Mensaje
Kyuhyun había tomado un descanso de su trabajo para prestar toda su atención en la empresa y la herencia de su padre, por ningún motivo dejaría que Kim lograra lo que quería. La visita que le hizo el día de ayer a Kangin no había servido de mucho, o eso creyó hasta recibir esa misma mañana un mensaje de Kangin pidiendo reunirse con él.
"Lo estuve pensando y decidí que voy a contarle todo. Lo espero a las seis en la dirección que adjuntaré enseguida" Y le había mandado la dirección.
—¿Está dispuesto a ayudarme?, ¿hablaría con su esposo? —Kyuhyun dio un suspiro haciendo su cabeza hacia atrás, descansando en el asiento de su auto.
—Kyuhyun, ¿te sientes bien? —Sungmin apareció al lado de la ventana del auto, haciendo que el castaño se sobresaltara.
—Sí, estaba... solo pensaba en qué hacer ahora. Lo siento por preocuparte, estaré de regreso esta tarde, debo atender un asunto primero. Los llevaré a cenar, ¿qué te parece?
—Es una excelente idea. Hyunmin estará feliz, últimamente no deja de preguntar por Nam. —Sungmin se acercó más hacia la ventana y le dio un ligero beso en los labios—. Ten cuidado y no te estreses, todo saldrá bien.
Kyuhyun asintió antes de despedirse y hacer andar el auto. Sungmin suspiró con preocupación mientras veía al castaño alejarse por la calle.
***
—Tienes que tener cuidado de no llenar mucho el algodón con agua, de lo contrario inundarás el hormiguero —dijo Yesung, mientras observaba a Jongnam cuidar del hormiguero que había adquirido recientemente.
—¿Así?
—Sí, así está bien. Ahora pueden beber agua. No olvides humedecerlo o morirán.
Nam sonrió mientras observaba a sus pequeñas hormigas recorrer el hormiguero de acrílico. Yesung tuvo tiempo entonces de observarlo mejor. Tenía un hijo con Ryeowook, no podía creerlo, a veces recordaba todo lo que tuvo que pasar para volver a verlo, todos aquellos malos ratos, los golpes, las ofensas y burlas; saber que tenían un hijo parecía solo un sueño.
—Me da miedo que se salgan y me muerdan. —Wook hizo una mueca de dolor y Jongwoon se rio por ello.
—Eso no pasará, quien va a morderte soy yo —susurró en su oído, haciendo que Ryeowook se sonrojara— ¿Quieres que te ayude a cocinar?
Cambió el tema, regresando de vuelta a la casa. Ryeowook no fue capaz de decir nada, solo se limitó a seguirlo mientras dejaba a Nam cuidar del hormiguero en el patio trasero de la casa.
—Papá —interrumpió Nam, evitando que se fuera— ¿Cuándo volveré a la escuela?
—¿No te sientes cómodo aquí, hijo?
—No es eso, es solo que estoy perdiendo clases. Extraño la escuela, y aunque parezca raro, a mis compañeros —Ryeowook sonrió.
—Te prometo que volverás pronto, sé paciente —Jongnam asintió—. Yesung y yo vamos a preparar la comida, ¿quieres ayudarnos?
Nam negó apuntando hacia el hormiguero sobre la pequeña mesa, así que Wook no insistió y entró a la casa. Cuando llegaba a la cocina fue interceptado por Yesung, quien lo abrazó mientras daba algunas vueltas simulando un baile, después finalizó con un beso.
—Estás de muy buen humor hoy, Kim Jongwoon.
—He estado hablando con Kyuhyun, me ofreció trabajo. También quiero retomar mis estudios en la universidad. Buscaré a mis padres —dijo, Yesung estaba seguro de que sus papás debían creer que había huido, pues en aquellos tiempos llegó a discutir con ellos debido a sus estudios—. No tengo mucho, pero quiero ofrecerles un hogar a mi lado. Yo... tampoco tengo un anillo conmigo, solo mi palabra y mis sentimientos, Ryeowook. Cuando seas libre me gustaría que aceptaras ser mi esposo.
