Capítulo 15. Sangre.

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No te olvides de mirar bajo la cama, que los inmortales vienen por ti.

La música que ellos cantaban era realmente hipnótica. Los veía moverse, y como un montón de puntos negros flotaban de un lugar a otro quebrando el sello de los dominis, lastimosamente, el sello de los nuevos soldados de Helios no son tan fuertes como los suyos, o los míos, se requiere de un tipo de energía muy bien trabajada para hacer un sello del tamaño y las características que hace Helios. Él cubre kilómetros enteros, y eso, no cualquiera lo hace.

Las personas que estaban cantando de la nada comienzan a Dar pequeños aplausos rítmicos, cuando el domo se derrumba por completo.

En ese instante Ader me aprieta el hombro, en señal de que los nemosorum y dominis han llegado al fin, lo que me da ánimos, pues no deberé presenciar una terrible masacre.

Comienza el paso dos del pla. de Hugo, Suelto hilos de energía, los arrastró por el suelo, y los conectó a todos los dominis u nemosorum, ahora la comunicación entre nosotros es directa, y recibirán cómo alimentación parte de mi energía ilimitada.

Lior se acerca a mi oído y me susurra la pregunta de siempre cuando se preocupa por mi. Yo simplemente muevo mi cabeza para darle a entender que puedo con esto.

-Nosotros vamos a esa cueva-Anuncia Lior a mi madre y a Alex, que ahora deben ir a otra.

-Bien, Amit-mi madre queda mirándome por un momento para luego hablar- Debes vincularte con los dominis que están bajo el domo en cuanto salgan de la casa...

-Si, lo sé...

-Y luego refuerza el vínculo que tienes con las sombras de Hugo...

-Ader... lo tengo bajo control.

-Y no olvides pasar la energía suficiente a Helios...

-¡Mamá!-grité agobiada por tantas pautas-Ya lo sé, sé lo debo hacer, deja de preocuparte. ¿ok? No pasa nada, Yo puedo con esto.

Mi madre se acerca a mi y no sé por qué podría llegar a sorprenderme, esa mujer después de todo se ha metido en mi piel mil veces, me conoce mejor de lo que me conozco yo, a pesar de haber estado ausente tanto tiempo.

-Sólo cuidate-su voz es un hilo en mi oído-No hagas nada arriesgado.

-¿Lo sabes?-Pregunto con algo de vergüenza más que otra cosa.

Ader sólo sonríe y se va, dejándome con la pregunta colgada en el aire, en verdad esa mujer es un misterio, pero vamos que sabe cómo hacerse entender cuando quiere.

Finalmente los sonidos de la energía dispersada en el campo de batalla comenzó a sonar en mi.

Lior me toma del brazo para que vayamos a nuestro posición, pues, desde allí continuaré a los Dominis y a los Nemosorum.

Los miembros de la Orden de las Rosas no se dieron ni cuenta de lo que les acaba de pasar, claro, ellas creían que nosotros seríamos sus víctimas, y la historia dio vuelta.

Cuando estamos en nuestra posición, procedo a las instrucciones que me habia dejado Hugo.

Energía, debía esparcir energía, como aquella vez lo hice para los dominis, en forma de pétalos. consigo generar los primeros 100 en un suspiro, y los envío a cada miembro aliado a esta batalla.

Desde donde estamos, puedo ver como la pelea no sólo es cuerpo a cuerpo, si no que las energías de los bandos estallaban por lo alto, los gritos de los heridos, y de las personas furiosas inundaron el lugar, creando una especie temor en mí.

Las Luces el Sol y la Luna [Libro3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora