Odio Amarte, Odio Amarte, Odio Amarte... Esas dos palabras se repetían en mi cabeza sin parar desde el momento en que habían salido de la boca de Jayson. Mi reacción al oírlo no fue otra que darle una bofetada y aguantar para no ponerme a llorar como un bebé, aunque no conseguí esconder la lágrima que se me escapó.
–Quiero que te vayas ahora mismo de mi habitación y si tienes un poco de decencia y alguna vez en tu puta vida me has querido, te pido que no me vuelvas a dirigir la palabra – hablé en voz baja porque el nudo que tenía en la garganta me impedía levantar la voz sin empezar a sollozar.
–Odio Amarte porque cambias todo lo que era, lo que soy. Pero te amo más que a nada en este jodido mundo, Jamie – me dijo sin dudar totalmente serio, agarrando mi cara con fuerza mientras conectaba sus ojos con los míos.
–Déjame, Jayson. No quiero escuchar nada más – dije retirando sus manos de mi rostro pero él no soltó las mías – Solo vete y déjame sola, por favor – pedí ya completamente perdida y derrotada.
–Me voy a ir porque creo que necesitas estar sola para pensar en todo lo que ha pasado esta noche – dijo tirando de mi para abrazarme. Quise evitarlo pero tenía bastante más fuerza que yo y acabó rodeando mi cuerpo a la vez que metía su cabeza en mi cuello – Te amo como un loco, y aunque a veces odie ese sentimiento porque me hace actuar de una forma que nunca pensé, no puedo evitar amarte y lo haré toda mi puta vida como tú dices – susurró cerca de mi oreja haciendo que mi piel se erizara.
Al acabar de hablar subió su cabeza mirándome y vi en sus ojos al mismo Jay del que me había enamorada y solo pude sentirme más confundida y con más ganas de llorar. Volvió a sujetar mi cara y tras plantarme un beso y acariciar mis labios con su pulgar se dio la vuelta para unos segundos después oír como la puerta de mi habitación se cerraba y al instante lo hacia la suya.
¿Y ahora qué? Me pregunté mientras me dejaba caer en la cama totalmente agotada físicamente, eran las 4 y media de la mañana, pero sobre todo colapsada mentalmente. En apenas unas horas había descubierto que Jayson me ocultaba parte de él desde que nos habíamos conocido, que participaba en peleas ilegales y que por eso había estado tan distante estos días, su intención había sido protegerme y se sentía mal estando cerca de mí mintiéndome. Además me había dicho que odiaba amarme, y aunque había pensado que estaba cansado de mí, de nuestra relación y quería volver a ser el Jayson Brown independiente y soltero que había sido siempre. Había acabado confesándome que de alguna manera luchaba contra sus propios sentimientos porque me amaba más que a nada pero le confundía lo que le hacía sentir. Eran demasiadas cosas a las que hacer frente.
Apagué la luz, me arropé con mi edredón, acurrucándome contra la pared y abrazada a un cojín cerré mis ojos intentando entender todo ese lío de ideas y sentimientos que tenía en mi cabeza, y en mi corazón. Porque yo también estaba segura de que amaba a Jayson pero no podía estar con alguien que solía ir a peleas ilegales, además no sabía si podría perdonarle que me hubiera mentido y me hubiera hecho sentir tan mal estos últimos días. Estaba tan aturdida que sin saber muy bien cual era el motivo exacto por el que lo hacía empecé a llorar. No sé cuánto tiempo estuve así pero el último recuerdo que tengo antes de quedarme dormida totalmente exhausta es que el llanto me había ayudado a sacar todo fuera y me sentía mucho más calmada.
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Me desperté no se cuántas horas después por la luz que se colaba entre las cortinas, me sentía mucho más descansada pero me notaba los ojos demasiados pesados. Y es que después de dormirme llorando los debía tener bastante hinchados. Me moví en la cama estirándome para coger mi móvil que estaba en la mesita de noche, miré la hora descubriendo que era la una del mediodía. Me había perdido las clases durante toda la mañana, pero teniendo en cuenta todo lo que había pasado y que estábamos casi en vacaciones no le di mucha más importancia. Mi máxima prioridad ahora era hablar con Jayson y dejar las cosas claras.
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Odio Amarte#1 Trilogía EDL
Teen FictionJamie por fin ha conseguido cumplir su sueño de ir a la Universidad. Los problemas familiares que ha tenido durante este último año, y su orgullo por mantenerse sola y no pedirles nada a sus padres, le traerán más de un dolor de cabeza. Aunque ningu...