Ryeowook no tuvo siquiera que pensarlo. Posó sus manos en ambas mejillas de Jongwoon y lo haló para besarlo. Pese a todo lo que estaba pasando, estaba feliz de tenerlo consigo, porque su hijo y Yesung le daban la fortaleza para enfrentar a su padre.
—Sí.
***
Kyuhyun aparcó el auto frente a aquel desguace abandonado. Entendía por qué Kangin lo había citado ahí, era un lugar donde no parecía haber ninguna persona, donde no solía pasar nadie, ni siquiera los vagabundos. La cantidad de carros chatarra estaban por todo el lugar. Esperó un par de minutos hasta que Kangin apareció al frente, parecía haber llegado del otro lado del único edificio. Su ex chofer lucía nervioso, probablemente pensando que había hecho mal en citarlo ahí y contarlo todo, así que para evitar que se retractara, Kyuhyun habló.
—¿Vas a decírmelo? Tienes mi palabra, Kangin, no dejaré solo a tu hijo.
—¿Viene solo?
—Sí, no voy a delatarte.
—Señor Cho, usted...
Entonces un hombre de traje salió, estaba oculto detrás de una pila de autos. Apuntó a Kyuhyun con un arma dispuesto a apretar el gatillo. Era una trampa.
—¡Lo siento! Yo no quería, señor Kyuhyun. Amenazaron a mi familia. Dijeron que los matarían si no mandaba el mensaje —dijo Kangin, intentando explicarse.
—También me disculpo, Kangin, porque no estoy solo.
—¡SUELTA EL ARMA!
Cuatro miembros del equipo de guardaespaldas de Kyuhyun salieron entre diversos automóviles, ocultos desde mucho antes de que Kyuhyun llegara al lugar.
—Verás, dile a tu jefe que no soy ningún idiota. Al principio pensé que Kangin de verdad me ayudaría, pero después me pareció sospechoso que cambiara de idea, después de todo lo hacía para ayudar a su hijo. Después de meditarlo en mi oficina, llegué a la conclusión de que había solo dos opciones, que Kangin de verdad estaba dispuesto a ayudarme, o que era una trampa de Kim. Decidí que necesitaba tomar ventaja de esto. Mis hombres tienen un buen rato esperando, así que ahora no hagas nada estúpido y entrégate.
Pero después del discurso de Kyuhyun, quien lo apuntaba con el arma no se rindió.
—¡Baja el arma o dispararemos! —gritó una de las escoltas de Kyuhyun.
—¡Esperen! —no podía permitirse perder otro testigo.
Sucedió en un par de segundos. El hombre apretó el gatillo hiriendo a Kyuhyun en el pecho, luego cuatro balas más fueron a parar en el cuerpo de aquel sujeto matándolo en el acto.
—¡Señor Kyuhyun! —Kangin corrió hacia donde yacía el castaño, ¿seguía con vida?
—¡Auch! Eso dolió —Kyuhyun se levantó desabotonando de un tirón su camisa, mostrando detrás un chaleco antibalas—. Ya les dije que no soy ningún idiota, aunque si hubiese disparado a mi cabeza...
—Lo siento, cuanto lo siento, señor —Kangin se arrodilló a su lado, pidiendo disculpas una y otra vez.
—Te doy mi palabra, Kangin. Ayudaré a tu familia —Kangin alzó la mirada.
—También voy a ayudarlo.
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Hola! De vuelta después del maravilloso momento en el SS7 💙 ¿Cómo lo pasaron?
Kangin ayudará a Kyuhyun! Solo esperemos que Kim no siga haciendo de las suyas, ya lo intentó con Kyuhyun 😭
Muchas gracias por leer, por sus comentarios y estrella 🌟
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3 Kilos 200 gramos
FanfictionMICRO FIC Sungmin se enamora de Kyuhyun, pero, en una noche de alcohol de por medio, ambos terminan teniendo relaciones que trae como consecuencia un embarazo. Dolido, sabiendo que Kyuhyun no le corresponderá jamás porque tiene novio, decide irse de...