21 | Paulo Dybala

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07/01/2023

Hoy Argentina juega su último partido con Messi en el equipo, que triste todo la verdad.

Apenas llegamos al estadio ya se escuchan esos gritos y cantos, los chicos entran al vestuario y minutos después con Scaloni vamos a la cancha.

Al salir miro todo y no miento cuando digo que ésta cancha es toda Argentina y se ven muy pocos contrarios. Sonrío al mirar cómo cantan y alientan, es todo un sueño hecho realidad.

Preparamos algunas cosas para que los chicos calienten y luego de unos minutos ellos salen llevándose la mirada de todos, pero obviamente hoy el centro de atención es Leo.

–¿Escuchaste el remix? —el Kun me mira.

–¿Que remix?

–Brasil decime que se siente, jugar en casa de papá...

–Ay Sergio —lo miro riendo—, anda con los demás.

–Es posta boba, ya lo van a cantar —señala a la tribuna riendo.

Las ocurrencias que tiene ésta gente son increíbles. Luego de diez minutos, los chicos se van y con Scaloni sacamos todo del campo y vamos con ellos.

Con el once titular choco las manos y luego voy al banco de suplentes. Duele saber que es la última vez que Lionel va ser parte de ese once y que después de muchos años él ya no va estar ahí.

Ambos equipos salen al campo y comienzan a salir fuegos artificiales por todo el alrededor de la cancha.

Que momento tan lindo es el del himno, por favor. Ganas de estar en la tribuna y vivirlo desde ahí me sobran.

Luego de eso, todos se ponen en posición para comenzar el partido.

Hoy no pienso estresarme ni nada por el estilo, pienso disfrutar este último partido del mejor del mundo con la camiseta Argentina... digo eso y seguro a los quince minutos ya estoy con bronca.

Lo único que hago es estar parada al lado de Scaloni mientras él le da órdenes a los chicos, tampoco jugar a nada y perder. Sería la vergüenza mundial para todos que perdamos siendo los campeones del mundo y peor, en el último partido de Leo.

Parece ayer cuando estábamos puteando a Mbappé y Gotze por cagarnos el mundial de Brasil y Rusia y hoy estamos acá siendo campeones del mundo.

Vamos ganando aunque Leo todavía no metió ningún gol.

Al finalizar el primer tiempo, vamos todos al vestuario y Scaloni les habla a los chicos. Ellos asienten y minutos después volvemos a la cancha.

Últimos 45 de Leo, basta voy a llorar.

Y él como siempre tiene algo más para dar, Leo mete sus dos goles claves. Ya ni se cuánto vamos ganando.

Veo el reloj de mi celular y faltan cinco minutos para el final, Leo ya está casi por llorar con cara triste al igual que los chicos más cercanos a él, mi hermano, el Kun y demás.

Miro a la tribuna y Anto está llorando y Thiago con cara triste. Encima sumenle que este año es posible que también sea el último en el Barcelona, doble tristeza.

Lo único que puedo decir es que agradezco haber nacido en el mismo tiempo que él y poder disfrutar de su fútbol.

Apenas suena el silbato siendo el final del partido absolutamente todos van a abrazar a Leo, hasta los contrarios. Mientras que los cantos ahora son para él, Anto y los chicos entran a la cancha y se quedan a un lado.

Tantas emociones en este último mes que yo todavía no sé cómo sigo viva, de verdad les digo.

Y encima ni siquiera es una despedida de verdad, porque él va seguir jugando al fútbol en Barcelona, pero en la selección no. No me quiero imaginar lo que va ser esto cuando se retire realmente.

Él va a saludar y su familia y luego viene hasta donde está el resto del cuerpo técnico, lo abrazo última y le doy la camiseta con el 10 en dorado.

El peor día de mi vida ahre igual si. Lo veía tan lejos y está pasando.

Se va el capitán y el mejor jugador de todos, no sé cómo nos va afectar esto.