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-¿Es por esta niña que has interrumpido lo nuestro? -no le contesto.

-Tengo frío -pronuncia la rebelde. Sin querer permanecer más ahí y seguirla escuchando, simplemente me quité mi chaqueta y ayudé a que se la pusiera por que incluso imaginaba que ni siquiera era capaz de hacerlo ella sola. Di un fuerte portazo para después empujar a Denisse fuera de la puerta del chófer y ocupar mi asiento. Denisse no tardó en rodear el auto y meterse en el copiloto. Arranqué a toda velocidad hacia casa de Denisse.

-¿Irás a verme mañana? -dice mientras viajo a velocidad por la carretera.

-No. Me voy mañana.

-Esta niña viene drogada ¿cierto?. -pronuncia "niña" con cierto desagrado.

-Unas cuántas lineas y algo de marihuana. -Comenta Sun Hee desde atrás.- ¿Tu eres una puta más del mujeriego?

Para estár drogada no pierde su estúpido y molesto carácter. Me dan ganas de asfixiarla. Denisse rechina los dientes ante el comentario de la rebelde y decide no contestar.

-El que calla....otorga -ríe con burla Sun Hee.

-Es una amiga. -Digo en un inútil intento de que abandone el tema.

-Una amiga como las zorras de youra, Mi-young y muchas más. También diría que Kelly pero ella es tu novia.

-¡Joder, que no es mi novia!. Además ¿como sabes lo de youra y Mi-young? -me animé a cuestionarle sabiendo que estaba drogada y mañana no recordaría nada sobre que acabo de aceptar que mantengo algo íntimo con youra y Mi-young.

-Soy observadora.

-¿Quiénes son youra y Mi-young? -pregunta denisse con algo de molestia.

-Trabajadoras de la Academia de mi tía. -Lo digo sin tomarle mucha importancia.

-Las putas más importantes -puntualiza Sun Hee. Denisse voltea a verme con una ceja arqueada.

-¿Ahora tienes favoritas? -cuestiona con indignación.

-¿Podemos abandonar este tema? -estoy bastante frustrado.

-¡Uhhhhh! -se burla Sun Hee- Se te ha armado el problema, mujeriego. -se ríe.
*
*
Después de haber dejado a denisse en su casa, hemos llegado a la casa de Sun Hee. Ayudo a la rebelde a bajar del coche para tomarla de mi chaqueta y arrastrarla hacia dentro de la casa. Jazmine hace presencia cuando llegamos al vestíbulo y hace un intento de ayudar a la rebelde a subir a su habitación, pero la rebelde la empuja con fuerza.

-Mantente alejada de mí, ya sabes que no soporto que pongas tus manos de puta sobre mi -Sun Hee es dura con la muchacha que se muestra incómoda con la situación y con ganas de contestarle a Sun Hee.

-Sólo quiero ayudarla a subir, señorita. Puedo prepararle un baño.

-Puedo subir sola.

-Por favor, Sun Hee shin, apenas si puedes sostenerte tres minutos de pie. Jazmine, ¿Puedes prepararle un café bien cargado a la señorita? Yo la ayudaré a subir. -jazmine asiente y sale disparada a la cocina.

-No soy una inútil. -lo único que hago es sonreír con burla.

Vuelvo a levantarla sobre mi hombro y la llevo a la que según me indicó ella es su habitación. Su habitación es...no tan de niña. Las paredes de color azul marino y todas las vistas blancas. La pared del respaldo está tapizada de bandas que parecen ser de rock, de famosos con el torso desnudo y otros tan sólo en boxes modelando la marca, recortes de guitarras eléctricas y de baterías. Esta pareciera más bien la habitación de algún chico. Todos sus muebles son blancos. Es lo más femenino que aprecio en su habitación.
Siento a la chica en la orilla de la cama y le pregunto cuál es el baño, ella señala una de las dos puertas en la pared de la derecha. Me meto en el baño y preparo la bañera y salgo de ahí.

-Toma un baño por unos minutos. Yo iré a por tu café y algo de comida.

-¿Por qué no te bañas conmigo? -¡maldita sea! ¿Por qué tiene que usar esa voz tan seductora?. No me di cuenta de que contuve la respiración por unos segundos.

