Siete ® H.S

Capítulo 66

Tuve que estar alrededor de 10 minutos discutiendo con Ray, ya que no paraba de insistir en acompañarme, ya que aún me costaba moverme con normalidad. Tuve que aceptar coger un palo que hiciese la función de un bastón; cualquiera que me viese echaría a correr, menudas pintas llevaba... Le di gracia a Dios que el tramo del bosque no fuese muy extenso, en menos de dos minutos podía ver el lago, y a Harry de pie lanzando piedras al agua. En cuanto escuchó ruido se giró y al verme, se acercó rápidamente a ayudarme.

— ¿Cómo estás?

— No muy bien — no iba a mentirle, y menos a él — entre la paliza y la muerte de Travis...ha sido un día duro — me agarró con suavidad de los hombros y me facilitó el sentarme en el césped.

— Todos estamos muy afectados por su muerte, era un buen hombre — admitió. Fruncí mis labios y respiré profundamente.

Había aceptado quedar con él por dos motivos, el primero de ellos era para disculparme por lo que le había dicho el otro día y, el segundo y más relevante, contarle lo que tenía planeado, y eso me ponía completamente nerviosa, porque no sabía como decirle aquello. No había palabras que suavizasen la acción que ello conllevaba.

— Quería pedirte perdón por haber acusado a Ben, me equivoqué. Tuvo que poner al teléfono a un hombre y su tono de voz deberían...

— No pasa nada, de verdad — me miró extrañado por mi respuesta — Yo quería pedirte perdón por decirte lo que te dije y de las maneras en las que lo hice...y agradecerte una vez más tenerme paciencia, y no dejarme ir — se apegó a mí y me abrazó, y a pesar de que sentía que todo mi cuerpo se retorcía de dolor, aguanté. Porque por un momento así valía la pena.

— Siempre estaré a tu lado, pase lo que pase — acarició mi mejilla herida, eché mi mirada hacia abajo — Y le haré pagar por lo que te ha hecho.

— No quiero venganzas, Harry— hablé con sinceridad, y fue el momento perfecto para comenzar a contarle la verdad — He tocado fondo.

— ¿Cómo? — se separó de mí y me miró confundido. No tuve la fuerza de voluntad de mirarle a los ojos antes de contárselo todo.

— Anoche, toqué fondo. Entre que me había enfadado contigo, lo ocurrido allí dentro, la muerte de Travis...no puedo aguantar nada más Harry, llevo mucho tiempo soportando esos momentos de ansiedad y sabía que en algún momento caería — noté cómo mi corazón se aceleraba, no sabía cómo decir aquellas palabras para que no sonasen egoístas — llevo mucho tiempo planeando marcharme de Woodside, para siempre; nunca he sabido cuando, pero con lo sucedido estos días... voy a irme, Harry— en ese mismo instante le miré, y me arrepentí de haberlo hecho al segundo. Sus ojos jamás me habían mirado de aquella manera, decepcionados, rotos. Se puso de pie y pasó su temblorosa mano por su nuca.

― Así que, durante todo este tiempo sabías que te irías, y que no te llevarías a nadie contigo. Eres una egoísta ― me miraba desde arriba, con desprecio. Aunque se podía notar en sus ojos como, de lo que de verdad tenía ganas era de romper a llorar. Le había hecho daño, y creo que eso me dolía mucho más.

― Lo tenía pensado desde mucho antes de conocerte, empezando por ahí ― le aclaré ― por eso me costó la misma vida aclararte lo que realmente sentía por ti; porque sabía que tarde o temprano acabaría marchándome.

― ¿Dejando a tu madre atrás?

― Ahora ella está en el centro de rehabilitación, y mi tío también está aquí para ella.

― Me sorprende con la frialdad que me estas contando esto — negaba con la cabeza y soltó una carcajada irónica.

― No es eso Harry, sólo te estoy contando la verdad.