Opuestos.

Treinta y tres.

Llegamos y lo primero que hacemos es visitar a Nora, quien nos recibe con una sonrisa. Nos cuenta que a pesar del dolor en sus rodillas, pudo salir a caminar por el barrio como lo hace casi a diario porque no se preocupa en absoluto ya que sabe que sólo se debe a que va a llover. Emir bromea diciendo que entonces no podremos ir al cumpleaños de Luke y Nora le da un golpecito en la nuca.

- Solo me duelen las articulaciones cuando está por llover. - Nos dice señalándonos con el dedo índice. - Así que mas vale que se cuiden esta noche en el cumpleaños de tu hermano.

- Claro que nos cuidaremos. - Digo con una sonrisa de empatía.

Luego de charlar un rato mas, el compañero de Emir le avisa que ya está ahí y salimos a su encuentro. Caminamos por el barrio mientras ellos señalan faltas, imaginan edificios y anotan cosas que no entiendo. Desearía que todos vieran a Emir ser de esta forma: Adorable, seguro de sí mismo y de sus ideas, felíz. No me arrepiento en absoluto de estar aquí. Quedan en encontrarse en estos días y sin duda los dos están entusiasmados por el futuro.

Decidimos salir a almorzar para celebrar y pasamos el resto del día paseando, tomándonos fotos y disfrutando uno del otro. Varias horas después vamos a prepararnos para ir al cumple de Luke y cuando veo a Emir listo para salir, casi se me cae la mandíbula al suelo. Luce increíble.

Lleva una sudadera blanca amplia, dejando ver todos sus tatuajes y sus fuertes brazos, jeans ajustadisimos y converse azules. Al verlo caigo en la cuenta de cuanto se ha dejado crecer el cabello y a decir verdad, me fascina.

Yo llevo un vestido negro con escote en forma de corazón, botitas negras y blancas y mi campera de cuero negra.

- Señor, usted se ve... apetecible diría yo. - Digo fingiendo seriedad y Emir se echa a reír.

- ¿Apetecible? ¿Segura? - Pregunta aún entre risas y yo asiento arqueando una ceja. - ¿Estás segura de que no podemos llegar más tarde?

- ¡Perverso! - Exclamo riéndome. - Si nos quedamos aquí no iremos en toda la noche y lo sabes.

El asiente, nos tomamos una selfie en la que estoy dándole un beso en la mejilla y automáticamente se convierte en mi nuevo fondo de pantalla.

Veinte minutos estamos en Wayfair. Me sorprendo al ver a Dylan, Acacia, Tom y Gabe entre los invitados.

- Los crucé esta tarde aquí en la universidad. - Me susurra Luke después de que lo abrazo y lo felicito por sus veintiún años. - Lucy estaba hablando de que iba a usar esta noche y no podía no invitarlos.

- Por mi está todo bien, Luke. - Digo dándole unas palmaditas en la espalda. - Si Lucy y Ally no te asesinaron, todo debe estar bien para ellas también.

- ¡Al fin te veo! - Exclama Lucy abrazándome. Se ve hermosamente sexy con un top sin espalda, minifalda negra y botitas negras. - Desaparecida.

- Que tonta eres, exagerada. - Digo feliz al ver que el enfado se le ha pasado.

- ¿Desaparecida por qué? - Pregunta Luke mientras Emir saluda a los chicos. Yo me quedo en silencio y miro al suelo. - Elizabeth ¿qué sucede?

- ¡Nada! - Exclama Ally, que lleva un vestido rojo con espalda cruzada, medias negras y converse rojas. - Hoy no nos hemos visto en todo el día, eso es todo.

- Si, eso es todo... - Dice Lucy rodando los ojos.

Antes de que mi hermano pueda retrucar lo sucedido, voy detrás de Emir a saludar a todos.

Un rato después, Emir está bailando como un idiota con mi hermano al ritmo de una vieja canción de Britney Spears. Son dos gigantes torpes que nos hacen reír a todos.

- Liz ¿Puedo hablar contigo? - Pregunta Dylan sentándose a mi lado y haciéndome sobresaltar.

- Así que has decidido enfrentar la situación y hablarme. - Digo apoyando la espalda contra el respaldo del asiento y cruzándome de brazos. El se rasca la nuca y se encoge de hombros.

- No es eso de lo que quiero hablar y te agradecería que no lo menciones nunca más. - Dice mirando al suelo. - Hoy acompañé a Gabe a anotarse a un curso en la Universidad y me crucé con las chicas. Me contaron algo acerca de que no estás asistiendo a clases ¿Es cierto?

- ¿En serio vas a hacer esto? - Pregunto indignada. - No solo que pretendes que haga como si en Disney no hubiera pasado nada sino que vienes a darme sermones sobre que debo hacer con mi vida, porque eso es lo que estás preparando ¿Cierto?

- No es un sermón. Simplemente sé lo que estás haciendo aunque no lo creas. No voy a decirte lo que tienes que hacer, solo aconsejarte de que no te encierres en ver feliz a los demás olvidándote de ti misma. - Dice intentando abrazarme.

Yo me pongo de pie de un respingo y tomo a Ally y Lucy del brazo hacia la pista.

- ¿Por qué le contaron a Dylan que estuve faltando a clases? - Pregunto cruzándome de brazos.

- Él nos preguntó por ti, si sabíamos en que aula encontrarte. - Dice Ally.

- Está preocupado por ti, te quiere mucho. - Lucy lo mira de reojo.

- ¿Pueden de una vez dejar de hablar de mi como si estuviera enferma o algo así? "Solo estamos preocupados por ti!" - Exclamo haciendo la señal de las comillas con los dedos. - Pues dejen de preocuparse porque estoy perfecta. Ya dejen de meterse en mi vida y ocupense un poco de las suyas.

- ¿Todo bien por aquí? - Pregunta Miles pasándome el brazo por el cuello en un notorio estado de ebriedad. - ¿Sabían que voy a casarme?

- Digamos que Brandon te propuso matrimonio con nuestra ayuda. - Dice Ally entre risas, tratando de alivianar la tensión.

- Cierto. - Suspira. - Brandon es grandioso ¿Verdad?

- Lo es. - Afirmo observándolo sonreírnos desde la mesa. - Y tu estas adorablemente ebrio.

- Shhhh. - Se queja poniendo su dedo índice en mis labios. - Es una de mis últimas noches de no-casado, déjame ser feliz.

- El muchacho tiene razón. - Dice Emir dándole unas palmaditas en la espalda. - Déjalo celebrar. Y tu, ven a bailar conmigo.

Emir me toma de la mano y nos ponemos a bailar al estilo de los '80 mientras pasan Take On Me. Lucy y Harry se suman y entre los cuatro inventamos paso ridículos mientras seguimos al novio de mi amiga hacer payasadas. Ally y Sebastian están en su mundo, bailando como si fuera un lento. Ella con la cabeza apoyada en el pecho de él y Sebastian tomándola con ambos brazos por la cintura. La diferencia de altura los hace aún mas adorables.

Gabe y Tom lucen tremendo. Claramente tienen ganas de irse pero no piensan darle el gusto a los primos malditos como les han puesto de sobrenombre. Luke baila con una muchacha que según yo luce como zorra regalada mientras las chicas se ríen por mis comentarios no felices hacia ella. Por fin, después de tantos días de tensión al menos por un rato todo vuelve a la normalidad.