ANTOLOGÍA

23. (DVF.)

Octubre 29, 2018. 4:242pm.

Ochenta y seis, ochenta y siete, ochenta y ocho.

El jarrón de Diane tenía cuarenta y ocho triángulos o eran menos y Juliana había contado doble. Llevaba exactamente cuarenta y dos minutos sentada en el lobby, a pesar de la poca paciencia que tenía para ese tipo de situaciones le parecía que estar ahí era mejor que estar en su nuevo departamento, sola.

– ¡HEY! Llegaste temprano. – Oh, se sintió aliviada cuando notó a Karlie. La recepcionista empezaba a incomodarla, la miraba por encima de la revista que parecía leer.

– Y, tú... ¿Qué es todo eso? –

– Oh, uhm cosas de la escuela. –

– ¡Oye si, cierto! Me enteré. – sonrió Juliana. – De todas siempre creí que tú serías quien llegaría más lejos. –

– Gracias. – sonrió la rubia. – Oí que dejas DMG. – Habló Karlie sin querer incomodar a su amiga conocida. – Storm siempre es una mejor opción, ahora vas a ser parte de la familia. – Al igual que Juliana. Karlie había abandonado DMG tiempo atrás, y había continuado felizmente con su vida. – No es que todo sea más fácil, pero sí una señal de que todo saldrá bien. – La castaña sonrió, e intentó no resentir lo que Karlie había dicho.

– Gracias Karls. –

– No hay de qué, si me necesitas, estoy aquí. – Juliana de nuevo volvió a sonreír.

Con la capacidad que Karlie tenía para sacar conversaciones y tener la atención de todos, Juliana se había olvidado un momento de todo, la conversación de Karlie además de entretenida era divertida.

Minutos después Diane había arribado, por fin estaba ahí, y un montón de chicas más habían entrado ya. Juliana se sintió de nuevo fuera de lugar, la mayoría de esas modelos eran amigas de Karlie y por consiguiente, amigas de Valentina. Bastaba con solo apreciar la manera en la que Sasha Luss, miraba a Juliana.

– Las rusas te odian. – dijo Karlie entre dientes, sacándole una risita a Juliana.

Decidieron tomar asiento en unos de los bancos que se encontraban en las esquinas.

– Buen día señoritas. – habló Diane con entusiasmo, y todas regresaron el saludo. – Me alegro de que todas estén aquí... empezaremos las pruebas minutos más temprano, así cada una dispone de su día. – todas se emocionaron. – ¡Eso me gusta! Es la actitud. Kate querida, tu vienes primero, luego Taylor, Sasha, Liz, Jac, y mi preciosa Irina, vamos a agilizar esto. – Juliana casi se atraganta con su saliva. ¿Estaba Irina ahí?

– Diane, Irina no llega aún. – habló Karlie.

– Bien, entonces alteramos un poquito el orden y sigues tu Karlie, preciosa...– Diane se asomó entre todas la modelos para encontrar esa cara que buscaba desde que había llegado. – Juliana, querida, ¿Eres tú? estás aquí, no sabes la alegría que me da verte. – La mujer de rojizo cabello se abrió paso entre las chicas, y caminó hasta donde estaba Juliana.

– Hola, gracias por invitarme... llegué antes. – Sonrió.

Todas la miraban ahora, Karlie parecía entusiasmada con que Diane estuviera contenta con la presencia de la latina. Desvió un momento su mirada de Diane y Juliana, había notado algo raro, ahora todas las chicas las miraban, la habitación se había quedado en silencio.

La mirada de las chicas cercanas a Valentina atravesaba como lanzas a Juliana. En especial Jac, Toni, y Sasha. Taylor solo sonrió y evadió la mirada. Unos pasos apresurados se escucharon cerca de la entrada y después de esto un par de risas inconfundibles, tanto para Karlie, como para Juliana.