Atrápame Si Puedes... | JJK ✔️

008

-¿Qué está pasando aquí?
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-Striptease -comento sin dejar de saltar- ¿Te unes? -le guiño el ojo y él traga saliva, pone la mirada fría por segunda vez, me estremece, pero no me intimida. Rosé y jisoo están sin habla.
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-Cubrete con algo -Dice indiferente. Voltea la vista a jisoo- Creí que sabían claramente que no deben tener nada de tecnología -Dice Jungkook extendiendo la mano hacia jisoo, ella le entrega la cámara. Mierda, yo he traído hasta mi teléfono móvil.- ¿Que no escuchaste que te vistieras? -Ahora me dice a mi.
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-No quiero, así me siento cómoda, de hecho tampoco necesito esto -desabrocho el sujetador y lo aviento al suelo. Rosé y jisoo se asombran y después ríen por lo bajo.- mucho mejor.
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-¡Dios mio! ¡Tapate! -Se gira hacia otro lado.- y ustedes dos -señala a las chicas- vayan a su clase de té, las están esperando.
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-Esperaremos a Sun Hee -responde rosé.
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-La señorita Sun Hee Shin se esperará unos minutos. Tengo que entregarle el uniforme y confiscar su maleta.
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-Pero...
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-Pero nada -interrumpe a jisoo- ustedes saben que esto es obligatorio, vayan sino mi tía estará molesta por su ausencia.
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-Vayan mis putitas, yo seguro la pasaré súper bien en compañía de esté joven.
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Ellas notan mi doble sentido y sé que él también lo nota. Ellas se retiran y sólo quedamos él y yo. Aún me sigue dando la espalda.
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-¿Ya estás vestida?
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-Sip.
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-El se da la vuelta para verme, pero lo único que puede ver son mis pechos confirmando que no me he vestido , esta vez detiene un poco más la vista para observar mis pechos. Claro, es un mujeriego. Me he desnudado frente a otros hombres y nunca me había sentido tan...desnuda, literal. Después sigue recorriendo mi cuerpo de arriba abajo, mis pechos nuevamente y por último mi mirada, la suya sigue igual de fría pero un poco más oscura que la de hace unos minutos.
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-¿Te gustan? -Digo divertida mientras me agarro los pechos. Él aparta su vista enseguida.
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-He visto pechos más bonitos. -su comentario me hace enfadar- Vístete o te vestiré yo mismo.
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-Tuvieras tanta suerte.
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-Confiscaré tus maletas mientras te vistes ¿dónde están? -su puto tono frío.
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-Ah mira que conveniente ¿por qué mejor no te sales mientras me visto y después vienes de nuevo? -así podré sacar mis cosas, al menos mi movil- ¿O quieres confiscar también lo que hay entre mis piernas? Yo estaría encantada. -muerdo mi labio inferior lo más sexy que puedo, no me sirve para nada por que ni siquiera me está viendo.
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-Tuvieras tanta suerte -Dice burlesco. Puto.- Bien, estaré esperando afuera, pero antes...-busca algo con la mirada hasta localizar mi maleta, la toma y se dirije a ala salida sonriendo- no soy tonto. Vístete con lo que hay en la bolsa -la señala tirada en el suelo.
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-¡Mierda! -digo una vez ya sola.
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Al abrir la bolsa saco los uniformes. Cuatro playeras polo, dos negras con las vistas tintas y dos viceversa, dos faldas circulares tintas, un pantalón y chaqueta deportiva negras con vistas tintas, un short negro deportivo, dos pares de medias negras escolares y dos deportivas, unas zapatillas de deporte y unos zapatos como los de todas las chicas. Decido vestirme como todas las demás, la falda circular y todo su complemento.
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-¡Ya puedes pasar! -gritó mientras estoy sentada en mi cama abrochandome los zapatos.
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-Ahora confiscaré tu maleta -la pone en mi cama a mi lado y comienza a esculcar en ella. Todo lo hace sin verme.- Esto no está permitido -mi iPad.- tampoco esto -Mi botella de licor ¡No mi bebé!- y mucho menos esto.
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-¡No, no, mi móvil no! Lo necesito.
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-Si, si, tu móvil si -se burla.
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-Te pago lo que quieras pero no te lleves mi móvil -esto ya era rogar y yo jamás le ruego a nadie.
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-No está permitido, lo siento. -pone una sonrisa fingida- No, la verdad es que no lo siento.
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-eres un pendejo.
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-Que alago. Limitate a no hablarme así, soy tu superior, yo te mando aquí y si no haces lo que te ordeno te llevaré al cuarto de castigo.
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-No me intimidas, puedes llevarme a donde quieras, cualquier lugar es mejor de estarte viendo la cara horrenda que tienes, tu no eres nadie para tener derecho sobre mi. -Calmate, Sun Hee, tienes que enamorarlo, no espantarlo.
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-Soy mayor que tu y aquí te enseñarán que a los mayores se les obedece, quieras o no.
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-Veremos si logran cambiarme -me levanto de la cama quedando al lado de el- listo, ¿cómo luzco? -Me da una mirada lenta y penetrante.
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-Decente -Dice con tono osco.
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-Pudrete.
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Después de haber sacado un poco de cosas más de mis maletas las cierra, yo acomodo en mi pequeño buró lo poco que dejó en ellas.
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-Vamos, tienes clases de té
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-No quiero, me quedaré aquí.
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-Tú no decides si te quedas -me toma del brazo y me arrastra fuera de la habitación llevandome quien sabe a donde. Me pone furiosa.
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-¿Qué pinches putas te pasa? ¡Sueltame! Tú no eres nadie para jalarme asi.
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-Soy tu autoridad.
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-Oye, no tienes por que tratarme así sólo por que no le quise dar el lugar a tu noviesita. -y me suelta bruscamente y enfadado junto a una puerta.
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-Este es el salón de las clases de té -me mira con expresión molesta.
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Abre la puerta y me empuja adentro, él entra detrás de mi.

