☆ 25.2 ☆

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VALENTINA:

Era fin de semana y la verdad no tenía ningún plan ni nada que hacer. Hola Netflix, hace mucho no nos vemos ¿Cómo anda Noah Centineo? ¿Ya lo pusieron en otra película?

Estaba lo más bien en mi pieza viendo una película hasta que entro el hincha pelotas de mi hermanito.

-Hermana hermosa, mi ejemplo a seguir, mi inspiración -Me dijo con voz de inocente.

-¿Qué queres, pendejo no deseado?

-Llevame a la casa de una amiga.

-No, yo a tu edad no tenía amigos y vos tampoco vas a tener. Además el forro de Noah nunca me llevó a ningún lado y yo no voy a ser mejor hermana que él.

-Por favor -Me suplicó con carita de perro.

-¿Desde cuándo tenes amigas vos? -Hermana celosa mode on.

-Hace poquito llego a la escuela -Noté que estaba nervioso.

-Ay ay -Me emocioné. -TE GUSTA AAAHHHHHHHH.

-¡CALLATE TONTA! -Me gritó re cebado.

-Bueno, te llevo -Vino y me abrazó.

-Gracias.

Me cambié rápido y le avisé a mí mamá que nos íbamos. Mi hermanito me iba indicando por donde teníamos que ir mientras jugabamos en el camino a no pisar la rayita. Cuando empecé a caer en cuenta de a donde íbamos, entré en pánico.

-Es acá -Me dijo mi hermano señalando esa casa.

-¿Estás seguro de que es ésta? -Pregunté rezando por que se hubiese equivocado. Pero no.

Solo espero que no atienda... La puta madre.

-Hola -Saludó el forro. -¿Valentina?

-No, soy un testigo de Jehová, pedazo de pelotudo.

-¿Tanto me extrañas que hasta el finde venis a visitarme? -Me contuve las ganas de meterle una piña.

-Traje a mi hermanito para que vea a la forra de tu hermana, que si es igual que vos, mejor me lo llevo porque no quiero que se junte con la chusma -Agarré a Thiago de la manito pero justo apareció la pendeja.

-¡Thiago! -Dijo con una sonrisita de hija de re mil puta. -¿Y ésta que hace acá? -Dijo mirándome a mi con cara de orto.

-Yo lo traje y también me lo puedo llevar -Amenacé. Nos miramos intensamente unos segundos y después me sacó la lengua y yo le blanquee los ojos.

-Gracias, Vale -Me dijo mi hermanito y pasó adentro.

-Cuando terminen, me llamas -Le dije a Fabricio. -Y pobre de tu hermana que le haga algo malo a mí bebé.

-¿No queres quedarte? -Ofreció haciéndose el piola.

-¿Con vos? -Me reí. -Ni loca.

-¿Tanto miedo tenes de que te caiga bien? -Otra vez con esa miradita de superioridad. Como me enferma.

-Lo último que te tengo a vos es miedo. Lo primero es odio, y lo segundo, ganas de partirte una silla en la cabeza.

-Mira, te quedas un ratito. Sí a los 10 minutos te queres ir, te abro, pero si no, te quedas. No perdes nada, además, dudo que tengas algo mejor que hacer.

-¿En serio pensas que te voy a hacer caso? -Me reí de nuevo. -No creo que en 10 minutos repentinamente cambie mi percepción de vos.

-No te la bancas.

-Mira como me la banco -Pase adentro.

MATIAS:

No estaba seguro de lo que estaba por hacer. Estaba nervioso. No podía pensar bien. Hacía mucho quería hacer esto, pero pensé que nunca iba a ser capaz.

Tenía miedo y a la vez curiosidad por lo que podría pasar. Sin importar qué, ya estaba listo. Era el momento.

Con toda la inseguridad del mundo apreté la tecla.

Había subido mi primer video a Youtube.

N/A: Perdón que actualice tarde. Posta que quería mantener el ritmo, pero pasó algo que me arruinó la semana y que todavía me está doliendo.

El Domingo subo otro capítulo para compensar ;) Los amo.

#PiropoSensual: Ni la veterinaria puede explicar lo perra que estás.









¿Te callas un ratito? Joya | Matías CandiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora