21 | Paulo Dybala

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12/06/2020

–¿Ya estás? —Paulo me mira y asiento.

–Si, ¿Vos?

–Vamos.

Los tres juntos subimos al auto el cual maneja Paulo, Gianna va atrás sentada en su silla.

Llegando al canal, saco a Gian de su silla y la siento encima de mi.

–Trata de que no te vean —miro a Paulo.

–¿Por?

–No quiero tener problemas con nadie y que me traten de puta por estar con un pibe casado.

–So, no pasa nada boluda —me mira negando con la cabeza—. Ya está, que te acompañe a un lugar ni significa nada.

Solo me limito a asentir con la cabeza, mi hija dormida recuesta su cabeza en mi hombro y le tapo la carita con mi campera. Bajo del auto en la entrada del canal y Paulo va a dejar este en el estacionamiento.

Cuando Paulo entra al canal, alza a su hija y caminamos hasta el camarín. Cuando entramos estan Julián junto a Sofi y Nico, yo saludo a los tres y Paulo igual.

Algo incómodo para él saludar a Julián, supongo.

Mientras dejamos a Paulo con su hija solos, vamos a la sala de maquillaje, en la que también está la mamá de Oriana ya que baila con no sé quién, y comienzan arreglar ésta carita.

Cuando terminan, vamos nuevamente al camarín de los chicos y comenzamos a vestirnos.

Aunque está bueno mostrar aveces, esta vestimenta muestra mucho y no tengo el cuerpo que tenía antes de tener a Gian. Pero bueno.

El short negro hace que se me vea medio orto y el corpiño me apreta las tetas, ya fue.

–Hola mi rey —miro a Toto.

–Hola —me abraza—. ¿Qué haces vestida así?

–Voy a bailar.

–Ese culito —Yanina me mira riendo y me da a su hija.

–Hola hermosa —beso a mi ahijada.

–¿La abuela?

–Boe nena, te saludo y me preguntas por esa —la dejo en el piso.

Luego de saludar a Gianna, ya despierta, y a Paulo el cual me desea suerte con Sofi, Julián y Nico nos vamos al piso.

–Mira —Julián pasa la mano por mis hombros y me señala con la cabeza a la mamá de Oriana.

–Tu amada ex suegra —lo miro riendo.

Ella está dando una nota, nosotros le pasamos por al lado sin mirarla.

Vamos a un rincón a hacer prácticamente nada y hablar boludeces como siempre.

Unos minutos después, se acerca un notero con la futura ex suegra de Paulo. Pesada nivel cien.

–¿Cuál es el problema con ella? —el chico me pregunta y sonrió mordiendome el labio.

–¿Sabes cuál es el problema? —miro a Catherine—. Hablaste boludeces de mi, dijiste que yo no dejaba que Paulo viera a su hija y miles de giladas más... ¿Por qué no vas hablar con el marido de tu hija que tanto amas y le preguntas como son las cosas?

–Eso me dijeron a mi.

–No sé quién te fue con el cuento, pero tu hija un día antes de su casamiento me mandó un mensaje aclarando todo, pregúntale qué le dije —la miro—. Por más no haces cadena nacional diciendo el manantial de mentiras, ¿Tanta fama necesitas?

–¿Qué le dijiste a Oriana?

–Le dije que ojalá sea muy feliz con Paulo.

–Fuiste a buscar al marido de mi hija el día del casamiento... es chiquita.

–Creo que el día lo único que hice fue llevar a mi hija al hotel, dejarla con la abuela y después me fui con Giovani al otro lado del mundo... Yo no soy como tu hija que ella si fue a buscar a un pibe que tenía novia.

Doy una pausa porque me estoy quedando sin aire, pero tengo millones de cosas para decir que no me alcanza la vida.

–Y no intentes rebajarme con mi edad y no te rías porque te lo estoy diciendo en serio, que Paulo no te haya mandado a la mierda a vos y a tu entorno por hablar boludeces de mi trato con él y de lo que hacemos con Gianna no significa que no lo va hacer —niego con la cabeza—. Dentro de poco de una patada se van a ir bien lejos y recién ahí van a entender todo.... Ah y te digo algo, ojalá que el día que te enojes con Paulo, o se separe de tu hija, no empieces hablar mal de él como lo hiciste con Juli ¿Te acordás? Julián era lo mejor del mundo cuando estaba con Oriana, se separaron y fue lo peor. Consejito.

Luego de eso, vuelvo con Julián y el equipo. Pregúntenle si me encanta cerras otros.

–Dice algo más de vos o de Gianna y le rompo la cara.

–Ay mamá —la miro riendo.

–Dejala —Julián me mira.

–El quiere bardo.

–Obvio.