Todos los chicos son iguales

Capítulo 49

Kagome: No *Dije sin interés* El libreto lo ponía pero ni siquiera se lo dije.

Bankotsu: Dijiste que “Una acción vale más que palabras” y me besaste *Rió*

Kagome: No seas idiota *Rolé los ojos* Todo lo que pasó allí es pura actuación *Di media vuelta* Sigue soñando conmigo cariño, porque soy inalcanzable para ti.

Inuyasha: *Sonrió* Ya la oíste, jamás estarás con ella y mucho menos te ama.

Escuché la risa de Bankotsu detrás de mí y pensaba largarme de allí de inmediato pero la maestra apareció y nos hizo reunirnos a todos en conjunto.

Sara: ¡La obra fue un éxito!

Kikyou: Pues agradezcalo a Bankotsu e Inuyasha por agarrarse a vergazos delante de todo el mundo como dos niños *Burlona*

Sara: ¡Señorita Kikyou ese vocabulario! *Frunció el ceño* Debo admitir que a pesar de que me asustaron con el repentino cambio en el guión, la actuación fue de maravilla y aunque los golpes fueron demasiado realistas *Tocó la mejilla punzante de Bankotsu con miedo* El público amó la obra y todos tendrán la nota perfecta en la materia. Muchas gracias a todos por su esfuerzo… Bankotsu, Inuyasha… vayan a la enfermería.

Miroku: Deberían hacer las paces de una maldita vez…

Bankotsu: ¡Ni loco! ¿Ya viste como me dejó el ojo?

Inuyasha: Ni que fuera gran cosa *Roló los ojos*

Sango y yo estábamos paradas con los brazos cruzados delante de ellos, en serio que sus peleas sin sentido me tenían más que harta… Nunca entendí su estúpida rivalidad y jamás la entenderé.

Sango: Dejen de comportarse como dos niños estúpidos.

Bankotsu: ¡Dicelo a esa bestia!

Inuyasha: ¡Eres un niño llorón!

Kagome: ¡BASTA! No los tolero más.

Bankotsu: Me vas a pagar esta Inuyasha…

Lo dijo entre dientes pero pude escucharlo, volví a rodar los ojos por el fastidio y salí de allí, la semana ya casi acababa y añoraba salir del colegio pronto para no seguir viéndolos pelearse como dos inmaduros, así que salí de allí dando zancadas y luego un gran portazo en la puerta, luego Sango salió para seguirme.

Sango: ¿Estas molesta?

Kagome: Solo estoy harta de esos dos que no hacen más que pelearse por mi… *Suspiré* Como sea…

Sango: Este sábado es tu cumpleaños ¿Ya tienes todo listo?

Kagome: *Sonreí* Gracias a ti, Inuyasha y a Miroku ya tengo todo preparado, aunque faltan algunos detalles *Sonreí con malicia*

Sango: ¿De qué hablas? *Curiosa*

Kagome: Ven…

Inuyasha: Lo de tu fiesta, ¿Ya está todo listo?

Le escuche preguntarme el viernes, justamente un día antes de mi fiesta, ambos tomábamos el almuerzo en la cafetería, Inuyasha devoraba su sándwich de una sola mordida.
Kagome: Quiero algo especial y loco *Le respondí, tomando un sorbo de mi jugo de naranja* Por cierto, ¿No tuviste problemas con tu padre por lo de Kikyou? *Inuyasha trago el pan y después tomo su jugo*
Inuyasha: Claro que sí, pero después de exponerle los cuernos de bisonte que me había traído durante todo este tiempo con ese sujeto, no replicó mucho en mi decisión *Bebió un sorbo y después me tomo de la mano para verme a los ojos* Yo he cumplido Kag, ahora nada nos impide para estar juntos.
Y era cierto, casualmente todas las cosas habían encajado a la perfección, sí... todo menos mis sentimientos, estaba tan confundida y tan estresada que la verdad no quería nada que ver con el tema del amor ahora.
Kagome: Inuyasha… yo… *Tenía que ser sincera, yo no quería ser una hipócrita*
??: Taisho.