21 | Paulo Dybala

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Ya jugamos dos de los tres partidos que forman las fases de grupos, hoy fue el segundo el cual empatamos. No jugaron mal, pero del otro lado estaban jugadores como Modric y Rakitic, lo jugaron bien pero claramente algo faltó.

–Mañana día libre, el que quiera entrenar que me diga a mi o a Sofi y entrenamos... los demás que hagan lo que quieran —habla Scaloni frente a toda la mesa.

Aunque es obvio que la mayoría va optar por quedarse acá o ir a la playa.

Luego de unos minutos, me levanto de la mesa y alzo a Gianna la cual duerme en mi hombro.

–Sofi —Leo Messi agarra mi mano cuando ya me estoy yendo, él sentado—. Quiero entrenar, ¿Se puede?

–Si, vamos —asiento.

–¿A qué hora? Hacemos a la mañana y tarde, no importa.

–A la mañana, cuando no hay nadie, vamos a la playa hacer algo y a la tarde vamos a la cancha ¿Dale? —el asiente—. A las siete desayunamos.

–Dale, gracias.

–Yo le aviso a Scaloni.

Luego de eso, Paulo viene y alza a Gianna para agarrarla mejor ya que a mí se me estaba por caer.

Ellos entran a mi habitación mientras que yo voy a la habitación de mi mamá a buscar a Gianluca.

–Ma, mañana se quedan con Paulo —la miro hablando bajo y alzando al bebé.

–¿Vos te vas a entrenar con los chicos?

–El único que quiso entrenar fue Leo, vamos con él —ella asiente—. Mañana anda a recorrer o algo que Paulo cuida a los dos.

–Sabes que no me joden.

–Ya se, pero igual tenés que ir a la playa o algo... igual seguro vas de shopping.

–Exploto las tarjetas.

–Ay mamá —la miro riendo mientras salgo de la habitación—. Chau, te amo.

–Te amo, dormí bien.

Camino hasta mi habitación y cierro la puerta, Gianna ya está en su cama y Paulo mirando el celular sin remera.

Esa es una invitación a que me rompas el orto ahre igual si.

Cuando me ve, deja el celular y se sienta en la cama. Acuesto a Gian en el medio y voy al baño a ponerme el pijama.

–¿Vos no pensas entrenar mañana con Leo? —lo miro a través del espejo.

–Ni en pedo, voy a dormir con el aire con mis dos bebés mientras ustedes se cagan de calor afuera.

Lo miro riendo y él me besa el cuello para luego besarme en los labios, sonrío y me voy a la cama.

Estoy demasiado cansada, perdón.

Agarro mi celular y miro Instagram, contesto un par de mensajes y ni siquiera pasan cinco minutos que miro a Paulo y ya está dormido y el nene encima de su brazo.

Boe, ahora me voy a traer a Gianna haber si mínimo me abraza.

[...]

El celular vibra y abro mis ojos acordándome que tengo que despertar aunque quiero dormir más. Que infierno.

Me levanto con cuidado de no despertar a ninguno de los tres y voy al baño, hago lo mismo de siempre y me plancho el pelo para luego maquillarme un poco. Consecuencias de dormir con el pelo húmedo (pelo como un león) y dormir poco (ojeras).

Salgo del baño y me pegó el susto de mi vida al ver a Gianna sentada en la cama, voy hasta ella y me agachó a su altura.

–Acostate acá con tu papá y tu hermanito mi amor —la acuesto en mi lugar y la tapo.

–¿A dónde vas?

–Con Leo, tiene que entrenar —le beso la frente—. No salgas de la habitación, si tu hermano está despierto y tú papá no, lo despertas ¿Si?

–Si, te amo.

–Te amo mucho más —le sonrío—. Dormí que es temprano.

Me termino de vestir (multimedia) y bajo a desayunar con los ambos. Luego de como media hora ya vamos de camino a la playa donde no hay nadie.

Son las primeras horas del día y ya está haciendo calor, por dios.

Qué lindo ser la que no está entrenando y se está muriendo de dolor de piernas, porque obvio que correr con arena hasta tus tobillos es más difícil y ni hablemos de tener que correr con el agua a las rodillas.

Luego de varias horas damos por terminado el primer turno y volvemos al hotel, no faltan los periodistas y fotógrafos fuera del hotel.

Apenas entrenamos, algunos de los chicos están ahí para ya ir a almorzar. ¿Tanto estuvimos en la playa?

–Sali de acá asquerosa —el Kun me mira—, toda transpirada.

–Anda tarado, yo te abrazo igual —lo miro riendo.

Subo a la habitación y me baño para sacarme toda la transpiración y la arena pegada porque obviously que también me tuve que tirar a la misma.

Pero todo sea porque el mejor del mundo llegué de la mejor manera y con el mejor estado físico al último partido que puede darnos el paso a la siguiente etapa.