Deslizo el vestido color blanco por mi cuerpo, siendo ayudada por el rizado del que cuyas caderas todavía cuelga una toalla. Trato de acomodarlo lo mejor que puedo mientras me miro al espejo. La prenda que llevo es totalmente veraniega, cuya parte superior es suelta, de raso color crema con escote en V por delante y por detrás y la inferior de una gasa color blanco inmaculado, siendo las dos partes separadas por una fina cadena dorada. El vestido me llega hasta los tobillos, tiene un tajo al costado derecho que me llega hasta la mitad del muslo y es ligero y suelto, tanto que con el viento que hay afuera temo que tendré que estar sosteniéndolo toda la noche. Como la tela es clara y algo translúcida (no demasiado), tuve que elegir una ropa interior de color blanco. A Harry no le gusta este vestido por tres razones:
1- Es muy largo (¡Tiene un tajo que deja ver la mayor parte de mi muslo derecho!).
2- Es muy translúcido (¡Es de noche!).
3- Es muy virginal (¿En serio, Harry?).
–No me gusta ese vestido. –él gruñe a mis espaldas.
Continúo retocando mi peinado, que es un sencillo recogido, dejando algunos mechones sueltos en la parte delantera.
–Ya me lo has dicho.
Sus manos se ciernen en torno a mis antebrazos, girándome de golpe.
–¿Cómo se supone que te folle esta noche si ahora te veo con ese puto vestido de monja?
Mi boca se abre en sorpresa, sintiendo una oleada de calor en mi sistema al escuchar la palabra "follar" proveniente de sus labios, que curiosamente no puedo parar de mirar ahora. Había olvidado la forma tan sucia de hablar de Harry, y lo que sus palabras provocaban en mí.
–¡No es de monja!
–No, tienes razón... es demasiado transparente.
–¡No es transparente! –me quejo, como si de una niña haciendo un berrinche se tratara.
–¡Se te ven las bragas!
Me doy vuelta, mirándome por milésima vez en el espejo. –No se ven. Lo hacen si apoyas la tela contra la piel. –corrijo dándome vuelta y poniendo la gasa contra mi trasero, demostrándole mi teoría. –Así, ¿ves?
–No hagas eso. Ya te he entendido. No lo hagas más.
Suelto el vestido, emitiendo una sonrisa victoriosa. –¡Vale, vale! –lo abrazo. –A veces tendrías que dejar de ser tan gruñón. –digo depositando un beso en la línea de su mandíbula.
–Eres tú. Es tu culpa.
–Es solo un vestido.
–Que te queda jodidamente perfecto.
Le sonrío, besándolo en los labios. –Gracias. También te amo.
Lo dejo vestirse mientras termino de arreglarme y cuando estamos listos, se para junto a mí frente al espejo. Se ha puesto un pantalón negro y una camisa de lino blanca ajustada. En los pies lleva sus botas marrones y no puedo evitar sentirme acalorada al verlo a él de botas.
–Nos vemos bonitos. –murmuro.
Él pasa su mano por mi cintura y tira de mí. –Nos vemos perfectos. –dice dándome un beso en la mejilla y no puedo evitar sonreír.
Cuando estamos a punto de salir de la habitación, su voz interrumpe mis acciones.
–¿Y tus zapatos?
–No me pondré zapatos.
Harry me mira como si estuviera completamente loca.
–¿Nunca viste una boda en la playa? No se usan zapatos. –argumento.
ESTÁS LEYENDO
She's Broken. | h.s
Fanfiction❝Él no me ama. Nunca lo hizo.❞ ADVERTENCIA: Este fanfic puede presentar consumo de alcohol y drogas, escenas de violencia física, lenguaje fuerte y contenido sexual explícito. bemyhalfheart