-¿Estas lista hija?-papá entró en mi habitación en el momento justo en el que yo me había quedado perdida, contemplando lo vacío que se veía todo sin mis cosas.
-¿Hija?
-Ya voy papá.Suspiré una última vez el aire cargado de energía y calidez que siempre se respiraba en mi habitación, ese aire que siempre me representaba tan bien.
Eran pasado las 7 de la mañana, lo sabía porque había desconectado mi celular del cargador hacía unos 5 minutos, mientras me despedía de esas 4 paredes que me habían acogido durante los 16 años que había vivido en ese lugar.
Ahora, todo sería diferente, en todas las circunstancias.
Como echaría de menos este lugar.Apreté las correas de la mochila que llevaba colgada en los hombros, y di un paso atrás para ir junto a papá.
Él me miró expectante, al notarme un poco perdida.-¿Estas bien hija?-me dijo cuando yo cerraba la puerta de mi habitación con la mirada en el suelo.
-Lo estoy papá, es solo que me estaba despidiendo de este lugar-evité su mirada, sabía que si lo hacía no aguantaría las ganas de echarme a llorar en sus brazos, y no quería hacer eso. No quería dejarlos como última visión a su hija llorando, sabía que les rompería el corazón si eso pasaba.-No lo digas de ese modo que siento que te me estas yendo para siempre, sabes que esta será siempre tu habitación, podrás volver muy pronto aquí.
-Gracias papá-lo abracé sin que él lo esperara.Papá me acogió en sus brazos como cuando era una niña y corría a sus brazos cuando tenía miedo de los monstruos que pensaba que había en mi habitación; y me besó la cabeza en repetidas ocasiones.
-Sabes que te amamos mucho hija, no estarás sola en estos momentos, siempre estaremos para ti.
-Y yo los amo por igual papá, pero esto me revuelve los sentimientos y me hace querer dar un paso atrás y quedarme con ustedes-levanté la mirada, ya no perdía nada viendo los ojos de mi padre, esos ojos que me había heredado; ya estaba llorando de todas formas.
-Hija, estás haciendo lo correcto, no lo dudes. No renuncies a lo que quieres hacer por esto, sigue adelante a pesar de todo lo que pase, nosotros estaremos contigo todos los días, aunque no estemos juntos físicamente, siempre nos llevaremos los unos a los otros en el corazón y en la mente. Siempre recuerda eso hija.Lo abracé de nuevo, esta vez con más fuerzas que nunca.
-Los voy a extrañar a montones, no habrá día en el que no les eche de menos.
-Nosotros también te extrañaremos mucho hija, pero sabemos que siempre estarás ahí, que a pesar que nos separen unos kilómetros no nos hemos olvidado.
-Me será imposible olvidarlos algún día, jamás olvidaré a mis padres.
-Y nosotros jamás nos olvidaremos de esa niñita linda que ha crecido tanto. Es hora de irnos-en un gesto tierrno, papá me limpió las lágrimas de las mejillas, él también tenía los ojos rojos. -Si no salimos ahora estaremos atorados en el tráfico de Alessia.
-Vamos.Papá y yo bajamos las escaleras, mientras yo sentía un nudo el estómago al mirar cada una de las fotografías que se encontraban en ese lugar, todas de cuando era niña, de mis travesuras, de mis ocurrencias y mis logros, siempre al lado de mis padres, tomándome la mano, o simplemente detrás de la cámara fotográfica. Ellos siempre habían estado a mi lado.
Salí de casa, dejando a papá atrás mientras cerraba las cerraduras de la puerta, mamá me esperaba con los brazos abiertos junto al auto, me dejé envolver en sus brazos, con las lágrimas todavía presentes, esperando el momento de salir de nuevo.
-¿Estás lista jovencita linda?-mamá me tomó entre sus manos y me dio un beso en la frente.
-Lo estoy mamá.
-Qué bien hija-mamá me contempló con pesar mientras me soltaba. -Esta casa no va a ser lo mismo sin ti, tú eres nuestra luz, esa que ilumina nuestros días más obscuros.
-No digas eso má, que solo me haces sentir las culpable por esto.
-Oh vamos, tú no eres culpable de nada, estás creciendo, esto tenía que suceder algún día.
-Pero tal vez no tan pronto, ninguno de los tres estábamos preparados para esto-no lloraría.
-Hija, de algo de lo que estoy completamente segura es que nadie se prepara para algo así nunca, puedes hacerte a la idea, pero nunca te acostumbras a esto. Eres nuestra niña, y nunca dejaras de serlo.
-Te amo mamá.
-Te amo hija.
![](https://img.wattpad.com/cover/100101341-288-k512749.jpg)
ESTÁS LEYENDO
¿Y si te digo que me enamoré de ti?
Teen FictionTal vez ese día no debimos habernos besado, tal vez nunca debimos de sentir esto, aunque fuese el beso más maravilloso nos trajo tantos problemas, pero, no puedes cambiar lo que ya pasó, aquél día demostramos lo que callamos durante bastante tiempo...