Capítulo 13

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Hijo

No era posible. Si lo dejaba hacerlo realmente no lo perdonaría, ni a él, ni a sí mismo. Sungmin pudo sentir su aliento caliente mezclarse con el suyo, entonces, cuando estaba por girar su rostro para evitar que sus labios tocaran los suyos, el sonido de un celular que no era el suyo interrumpió el momento. Le tomó a Kyuhyun varios segundos apartarse de Min para mirar quién le llamaba.

Respondió mientras volvía a acomodarse bien en el asiento. Sungmin tuvo tiempo de calmarse, eso había estado cerca.

—No, el viaje a Busan se canceló —Sungmin puso atención, ¿Kyuhyun planeaba viajar a Busan?— Estoy en el estacionamiento, estaré en casa para la cena.

Min sabía con quien hablaba, no necesitaba ser mago para saber quién estaba del otro lado de la línea. Se dio cuenta entonces de que Kyuhyun lo miraba de vez en cuando mientras seguía charlando en el teléfono.

—Sabes que no estás solo en esto, Ryeowook. Volveré. Tengo también arreglado lo del viaje...

Sungmin no necesitaba seguir escuchando más de una conversación privada, así que en cuanto el manager de Kyuhyun golpeó dos veces el vidrio de la van, salió del auto sin decir adiós. Eso desconcertó a Kyuhyun a tal punto de despedirse estrepitosamente de su esposo para ir en busca de Sungmin, a quien alcanzó en menos de treinta segundos.

—¡Espera! —lo haló del brazo. Sungmin se zafó— No te vayas.

—Debo aclarar que no tengo tu tiempo. Mi hijo, mi sobrina y mi mejor amigo me esperan. Tú claramente tienes una vida muy ocupada, no seré tu amante de una noche de nuevo.

—Sungmin, creo que confundes las cosas...

—¿Confundir?... ¿quién era quien estaba hablando de no olvidarme y estuvo a punto de besarme a pesar de ser un hombre casado? ¿O tu memoria es tan pobre? Vine aquí porque necesitaba decirte algo importante, pero ahora no sé si hago lo correcto. Hice una promesa a mi hijo y debo cumplirla.

—¿De qué hablas? —Sungmin alzó la vista, sus ojos lucían brillosos, estaba seguro de que las lágrimas pronto comenzarían a caer por su rostro.

—Después de saberlo quise decírtelo tantas veces, pero siempre estabas con Ryeowook, los dos se veían tan bien juntos que no quise arruinar lo que ambos tenían. Yo oculté el hecho de estar embarazado, preferí huir y hacerlo todo por mi cuenta, sin incluirte.

—Sungmin... ¿qué...?

Min alzó su mano para detenerlo, necesitaba decirlo o moriría. No podía seguir guardándolo, a pesar de que dolía.

—Sé que es difícil de creer, pero es así. Tenemos un hijo, Kyuhyun. Tú eres la razón por la cual decidimos venir a Seúl, para contarte todo y que Hyun te conozca después de trece años.

El rostro de incredulidad en Kyuhyun era evidente. La sorpresa también se reflejaba en esos ojos y también en sus labios abiertos. El sonido de todo alrededor se apagó para él y solo era capaz de escuchar la voz de Sungmin diciéndole que tenían un hijo y que ese chico ya era un jovencito de trece años, la misma edad que Nam.

—El día de la fiesta... fue en ese momento...

—Sí, lo supe tres semanas después. Dejé de asistir a la Universidad cuando mi barriga comenzó a crecer. Sabía que Ryeowook también esperaba un hijo tuyo, así que en ese momento yo no tuve valor para decirte nada, pensé que podía hacerlo todo yo solo —Sungmin ya lloraba—. Fui un completo idiota, lo sé, pero intento enmendar mis errores.

—Tenía derecho de saberlo, Sungmin —Kyuhyun apretó la mandíbula— ¡Tenía todo el maldito derecho de saberlo!, ¡me ocultaste a mi hijo!

Era una suerte que esa área del estacionamiento estuviera despejada, o todos habrían sabido la verdad en ese momento.

—Lo lamento, sé que hice mal, pero estaba asustado. Yo no quería destruir su familia —el llanto de Sungmin fue más doloroso cuando los ojos de furia de Kyuhyun perforaron su alma. Estaba con el derecho se sentirse furioso, pero le dolía que lo mirara de esa manera tan cruel.

—¡Tú me gustabas!, ¡me gustabas, Sungmin! Si me lo hubieras dicho yo habría peleado por ti. ¡Los habría defendido a los cuatro!

—¿De defendido? ¿De qué estás hablando?

—No lo entiendes —comenzó a reír, pero no era una risa divertida, sino más bien de dolor—. No voy a dejar que vuelvas a huir. Tampoco dejaré que te lleves de nuevo a mi hijo. Si tú lo haces...

—¿Qué?, ¿vas a quitármelo? —preguntó Sungmin tomado valor.

—Voy a buscarlos. No volverás a alejarte de mí —Min apretó los dientes—. Eres mío, al igual que siempre he sido tuyo.

¡Mentiras! Sungmin no pudo evitar mirarlo con molestia, si pudiera golpearlo lo haría, pero no quería meterse en problemas por ello, así que se guardó las ganas.

—Basta. Tú tienes a Ryeowook y a tu hijo. No te estoy pidiendo mantener una doble vida con Hyunmin y conmigo. Jamás lo aceptaría. Si el origen de Hyunmin sale a la luz, él será infeliz, todos lo atacarán, tu familia lo hará, incluso a ti. No quiero eso para mi hijo. Dejaré que se conozcan, pero no permitas que lo lastimen. Es lo único que te pido, Kyuhyun.

Kyuhyun fue consciente de las palabras de Sungmin, así que asintió con la misma expresión seria de hacía unos momentos. Entonces le extendió a Sungmin una tarjeta donde figuraba su nombre y su número personal.

—Te llamaré mañana, necesitamos hablar en un lugar más privado. Te diré todo hasta entonces.

Kyuhyun volvió a alejarse y subir a la van sin agregar nada más a la discusión. Min miró la tarjeta de color negro con letras doradas con rostro preocupado. Kyuhyun y él se reunirían de nuevo para tratar el tema con más calma, y una vez arreglado todo podría presentarle a Hyunmin tal como lo tenía planeado.

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Siento no publicar como lo tenía planeado el día de ayer. Me atacó la migraña de nuevo, incluso esta mañana desperté igual, hasta hace poco comencé a sentirme mejor, pero todavía duele. Para quienes no saben, sufro de migraña desde hace años. Hacía tiempo que no me pasaba pero he dormido poco últimamente, así que debió ser por eso.

Disculpen si no respondo a sus comentarios como es debido, me molesta la luz de la laptop, y por desgracia no corregí el capítulo, de verdad lo intenté pero es muy molesta la luz en mis ojos. Lo siento.

Estaré ausente de publicaciones de este fic por dos semanas. Tengo algo muy importante que terminar y no puedo escribir mucho en este lapso de tiempo. Solo dejaré lo que ya tenía avanzado en las otras historias. Una vez que vuelva actualizaré más seguido hasta alcanzar los capítulos que no subiré es estas dos semanas. Gracias por su comprensión.

3 Kilos 200 gramosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora