Te Seguiré.

Who Do You Love.

Continuación de FRIENDS.

Canción: Who Do You Love de The Chainsmokers ft 5 Seconds Of Summer.

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Dean gruñó con molestia mientras sacaba la ropa que iba a lavar y comenzaba a echarla a la lavadora. Aquel día le había tocado hacer la colada en compañía de Jack porque Sam estaba sumamente ocupado con una investigación, su madre había salido y Castiel...Castiel se fue esa mañana sin decir nada pidiéndole que lavara su gabardina. Dean lo había visto salir del bunker luciendo la camiseta que le obsequió hace mucho y unos desgastados pantalones de mezclilla, Jack lo alabó diciendo que parecía un motorista y el ángel sólo sonrió antes de desaparecer.

Desde hace meses llevaba comportándose de manera rara dejándolo a él de lado; Dean se sentía desplazado por el ángel últimamente, no respondía sus llamados y su distanciamiento provocaba que Dean se sintiera solo a pesar de tenerlo en frente, era como si un muro de hielo solido se alzara entre ambos a pesar de encontrarse en la misma habitación.

Encontré cigarrillos en tu abrigo Fendi
a pesar de que ni siquiera fumas.
Siempre estás cambiando tus códigos de acceso
sí, puedo decirte que nadie lo sabía.

Tomó la gabardina del montón de ropa y la miró unos instantes. Aquella gabardina siempre la había usado Castiel sin importar las circunstancias, era como su súper capa de héroe. Dean la estrujó en su puño preguntándose qué había cambiado en Cass, ¿el rechazo de hace meses? Dean le había dicho que lo quería pero no como él esperaba, Cass había prometido quedarse pero había alejado a Dean como si lo odiara.

Suspiró revisando los bolsillos de la gabardina pues Cass siempre dejaba cosas allí; sacó papeles y la espada ángel de un lado y, cuando revisó el otro, encontró una cajetilla rectangular con seis cigarrillos. Dean frunció el ceño agitándola; Cass no fumaba, nunca lo había hecho en los diez años que llevaba conociéndolo así que no había lógica en que estuviera haciéndolo ahora a no ser que...

—Jack Winchester—lo llamó Dean con voz dura sobresaltando al chico—Dime que éstos no son tuyos—le mostró la cajetilla mirándolo con los ojos entrecerrados.

—No son míos—negó el Nefilim—Sam me dijo que no debía fumar y no lo hago.

—Tampoco son de Cass—susurró Dean mirándolos—No pueden ser de Cass.

Jack miró a Dean unos segundos debatiéndose en si le aclaraba la pertenencia de esos cigarrillos o mejor se hacía el desatendido. Le había prometido a Cass que no le diría nada a los Winchester hasta que él estuviera listo, hasta que las cosas fueran más sencillas pero ver a Dean tan preocupado le causaba conflicto. Miró al cazador con ojos inocentes y negó con la cabeza encogiéndose de hombros esperando que aquello fuera suficiente.

Dean frunció más el ceño y se guardó aquella cajetilla en la chaqueta antes de encontrar el teléfono de Castiel en el mismo bolsillo. Sintió un nudo en el estómago pues Cass había a prendido a no deshacerse de su teléfono desde lo de Kelly. Encendió el teléfono y de inmediato le pidieron una contraseña. Sonrió tecleando la anterior.

Dean.

Contraseña incorrecta, al menos eso le marco el teléfono. Frunció el ceño, no estaba seguro de que Castiel supiera cambiar una contraseña por su propia cuenta. Escribió el nombre del ángel esperando adivinar en esa ocasión pero volvió a marcarle error, otro intento fallido más y el celular sería bloqueado y eso le diría a Castiel que anduvo de curioso. No quería ser entrometido pero cuando el ángel le escondía algo las cosas siempre terminaban mal para todos.

Sí, has estado actuando tan llamativamente,
me culpas, dices que pienso demasiado.
Te mueves diferente cuando hacemos el amor.
Cariño dime, dime...