Siempre has sido tú

Decisión

—Tony.— repitió Strange

—¡Que no, Strange! No pienso desconectar a Steve.— respondió enojado.

No, él no estaba enojado; estaba más allá de lo que la furia, la tristeza y el desespero, podían alojarse en una persona común.

Los demás, se quedaron callados.

Aquella plática en la mañana, no estaba resultando tan bien como habían creído.

La madre de Thor había venido desde Asgard para ayudar un poco a dar un análisis al paciente, de otra índole. Sin embargo, el resultado, fue el mismo.

Steve estaba en una especie de limbo relajante que ayudaba no sólo a que su cuerpo no estuviera estresado y se pudiera recuperar más rápido; sino que su retorno era incierto.

Luego de ello y de que por alguna extraña razón, Frigga lo tomara por el rostro, con una expresión que lo conmovió hasta lo más hondo; una junta fue realizada al día siguiente a primera hora.

Todo iba bien, los puntos de estabilidad en la salud de Steve mejoraban a pasos rápidos, tal vez no como se esperaban que sucedería, pero sí para darles la tranquilidad que tanto buscaron. Pero todo se torció de mal a peor cuando Strange tocó el tema del coma en el que Steve estaba inducido.

Cada uno de los presentes se quedó estático. Estaban conscientes de que el coma de rehabilitación sólo debía durar 6 meses para que el organismo fuera puesto en funcionamiento de nuevo al terminar ese plazo, pero otra cosa era decirlo con tan poco tacto, y una frialdad inesperada.

—¿Qué dijiste?— le preguntó Tony, creyendo haber oído mal.

—Y a me escuchaste Stark; Rogers no puede seguir en ese estado, se debe de tomar una decisión.

—Para empezar Strange, por si no te has dado cuenta...¡No sabemos qué mierda le pasa a Steve!— explotó Tony.

—Somos conscientes de los riesgos a los que nos podemos enfrentar si dejamos más tiempo del necesario en ese estado a Steve, pero tampoco tenemos la cura a su enfermedad.— habló esta vez Natasha intentando mediar y tranquilizar el ambiente tenso que se formó en un segundo.

Bucky se movió ligeramente hacia Wanda intentando tranquilizarla; la Bruja Escarlata sin siquiera notarlo empezaba a desplegar sus poderes contra el otro mago.

—Si el Capitán está bien, lo mejor que podemos hacer es seguir así, hasta que estemos seguros de que el agente tóxico que Zemo instaló en su cuerpo, se haya desvanecido completamente.— comentó Visión.

Strange suspiró.

—Steve Rogers ha sobrepasado el tiempo límite para una persona en estado de coma inducido para su propio bienestar; así como no sabemos lo que le suministró Zemo, no podemos dejarlo en ese estado, en uno de los peores casos, él no podría despertar debido a la falta de reacciones químicas en el cerebro, produciendo así...una muerte cerebral.— explicó Stephen ante los Vengadores.

No fue solo Tony a quien el estómago se le hizo nudo, sino a los demás; eso, sin contar con que nadie respiraba, ni uno solo. De nuevo, el ambiente se había vuelto mortalmente helado.

—No pienso desconectarlo Strange, y es mi última palabra.— pronunció Tony con la voz estrangulada.

—No tienes ningún derecho ni el poder para tomar esa decisión con respecto a su vida Stark. Eso no está en ti.— atacó el médico.

Natasha suspiró, saliendo un poco, del trago amargo que todo eso le producía.

—Por supuesto que la tiene.— habló ella, generando que la atención de los presentes se girara hacia ella.- Steve dejó firmado desde hace tiempo, que si algo le sucedía, ponía en las manos de Tony su vida.