52. MEMORIAS.

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Adriem maneja silencioso hasta mi casa en Hammersmith & Fulham. Iré a buscar un par de cosas que necesito mientras me sigo quedando en la mansión de Patrick. Aun no me acostumbro a decir que tengo una propiedad a mi nombre. Nadie, ni siquiera Quinn ha ido a ese lugar, ellos lo saben porque mi rubia favorita fue inquisitiva el día que mudé las cosas de Matt.

Pienso cosas tontas durante todo el camino para evitar asimilar lo que sucedió hace poco, para no decirme que fui una terrible persona otra vez porque sé que él cumplirá su amenaza e irá tras mis amigas y sí, me relaja saber que Mitchell se llevará a Bella para Washington, no Nueva York, a casa de su familia; me alivia un poquito que Quinnie está siendo protegida por la gente de Jonah y Roca también está atento, no obstante, la sigo exponiendo a mucho peligro.

Kiara y Stefany no me quitan el sueño porque Patrick le contrató guardaespaldas. Solo quedarían Greggory y Dave, ellos son parte de mi familia y me aterra pensar que su amenaza se extienda hasta ellos, por lo que debo hablar con Jonah para que mande a su gente a cuidar de ellos.

Suspiro cansada y cuento otra vez cada uno de mis errores este año. Los dedos de la mano no alcanza para enumerarlos, ni mis errores, ni mi secretos. Y uno de esos errores, pero en gran medida un acierto, fue hacer tratos con Jonah Campbell.

La última vez que hablamos, le pedí hablarme sobre la doble vida e identidad de su mamá y proteger a mis amigos. Fue un favor que me costó bastante caro, pero por lo menos este hermano Henstridge es menos aterrador que el otro. Jonah solo quiere deshacerse de ellos y como me dijo, es mejor que la mierda de uno la resuelva otro.

Yo soy ese otro.

Escucho mi teléfono sonar y me sorprendo, porque no recordaba que le había quitado el modo silencioso, contesto la llamada de Quinnie.

—Gemma... —su voz es pastosa, ininteligible, casi como si estuviera borracha—. ¡Dave! Se llevaron a Dave...Secuestraron a mi confidente.

Cierro los ojos cuando la noticia cala con pánico en mi pecho. Mierda, no pensé que él actuaría tan rápido. Murmuro una respuesta desesperada esperando que ella no se encuentre en peligro y tarda un poco en contestarme. Casi puedo asegurar que la drogaron por la respiración acelerada, las palabras incoherentes y la desconcentración.

—Iba con Davs hacia el Typing Room. El Typing es un lugar... No, ellos, ¿Con quién hablo? Eh, nos interceptaron, se lo llevaron, ¿Eres Gemmy?

—Quédate donde estás —le pido que lo repita varias veces—. Te iré a buscar, rubia. Yo, Gemma, iré a buscarte. Quédate donde estás.

Le doy la indicación al guardaespaldas y obligo a la culpa, volver al mismo baúl con llave que lo ha contenido durante meses mientras leo el mensaje que Sombra me envía, advirtiéndome que caerán uno por uno.


MARTES, 29 DE ABRIL DEL 2014

Ayer Jacob se llevó a Greggory.

Advertí a Mitchell y él se llevó a Adabella a casa de la familia de Aaron en Alemania, él dice que le prometió a... a Isaak cuidar de la pelirroja un día que tuvieron una charla interesante sobre ella. Así que Bella está con Gerda Kähler desde hace días.

Mi rubia favorita, eh... no tengo los ovarios para decirle que está en peligro por mi culpa. Ella se ha mantenido fuerte e intenta asimilar que toda esta mierda va pasar y que Diosa y Reina pagaran por sus crímenes.

Mi hermoso niño de cabello rizado se acerca a mí, Peluche me ladra y luego corretea por la habitación mientras Matthew le dice que ahorita va hablar conmigo porque necesita decirme algo. Es bonito y tierno verlo interactuar con su perro como si no hubiera barreras comunicacionales entre ellos.

Los secretos de GemmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora