¿Algún día te tuve? - CAMREN

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Muchos besos son distintos, algunos muestran amor, pasión y simple deseo. Algunos de esos son recordados y otros simplemente olvidados.

Lauren besaba a Camila con tanta delicadeza como si pudiera romperse en algún momento, sintió a la castaña muy desesperada y notó cómo estaba tratado de quitar su camiseta. Camila gimió mientras empezaba a caminar y hacía que Lauren se tropezara en aquel tramo del estrecho camino hasta la habitación que tenía el bus. Lauren paró por un momento y la besó velozmente recostándola en la puerta, suspiró sintiendo los labios de Camila en su cuello y no pudo evitar apretar su cintura cuando sintió un pequeño mordisco. Sorpresivamente la castaña giró para abrir la puerta lo cual le resultó difícil al sentir los labios de Lauren y su cuello, su cuerpo se erizó por completo y dejo salir un gruñido de satisfacción.

Logró abrir la puerta y se giró rápidamente conectando sus labios con los de Lauren de manera desesperada, antes de que la ojiverde la tumbara a la cama fue Camila quien tomó el mando. Lauren la miró sorprendida y sintió que su cuerpo se erizaba al sentir el cuerpo de la castaña sobre el suyo. Camila mordió su labio inferior y empezó a besar a Lauren con pasión y delicadeza, gimió en sus labios al sentir cómo Lauren empezaba a enterrar sus manos bajo sus prendas. La ojiverde quito la blusa de la castaña y miró el sostén de la menor, Camila la miró agitada sin saber que venía después, ambas mujeres sabían lo que estaba a punto de suceder.

No había nada en el mundo que las detuviera.

Lauren giró haciendo que Camila quedé con la espalda en la cama y empezó a besar su cuello suavemente con besos mojados, paso sus labios por la mandíbula de la menor hasta llegar a sus labios los cuales mordió y empezó a besar cómo si su vida dependiera de ello. La castaña enredó sus piernas alrededor de la cintura de la mayor y suspiró al sentir en contacto de su cadera con la de Lauren.

— ¿Camila? —Lauren dejó de besarla al escuchar aquella voz.

Era la voz d Dinah. La mayor iba a levantarse pero la castaña se lo impidió y volvió a besarla, la castaña quitó la camiseta de la ojiverde y sintió que su pecho quemaba al sentir la piel caliente de aquella mujer, aquel calor que le transmitía. El tiempo se había detenido, no importaban los golpes que estaban escuchando, solo quería concentrarse en besar aquellos labios que había extrañado y mucho.

—Ella entrara...—Susurró la ojiverde escuchando los golpes desde afuera.

—Coloqué el seguro, está bien. —Dijo Camila acariciando el rostro de Lauren.

La ojiverde sonrió y besó el cuello de la castaña salvajemente haciendo que esta gimiera, bajó por el camino de sus pechos hasta su estómago, la menor arqueó su espalda y agarró la cabeza de Lauren enredando sus dedos en la larga cabellera. Sintió las manos de la mayor desabrochar su pantalón, lo hizo con tanta rapidez y entonces supo que Lauren quería lo mismo con ella.

Hizo lo mismo con Lauren quedando ambos cuerpos en ropa interior, la ojiverde volvió a recostarse sobre el cuerpo de Camila y suspiró mientras volvía a besarla, ¡maldición! No podía aguantar mucho más.

—Camila...—Jadeó Lauren al sentir las manos de Camila desabrochar su brasier. Sabía que la castaña estaba tentándola.

—Extrañé tanto tu cuerpo. —Susurró en su oído mientras mordía su cuello, Lauren empezó a mover sus caderas sobre las de Camila, la menor mordió el hombro de la ojiverde al sentir aquel contacto. El ambiente empezaba a calentarse.

Lauren en un movimiento rápido quitó el brasier de Camila y rápidamente mordió su pecho izquierdo haciendo que Camila dejara salir un gemido, beso los labios de la castaña mientras balanceaba sus caderas y apretaba los pechos de la castaña. Camila volvió a enredar sus piernas alrededor del cuerpo de Lauren y gimió en sus labios, Lauren había quitado su última prenda y ella hizo lo mismo con la suya.