Caso I: Si, ¡si son gemelos!

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Su respiración estaba calmada, pero su corazón se había acelerado un par de latidos. No es que no supiera como actuar, pero ahora tenía bastante más en contra. Usualmente llevaba un arma, ahora no podía hacerlo porque estaba del lado de los buenos, eso y que si se llegaba a acercar al mercado negro para conseguir aunque sea una navaja, sus ex compañeros la matarían sin pensarlo. Era jodidamente malo tener que hacer todo en el ámbito legal, ahora comprendía el porqué de su bando, era mucho más entretenido. 

La puerta se abrió, revelando a un hombre de no más de 35 años. Alto y de cabello negro liso, con ojos oscuros y piel sumamente blanca. Ella sonrió con inocencia y le inventó un cuento sobre como su auto se había descompuesto unas calles más allá y necesitaba un teléfono. Obviamente él aceptó, pues no tenía motivos para desconfiar de la joven. 

–Listo, mi hermana vendrá a buscarme y la grúa llevara mi auto. ¿Puedo esperarla aquí? 

–Claro, no hay problema. ¿Quieres algo de beber? –Preguntó el tipo. 

El lo poco que había recorrido de la casa, noto que era soltero, guardia de mall, no llevaba una vida muy saludable, por lo que en una pelea ella ganaría con facilidad. Había una pequeña afición por el porno, así que eso podría servirle en algún momento.  No tardó mucho para fijarse en unas marcas en su brazo izquierdo. Era por la fuerza que uso durante los asesinatos, era algo verdosa, por lo que no tenía más de dos días, encajaba a la perfección con lo que ella buscaba, ahora estaba casi convencida de que él era su asesino.

Había estado más de un día en búsqueda de este tipo, así que mas le valía ser el jodido asesino o sino ella misma lo mataría. El tipo le sirvió un vaso con agua, como ella pidió y se sentó frente a ella. Rosalie empezó a hablar, para poder sacarle algo de información. 

–Que bueno que mi hermana esté en la ciudad, no viene muy seguido, pero su visita cayó como del cielo, sino no sabría que hacer. ¿Tiene usted hermanos? 

–Oh no, mi familia es muy pequeña. 

No mentía... bueno, no del todo. Así que eso llevaba a la adopción, un buen motivo para el asesinato es el rencor a un padre que te abandonó. Poco a poco fue sacando información, hasta llegar a la conclusión de que, ambos hermanos fueron separados y adoptados, probablemente no conocían a su padre por lo que asumieron que todos los tipos que tuvieron relaciones son su madre biológica podrían ser culpables de su desdicha. Ahora solo hacía falta encontrar al gemelo. Necesitaba un tiempo para poder buscar algún indicio del otro, pero con este imbécil poniéndole el ojo a donde fuera que se moviese, era imposible. 

Era momento de sacar su arma especial. Se aseguró de mandarle un texto a Sherlock primero, por si es que algo iba mal. 

"Si no te aviso en 30 minutos, quizá deberías venir por mi... estoy con el asesino. 

178, Freegrove Rd

R."

Rosalie se levantó del sillón y caminó al hombre que tenía en frente. No le costó mucho hacer que su figura pasara de una inocente chica que había perdido su auto, a una mujer que estaba dispuesta a lo que fuera. Además la mente plagaba de pornografía del hombre, ayudaron a que todo fuera más fácil. Las asquerosas manos del hombre viajaron por la cintura y caderas de la chica, mientras que ella tomaba su cuello con cuidado. 

–Supongo que mi hermana va a tardar un poco más... 

–Todo lo que quiera. 

Finalmente su plan estaba funcionando. Él asesino era un idiota, así que al parecer la mente maestra detrás de esto era el otro hermano, porque engañar a este había sido pan comido. Logró que el idiota se fuera al cuarto y ahí mismo lo encerró, asegurando que se iba a preparar para él.  Él no puso objeción ante tal oferta y se desnudó dentro del cuarto. 

Criminal (Sherlock BBC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora