Capítulo 34

1.9K 275 58
                                    

Antes de la reunión.

¿Besando a Ryeowook? Kyuhyun se adentró en sus memorias. Las únicas dos ocasiones que había besado a Wook en su vida fueron en su boda y aquella vez que los reporteros pidieron un beso frente a muchas personas; fue incómodo para los dos pero tuvieron que hacerlo, de lo contrario hubieran sospechado, pues no era la primera vez que lo pedían y se habían negado, además, después de lo que Nam dijo acerca de dormir separados, los rumores se habían intensificado.

Kyuhyun se orilló en la autopista luego de que el semáforo cambió a verde. Ambos se mantuvieron callados por más de un minuto, hasta que el castaño se giró para mirarlo. Sungmin tenía la vista perdida, tal vez reproduciendo aquel momento en su mente, aquel instante en el que se tambaleó y fue débil, donde su corazón terminó de hacerse añicos.

—Mis sentimientos no han cambiado —empezó Kyuhyun—. Te lo he dicho, ¿no? Puedo decir te amo porque eso es lo que siento. Pero también lamento hacerte pasar por todo esto.

Sungmin tragó saliva, tocado por las palabras de Kyuhyun que habían logrado que se formara un nudo en su garganta.

—Sufriste desde el momento que supimos el uno del otro. Es por eso que quiero que seas feliz el resto de tu vida. Haré cualquier cosa por ti y por nuestro hijo.

Kyuhyun tomó la mano de Sungmin, pero este al sentirla, la retiró de inmediato y salió del auto sin previo aviso. Kyu lo imitó y rodeó el auto para encontrarse con él. Sungmin lloraba.

—Te creo. Pero no será tan fácil. No puedes decir simplemente me voy a divorciar y tengo otro hijo, todo el odio recaerá en Hyunmin y en mí.

—Vayámonos, entonces. Vámonos de Corea, vivamos lejos de todos, nosotros cinco.

—¿Cinco?

—Ya te dije que quiero tres conejitos, como tú.

—Estás loco, no puedes dejarlo todo. —Min lo miró en negativa—. Kyuhyun, entiende que no es fácil ¿Por qué tienes tanta confianza? Tu carrera no será la misma, tener un hijo fuera del matrimonio es...

—Eso no me importa. Lo más importante para mí ahora son ustedes —se acercó a él y rodeó su cintura—. Lee Sungmin, entiende que no voy a perderte otra vez.

Kyuhyun capturó sus labios estrechándolo más contra sí. Sus besos se mezclaron con el agua salada de sus lágrimas mientras profundizaba más en sus caricias. Sungmin había correspondido casi al instante en que sus bocas se encontraron, amaba tanto a Kyuhyun que si las cosas no funcionaban como el castaño decía, le costaría mucho recuperarse de otro golpe así. Separarse nuevamente sería muy doloroso.

—Te quiero, te quiero —repetía Kyuhyun justo después de cortar el beso, haciendo que sus labios rozaran nuevamente.

—Yo también, Kyuhyun —confesó Sungmin mirándolo a los ojos, luego le dedicó una sonrisa—. Te advierto que mi corazón no puede repararse dos veces. No me hieras.

—No lo haré —juntó sus frentes. Sungmin soltó una risita divertida— ¿Qué es tan gracioso?

—Nada, recordé algo que escribí hace tiempo.

Kyuhyun arqueó una ceja, después sonrió con malicia.

—Ahora que recuerdo, Nam tiene todos tus libros, estoy seguro de que me los mostrará con gusto si se los pido —el castaño se separó y volvió al auto. Sungmin tardó en procesar la información, entonces subió también, en esta ocasión con una histeria reveladora. Las lágrimas habían dejado de fluir.

***

Ryeowook miraba por la ventana para ver si en esta ocasión podía ver el auto de Kyuhyun acercándose, pero no fue así. Estaba nervioso, no podía negarlo. Conocer a Sungmin lo ponía muy inquieto. Wook pensaba que tal vez Sungmin lo odiaba por todo lo que había tenido que pasar solo sin la ayuda de Kyuhyun, y de ser así no lo culpaba. Se encargaría de pedir perdón de rodillas si fuera necesario. Ayudaría a Sungmin a partir de ahora en cualquier cosa que le pidiera, se lo debía.

—Estás muy tenso, debes calmarte. No creo que él te odie, Ryeowook —dijo Yesung desde la cama, aún guardaba reposo por su herida en la cabeza.

—¿Pero qué tal si sí?

—¿Pero qué tal si no?

—¡Yesung!

—Ya, no te angusties, nadie va a odiarte. Yo creo que podrías acercarte a Sungmin, ahora que sabe lo que sucede podrían ser amigos.

—¿Crees... crees que Sungmin lo quiera?

—Estoy seguro —Wook mostró una pequeña sonrisa.

Ahora más que nada Wook sabía que había hecho lo correcto. Esa mañana muy temprano había llamado a su abogado. Le había pedido iniciar con el proceso de divorcio. Si ambos estaban de acuerdo podrían separarse en poco más de dos meses. Él y Kyuhyun podrían por fin hacer sus vidas con las personas que amaban. Si Kyuhyun hubiera sido quien pidiera el divorcio primero tendría problemas debido a su trabajo, pero él en cambio no tenía que arriesgar alguno, solo con la ira de su padre.

—Parece que alguien llegó.    

--------------------------

n_n ¡Hola! Gracias por leer el capítulo😘 espero que puedan comentar.

¡ELF México, suerte con la venta de boletos! 💙Deséenme suerte también. Espero leerlos pronto! 💋

3 Kilos 200 gramosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora