Pongo por testigo a Dios que no te fallaré. Yo seré consejo nena, pero no tu juez.
Maite Zaitut
Aldebaran miraba a su Hija, como todo padre que acaba de conocer a su bebé. Nos ayudó a dar la noticia a los familiares de Bruno y Nadir, ahora, estamos preparando el entierro, o al menos eso hacen mis hermanas.
La tarde fue pesada, cargar la muerte sobre los hombros de nuevo es horrible, sólo que ahora sabemos que no pueden volver, ninguno de los dos.
Aún me es difícil creer que tan lejos llegó Dara para vengarse de Zafiro, ¿Cómo es posible? ¿Qué pasará ahora?
—Aldebaran—llamo al padre de Zafiro—Necesito saber, si ahora que todo salió a la Luz, y Dara mató a Bruno... ¿se volverá en una perdida?
Aldebaran niega con la cabeza mientras comienza a salir del cuarto de Zafiro, yo lo sigo, sigiloso, con miedo y rabia.
—Si bien Dara fue quien ideó esto, no fueron sus manos las que ejecutaron semejantes crímenes. La mente de Nadir fue corrompida por voluntad de ella, y Nadir fue quien metió el cuchillo en Bruno, Dara, lastimosamente sigue impune, y sigue teniendo sangre dominis.
Aldebarán se detiene en medio del pasillo, mira los cuadros, luego a mi, parece que este lugar no es de su agrado, y puedo entenderlo, al fin y al cabo es la guarida de los Nemosorum.
—¿Por qué vinimos aquí?—Pregunta cruzándose de brazos— entiendo que estamos en alianza, pero quedarnos con los nemosorum, no es, tan bien visto.
—¿Para quien? —Pregunto encogiéndome los hombros— La orden de las Rosas puede romper nuestro sellos con facilidad, a demás se pensaran dos veces antes de atacar aquí, al menos, eso creo.
—Los Anta y su inteligencia, hace dudar si en verdad lo son o sólo es un terrible juego.
—Si quieres nos vamos—ofrezco, pero Aldebarán se apresura a negar.
—Confío en tí, eres el lider, al fin y al cabo, y te debo las gracias por haberme liberado.
—La verdad es que no no lo hubiera podido hacer, si ellos no tenían el portal abierto—Caminamos por los pasillo de la casa de Alexandra y él me sigue— Ander ha sido de mucha ayuda, para serte honesto, desde la muerte de Zafiro, ya no pensaba, o sea, no había forma de que acierte una, pero creo que mi racha de mala suerte continúa.
—¿Mala suerte?—pregunta divertido mientras bajamos las escaleras—Lo que tienes se llama enamoramiento, no culpes al azar o al destino, ellas no tienen nada que ver que aquí y deberías saberlo.
Suelto el aire retenido en los pulmones, Aldebaran tiene la cara de una persona muy amigable, pero no lo es tanto, al final. Supongo que los años encerrado en la nada le han sido suficiente para armarse de una coraza bastante dura.
Al llegar a la sala me encuentro con el dúo de mis lamentos, la verdad no tengo muchas ganas de estar en el mismo lugar que el
mis rivales amorosos, pero eso es lo que la vida tiene. Le importa tres huevos lo que nosotros queremos.
—¿Cómo está?—Pregunta Hugo acercándose a nosotros cuando Aldebaran se acerca a la mesada y se sirve un poco de agua del dispensador de la nevera.
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Las Luces el Sol y la Luna [Libro3]
FantasiaLuego de la partida de Zafiro con Lior, Helios debe enfrentar el dolor que su corazón aqueja. Pero eso no es todo, ahora le toca volver al mando de los dominis, y fingir que nada ocurrió. La lucha entre los poderes se vuelve cada vez más clara, y...