Vale, confirmado, Jamie se había vuelto completamente loca. Pensaba que estos días apartada de todos, viviendo en el apartamento de su hermana le ayudarían a relajarse y reflexionar, pero ni en mi más jodido sueño me hubiera imaginado que lo primero que iba a decirme nada más verme, era si quería que fuéramos amigos con derechos, follamigos, vamos.
– ¿No me vas a contestar nada? – cuestionó haciéndome volver a la realidad – No sé, di algo, cualquier cosa, Jayson, pero no te quedes callado mirándome como si estuviera diciendo alguna tontería.
–Oh, créeme, enana, estás diciendo justo eso – me reí todavía flipando por lo que me acababa de proponer – No sabes la estupidez que acabas de decir.
– ¿Qué? ¿Entonces no quieres? – preguntó sorprendida – ¿Rechazas... mi propuesta? – inquirió sin mirarme bajando el tono de su voz.
–Sí – contesté simplemente.
– ¿Y ya está? ¿Así de fácil? – cuestionó esta vez cambiando el tono a uno mucho más enfadado – ¿Qué pasa qué ni siquiera te pongo?
–No digas estupideces, Jamie, ¿Te has propuesto decirlas hoy todas seguidas?
–¿Y qué quieres que piense? Si no es porque no te gusto, ¿por qué rechazarías tener algo sin compromiso conmigo cuando lo tienes con cualquiera?
–No me lío, ni follo con cualquiera, Jamie. Soy bastante selectivo.
–Si tú lo dices, no es eso lo que se comenta por el campus, pero ahora mismo me da igual con quién te lías o te acuestas. Quiero saber por qué no lo quieres hacer conmigo – dijo exasperada dándome la espalda mientras caminaba por su habitación.
¡Joder! ¡¿Qué mierda le había pasado en estos dos putos días?! Me imaginaba que la ruptura con Parker le habría afectado, y más al saber que su amiga Tracy era consciente de todo y no le había dicho nada, pero de ahí, a qué me estuviera proponiendo ser follamigos había una jodida gran diferencia. No tenía ni puta idea de que se le estaba pasando por la cabeza. Ni siquiera nos llevábamos bien hasta hace unas semanas, solo discutíamos, y bueno, todavía lo seguíamos haciendo. La única opción que entraba en mi cabeza era que lo estuviera haciendo para vengarse de Connor. Que él y yo nos odiábamos después de esto estaba claro, el mismo Parker me había culpado de preparar todo solo para poder acostarme con Jamie. Así que suponía que la enana querría devolvérselo de alguna forma, y lograr que él cabrón de su ex también sufriera.
–¿Jayson, puedes irte de mi habitación? Ya me ha quedado claro que te parezco fea – soltó Jamie de pronto enfadada sin ni siquiera mirarme, delante de la puerta de su balcón.
Ahora sí, confirmaba que se había vuelto jodidamente loca del todo. ¿Qué me parecía fea? No sabía si partirme de risa en su cara o tirarme de los pelos. La chica más guapa que había visto en toda mi puta vida, con unos ojos increíblemente preciosos y una personalidad que me atrapaba cada día más, y me sacaba de quicio al mismo tiempo, me estaba diciendo en mi puta cara que no me gustaba. Esto era como estar en un puñetero manicomio.
No me lo pensé dos veces, caminé despacio hasta Jamie, tiré de su brazo para girarla y estampé mis labios contra los suyos. Al principio se quedó totalmente rígida, sin corresponder, pero tras unos segundos de duda se dejó llevar. Abrió su boca dándome paso, y yo no tardé en entrelazar mi lengua con la suya. Cuándo nos separamos por falta de aire, Jamie se me quedó mirando a los ojos sin decir nada.
–Enana, no sé qué mierda se te estará pasando por la cabeza ahora, pero no vuelvas a decir ni una puta vez más que me pareces fea o no me gustas. Me pones muchísimo, Jamie – confesé con sinceridad haciendo que sus mejillas se encendieran.
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Odio Amarte#1 Trilogía EDL
Teen FictionJamie por fin ha conseguido cumplir su sueño de ir a la Universidad. Los problemas familiares que ha tenido durante este último año, y su orgullo por mantenerse sola y no pedirles nada a sus padres, le traerán más de un dolor de cabeza. Aunque ningu...