[30] Un Vago Recuerdo

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♔ CAPITULO XXX ♔




2:01 p.m.

Narra Shuu

¡Esa ruidosa siempre hace lo que quiere!, realmente debería dejar esa costumbre suya de meterse en los problemas de los demás, algún día no podrá evitar salir lastimada, apenas le conté de nuestra historia salió disparada a querer arreglarlo, como si fuera algo tan sencillo, Reiji no podrá perdonarme por completo, lo sé, por eso estoy siguiendo a esa tonta que se fue imprudentemente donde Reiji.

》Laboratorio《

Desde lejos me percaté que la puerta estaba abierta, al acercarme escucho una voz nítida y suave, era Yui

-Está bien dejar de actuar, Reiji-san-no dijo nada-estaré aquí hasta que se desahogue por completo, estar solo es muy triste no? Ya no necesita preocuparse...

¡¿Que sucedía exactamente aquí?!, ¿Porque ella está diciéndole eso a Reiji?

Trate de echar un vistazo dentro del cuarto.

No creía lo que mis ojos veían.

Reiji estaba acorralando a Yui contra un estante de libros, parecía forcejearla oprimiéndola, esto está mal, muy mal, no puedo permitir que Reiji descargue sus emociones sobre ella, no lo puedo permitir.

Cuando estaba a punto de adentrarme por completo, Reiji soltó sus muñecas, liberándola del agarre.

-Tu...como te atreves-lentamente acerco sus brazos a la espalda de ella como si tuviera miedo-eres una maleducada...-una pequeña lagrima cayo de sus ojos-no sabes nada...

Al darme cuenta de los frágiles sentimientos que habían sido tocados en él, supuse que no debía estar allí, me alejé, dejando que ambos estuvieran juntos, incluso si eso, me producida una molestia en el pecho, como si me hubieran quitado algo mío muy importante...

》Cuarto de Shuu《

-Ahh...-suspire mientras caía al suave colchón con sabanas blanquísimas-realmente me molesta, que esos dos se llevan bien, es raro-me puse de lado, acomodándome-y también que sienta envidia de mi hermano en esta situación es raro...-cerré los ojos agotado, había sido un día movido, sobre todo para mi, quien no está acostumbrado a salir mucho...


(...)


Narrador Normal

Era un día hermoso, el palacio dejaba pasar los rayos del sol, así como el canto de las avecillas que volaban divertidas en el extenso jardín alrededor de este.

-¡Vamos!-jalaba del brazo un niño de ojos color cielo a una niña más pequeña que el

-¡Espere un momento Shuu-sama!-era arrastrada tras de él la niña rubia

Un pequeño Shuu se avistaba corriendo con una niña en aquellos prados reservados, donde no había nadie más que esas dos almas puras en forma de infantes huyendo ambos del castillo.

Se detuvieron al llegar a un lago

-No deberíamos estar aquí-dijo intranquila la pequeña junto a él, tratando de respirar

『MI PROPIEDAD PRIVADA』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora