamos y nos sentamos con mis amigos ¿Qué opinas? Le dices a Zabini — Le dige sonriendo. 

— Venga está bien, me iré a cambiar y te paso a buscar con Blaise — Dice tomándome de la cintura para darme un beso en la comisura de los labios. — Te ves muy sexy con mi camisa — Murmura en mi oído y luego se marcha sonriendo victorioso. Ginny miraba atenta