-Aquí está la señorita Sun Hee. -Le anuncia a quién sabe quién mientras yo me dirijo a sentarme de mala gana sin ver a nadie, sólo a rosé y jisoo.- Ahora yo me retiro.
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-Nos harías un gran favor -Digo con los dientes apretados mientras las internas ríen.
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-Silencio -Habla una mujer. Volteo a verla; delgada, peliroja, con bastantes curvas, piernas largas y con uniforme de trabajadora. Candace, una de las dos amantes más importantes del mujeriego.- apenas si vas llegando, niñita y ya estás causando problemas.
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-Uno no puede ir contra su instinto. -le sonrío finjida.
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-Aquí aprenderás a ir contra el. -gira su mirada a Jungkook- Te busca tu tía, quiere verte en su oficina.
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-Que te diviertas, Sun Hee. -se burla de mi y sale.
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-Sigamos con las clases de té. -Sugiere candace.
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-¿Viste que por poco y moja el piso la vieja esa de sólo ver al estúpido ese? -Le susurro a rosé, ella asiente.
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-Y a Kelly casi se le cae la sonrisa que le mostraba a Jungkook de tanto esperar a que la viera -susurra jisoo desde el otro lado de rosé, las tres reímos bajo.
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-¿Ahora a donde vamos? -Digo con fastidio mientras caminamos a quien sabe donde chingados.
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-A nuestra clase de cocina -contesta rosé mientras arruga la nariz.
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-Lo último que me faltaba.
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-Bueno, niñas, hoy las enseñaré a cocinar un delicioso pastel del sabor que gusten. -Anuncia alegre una señora regordeta, según dijo jisoo se llama Ernestina.- Todos los ingredientes los encontrarán a su disposición como siempre.
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Tiempo después cuando ya nos encontramos amasado  nuestra masa, esto era en equipo, rosé, jisoo y yo.
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-A mi me parese que ya nos ha quedado la masa lista para ornear -Opina jisoo. Yo decido probarla.
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- No sé, le hace falta algo. Esperen buscaré un ingrediente más.
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Sin que Ernestina me mire, me escabullo a la vitrina que ella tiene con llave, rosé y jisoo me ven divertidas desde nuestro lugar, me quito un pasador y trató de quitar el seguro a la vitrina, lo logro y saco de ahí una botella de ron, se las enseño a ellas y asienten con la cabeza. Corriendo vuelvo a ellas y rápido le vasiamos una generosa porción a nuestra masa. Guardo la botella detrás de unas cosas en un estante y volvemos a amasar y también echamos varias cosas más para que no de ese olor a Ron. Enseguida lo metemos a ornear y cuando por fin está lo decoramos. Cuando nuestra clase se acaba busco la manera de sacar la botella y llevármela a nuestro dormitorio.