Mi vida en Hogwarts 1er año

Cada acto tiene sus consecuencias

Snape ordenó que me parara. Megan no nos podía seguir. De reojo pude ver que ella estaba algo angustiada, al igual que yo.

Tuve que seguir a Snape hasta la entrada al despacho de Dumbledore. Mi corazón latía tan fuerte que pensé que terminaría sin él. Sabía que era mi fin. Sabía que terminaría fuera de Hogwarts. La primera en mi familia. Que vergonzoso.

Entrando al lugar, las personas en los retratos comenzaron a presentar atención a lo que pasaba en el piso. El profesor Dumbledore estaba escribiendo en su escritorio. Al vernos por encima de sus anteojos, dejó la pluma a un lado. Alzó la vista sin decir nada.

- Profesor, le traigo a la señorita ___. Al parecer, casi mata a otro estudiante, y por lo que dijo Peeves, rompió una ventana del castillo. Creo que ya se volvió una amenaza para la escuela. - Mis lágrimas querían salir. Estaba temblando, de los nervios.

- Muy bien, Profesor Snape. Puede retirarse. Yo hablaré con ella.

- Si me permite, señor, quiera quedarme para escuchar que tiene para decirnos.

- Severus...

- No quiero ser como Bellatrix. - Había recordado que el profesor Snape era mortífago, al igual que ella. Ambos se quedaron sorprendidos por lo que había dicho.

-¿Qué significa eso, señorita ___?

-¿Por qué piensas que vas a ser como ella? - Dumbledore se enderezó en su acierto.

-Es verdad. Casi mato a Oliver Wood y rompí un vidrio. Soy una amenaza para la escuela.

- ¿Puede explicarse mejor?

- Desde hace un mes, hice magia sin la necesidad de mi varita. Y por eso soy peligrosa. - Snape lo miró a Dumbledore sin entender nada. - Es por eso que mande a Sam Maleik a la enfermería. No quiero matar personas. No quiero hacer daño.

Unos segundos más tarde, la profesora McGonagall y el profesor Flitwch entraban al lugar. En ese momento estaba disimulando un ataque de nervios. Sin duda estaba por estallarme el corazón, con cada paso hacia mi.

-¿señorita ___? ¿Qué sucedió?

- Sin duda, la señorita ___ utilizó mal su magia. Rompió un vitral y casi tira a Oliver Wood de su escoba en el campo de Quidditch. - Creía que Snape me iba a acusar de intento de homicidio.

- ¿Cómo? ¿Por qué?

- Fue involuntario.

Todas las miradas estaban puestas en mi. Mientras se ponían al tanto de mis actos, sentía mi ropa toda sudada. No sabía que mas decirles. En silencio estaba esperando que sucedería. Seguramente la profesora McGonagall tendría piedad de mí. Pero no sabía si los demás también.

- Creo que si la ayudamos a controlar su magia, no podrá lastimar a los demás, o lo que se lastime a sí misma.

-¿No iré a Azkaban?

-¡No! ¿Por qué piensas que te mandaremos allí?

-Mis compañeros dijeron que si lastimaba a otra persona, iría a Azkaban.

-Viendo su situación, señorita ___, y notando de que no puede controlarlas. He decidido de que esta castigada. - Al escuchar eso del profesor Dumbledore, me tranquilice un poco. - Pero durante el castigo, aprenderá a controlar sus manos. También tendrá que asistir a las clases del segundo año, además de las de primero de hechicería. Tus profesores estarán atentos a tus acciones hasta que todo se solucione.

-Tranquilízate, ___. Todo va a estar bien. - La profesora McGonagall notó que seguía nerviosa.

- A partir de la próxima semana, después de clases, irás con la profesora McGonagall y el profesor Flitwch. Mientras más rápido podrás controlar tu magia, menos en peligro estarás y estarán los demás.

- Esta bien.

- Bueno, señorita ___, puede retirarse. Pero tenga mucho cuidado.

Salí del lugar bañada en sudor. Estaba desorientada. No sabía para donde ir. Pase por un pasillo, donde estaba Megan comiéndose las uñas. Al verme fue corriendo hacia mi.

-¿Qué paso?

- Necesito vacaciones.

-¿Te irás a casa?

-No. Estoy castigada. Hasta que pueda manejar mi magia.

- Que suerte. Pensé que sería algo peor. - En ese momento, el equipo de Quidditch de Gryffindor venía hacia nosotras. - No digas nada. - La miré. - Que no sepan que casi se cae por tu culpa. Si no todos pensarán que eres una amenaza para la escuela.

- Chicas, ¿Dónde se habían metido? - Se notaba de que Oliver estaba bien. - ¿Te paso algo, ___? - Me había olvidado que estaba toda sudorosa. Tenía el pelo un poco mojado.

- Estamos bien. Solo que había ido a buscar algo a la torre. Y por eso esta así. Quería volver rápido a la práctica. - Pude notar que todos dudaban.

- Bueno. Nos vemos más tarde. - Asentimos.

-¿Qué hiciste esta vez? - Fred no se tragaba lo que Megan había dicho. Tragué saliva.

- Nada. - Mi voz salió algo temblorosa. Fred entrecerró sus ojos.

- Algo nos estas ocultando.

- No es nada Fred. Vamos, ___. Tenemos que ir a la biblioteca.

- Tarde o temprano sabremos que están tramando...