-Toma el baño. Vendré en unos minutos.

Salgo de aquella habitación y voy directo a la cocina donde jazmine con aspecto somnoliento prepara el café.

-Jazmine, ¿puedes también prepararle algo de comer a la señorita?

-Claro joven -me dedica una sonrisa y se dispone a preparar la comida de Sun Hee. Resulta agradable. Jazmine es tres años menor que yo. Le he pedido que me llame por mi nombre.

-Entonces tú y Sun Hee jamás se han llevado bien -No estoy preguntando, estoy confirmando lo que ella acababa de decir. Ella asiente dándome la razón.

-Digamos que tuvimos momentos desagradables cuando ella iba en mi colegio.

-Supongo que nadie la soportaba.

-algo así -parece no agradarle esta charla.- ella dejó el colegio y después yo necesitaba algo de dinero para ayudarle a mis padres con el mantenimiento de la casa. No me daban trabajo en ningún lado y fue aquí en el único lugar que pude conseguir empleo. Ella se rehusó a que yo trabajara para su familia pero sus padres son muy amables y no se dejaron influenciar por ella. Perdone que se lo diga, pero es una pesadilla trabajar para ella. No sé como usted logra soportarla.

-También es mi trabajo -admito. Me compadezco de Jazmine. Sun Hee la debe torturar mucho.

-La verdad es que no logro entender como es que no lo golpeó cuando usted hizo aquel comentario.

-¿Tenía que golpearme? -ella se encoge de hombros.

-Habría sido una reacción normal de ella. Eso pasa con todo el que la contradiga.

-Pues supongo que tuve suerte. ¿Ella es grosera con todo el mundo? -Jazmine asiente con pesar.

-A excepción de Daehyun, Matthew y Lisa.

-¿Y que hay de Min jung?

-Especialmente con ella es grosera.

-¿Por qué? -pregunto extrañado. Es su mamá como para que se porte así con ella, o a menos que no sea su madre biológica.

-Nadie lo sabe. Hace dos años cuando entré a trabajar para ellos su relación ya era así.

-Pues esperemos que su actitud con el mundo cambie. -sería algo bueno para la Academia que lograrán corregir a la rebelde hija del gran empresario Daehyun. Mi tía estaría contenta.

Después de la agradable charla con la muchacha, subí a dejarle la comida a la rebelde y asersiorarme de que ya estaba al menos en un considerable estado. Gracias a Dios así era.

SUN-HEE.

Al estar recostada unos minutos en la bañera mientras me fumaba un último cigarrillo de tabaco, comprendí que me había pasado de la raya. A mi todo me importaba una mierda, pero las drogas era algo que me había jurado a mi misma que jamás volvería a hacer. Sin embargo fue la única manera que logró que sacara a Tayson de mi mente mientras duraba el efecto, un efecto que habia estado alargando a como diese lugar. El baño logró que los últimos efectos de la droga desaparecieran por completo. Al salir de la bañera me lavé los dientes chorreando todo el agua por el piso para después cubrirme con una toalla y después buscar en el armario. Me vestí con unos pantalones de pijama y una camiseta vieja y cómoda. Ni si quiera me molesté en cepillarme el cabello. Simplemente me tumbé en la cama con el pecho hacia abajo y la cara enterrada entre las almohadas dispuesta a dormir y olvidarme del día de mierda que tuve hoy.

-sun Hee, ¿estás dormida? -la voz del mujeriego me hizo darme la vuelta para mirarlo a la cara.

-Muy dormida.

- No intentes molestarme más de lo que estoy por que te aseguro que hoy pasaste los límites de mi paciencia. -y si que se notaba disgusto en su voz.

-Y es que a mi me importan mucho los límites de tu paciencia -dije con sarcasmo.

-Te importarán. Ahora comete esto y bebete el café.

-¿Tengo que obedecerte? -el mujeriego sólo se encoge de hombros.- Voy a comerlo, pero no por que tú me lo estés ordenando, sino por que tengo hambre. -él muestra una sonrisa triunfadora y sale de la habitación.

Atrápame Si Puedes... | JJK  ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora