3 de Marzo de 2016
Ethan alzó la vista de su teléfono y miró a Sophia, quién se mordía las uñas, sentada arriba de una de sus piernas.
Suspiró y le quitó su mano de la boca.
—Deja de comerte las uñas, has estado meses para que estén largas —la regañó y ella lo miró aterrada.
—No sé que voy a hacer, ¡no sé qué voy a decir! Esto es demasiado —respiró.—¿Y si quiere que hable de la escuela? ¿O de mi familia? ¿De mis mascotas? ¡Va a pensar que soy una asesina!
—Soph, no eres una asesina, no fue tu culpa que tu primer conejo se haya escapado a la calle —la tomó de los hombros.—Y mi mamá no te va a preguntar sobre tus mascotas, es lo menos probable.
—¿Y lo más probable? —preguntó desesperada.
—No lo sé, tal vez te pregunte cómo nos conocimos aunque ya lo sepa, son solo preguntas que hará para tener tema de conversación —le acarició la mejilla.—Ella es muy agradable, lo prometo. Va a amarte, a ti todo el mundo te ama. Le agradaste por todo lo que le he contado de ti.
—Tal vez es pronto para conocerla...
—Llevamos 6 meses saliendo —se rió pensando en lo adorable que era su novia nerviosa.—Es el momento adecuado.
—6 meses y 5 días —susurró tragando en seco.
—6 días contando el 29 de Febrero —le dio un leve empujón.—Debes pensar en que todo saldrá bien. Además eres mejor amiga de Grayson y Cameron te adora. Tienes todo a tu favor.
—¿Alguna vez Cameron odió a alguna de tus novias? —preguntó tratando de pensar en otra cosa.
—Tuve una sola novia formal y jamás se la presenté a Cam, menos a mis padres —la sentó en sus piernas haciéndose hacia atrás en el sofá.
—Oh Dios, soy la primer novia que le presentarás a tus padres —se agachó poniendo sus manos en su estómago.—¿Cómo tu no tienes miedo de que les de una mala impresión y te deshereden? —Ethan soltó una carcajada.
—Tu no das malas impresiones.
—¿¡Y SI ERUCTO!? —se reincorporó rápidamente.—O DIGO UNA MALA PALABRA.
—Cam, Gray y yo decimos malas palabras siempre en frente de mamá —se encogió de hombros.
Sophia mordió su labio mirando a la pared. Tal vez iba a vomitar.
[•••]
Lisa esperó a que Sean y los gemelos se alejaran de la cocina lo suficiente y tomó la cara de Sophia entre sus manos.
—¿Eres una buena chica? —preguntó alzando lass cejas.
Sophia sintió su labio temblar.
—Y-yo... ¿qué? —frunció el ceño.
—Hablando generalmente, digo, ¿eres buena persona? —volvió a preguntar.
—Oh, si, por supuesto —respondió sin dudar, lo que menos quería era que Lisa creyera que dudaba de su misma.
—¿Cuántos novios has tenido? No te voy a juzgar —le prometió sin soltar su cara.
—Ahm... ¿Tres? Tal vez cuatro si contamos Jardín de niños —Lisa suspiró y fue aflojando sus manos, hasta bajarlas a ambos lados de su cuerpo.
—¿Alguna vez te emborrachaste? —se cruzó de brazos.
Sophia se sintió un poco más aliviada para poder contestar.
—No, pero tomaba alcohol antes. Desde que salgo con Ethan no he vuelto a tomar una gota —dijo orgullosa.
—¿Has influenciado a mi hijo para que haga algo que tú querías?
—Lo hice ir a comprarme helado cuando estuve enferma a pesar de que el doctor dijo que no podía tomar cosas frías —soltó todo el aire en sus pulmones.
Lisa la analizó de arriba a abajo. Luego de mirarla a los ojos le sonrío.
—Te ves dulce. Pareces ser una muchacha de familia —le dijo amablemente.
—Lo soy... un poco —se sonrojó.
—No dudo en que quieres a mi hijo, pero es muy raro que te hayas fijado en él —Sophia soltó una risa.
—De hecho, no es la única que lo piensa... Es verdad en cierta parte, Eth y yo somos muy distintos. Y usted... —Lisa la interrumpió.
—Nada de "usted", Sophia. "Tú", dime Lisa.
—... Y tú sabes cómo es él, pero esas cosas de su personalidad me encantan —terminó de hablar con una sonrisa en la cara.
—Estoy segura de que lo ayudarás a cambiar algunos aspectos, lo haces mejor persona, cariño —le tomó la mano agradecida y luego se aproximó para abrazarla.
Mientras su suegra la abrazaba, Sophia paró de temblar y sonrió levemente. Lentamente levantó sus manos hasta la espalda de Lisa y también la abrazó.
Grayson dio un grito llamando a su mamá y Lisa suspiró, mientras se separaban.
Sophia empezó a reír.
—Creí que eran independientes —se burló la muchacha.
Lisa comenzó a dirigirse a la puerta de la cocina.
—No importa la edad que tengan siempre harán lo mismo —rodeó los ojos y salió en camino a su hijo.
Sophia continuó sonriendo y estaba por sacar su teléfono pero Ethan entró a la cocina, rápidamente yendo hacia ella.
—Te dije que te ama —le dijo él, convencido.—Se fue con una sonrisa. Le encantas.
—Dios, creí que me pondría tan nerviosa que no contestaría nada o que me quedaría helada mirando a la nada, como cuando tengo que hablar en público —Ethan se rió y la sostuvo por la cintura.
—A mi papá le agradas, me dijo que eres muy guapa y pareces muy inteligente. Y que estaba orgulloso —se encogió de hombros.—Salió todo bien, puedes empezar a respirar —bromeó y le besó los labios repetidas veces.
—Empezaré a respirar cuando terminemos de comer porque sinceramente me da miedo hasta llevarme comida a la boca y atragantarme de los nervios —Ethan se rió besándole la frente.
—Tu eres la indicada —afirmó y Sophia lo abrazó sonriendo.
No hacía falta decirlo, toda la familia Dolan sabía que Sophia era la indicada.
