18.

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Tom Holland

—Recuerda Stanley, hoy te viene a buscar tu tio Sam ¿Ok?—Le dije antes de que el entrará a su salon.

—Bueno—Le sonrei.

—Ve—Le dije despidiendome—Te amo.

—Yo tambien—Me dijo antes de que unos compañeritos se acercaran a el.

Sali de su escuela y entre al auto, tome mi telefono para marcar a Sam.

—Hola Tom—El me saludo contestando.

—Hola Sam ¿Como están por alla?—Le pregunte.

—Muy bien ¿Como están ustedes?

—Bien igual, hoy Isabelle tiene una cita al ginecólogo  y quizas sepamos si es niño o niña.

—¿En serio? Que bueno Tom.

—Si, solo te llamaba para recordarte lo de Lee, no se te puede olvidar pasar por el.

—No te preocupes Tom, estare ahi.

—Ok, gracias, saludos a mama, papa y Harry y dile a Paddy que lo extraño por mi casa aún tenemos muchos videojuegos que completar.

—Bueno, saludos a Isa.

—Ok adios—Finalice la llamada.

Entre a casa y deje mi chaqueta en el sofa.

—¿Amor?—Le hable a Isa.

Subi las escaleras y entre a la habitacion pero estaba vacia asi que entre al baño y vi a Isabelle sentada en el inodoro con una mirada asustada.

—¿Que paso?—Me arrodille al frente de ella.

—Yo...—Le costaba hablar—Vine al baño y...

Me mostro su ropa interior, la mire y tenia una mancha de sangre.

—Mierda—Susurre—Ok—Me puse nervioso—No—Dije calmandome.

Si yo estoy nervioso y ella tambien lo esta se va a poner peor la cosa.

—Ven, levantate con cuidado—Le ayude a levantarse—Vamos al auto.

Con cuidado bajamos las escaleras y la subi al auto.

—No te preocupes, estará todo bien—Le dije prendiendo el auto mientras marcaba al medico.

Con la mano tomada de Isa conduci hasta la clinica, me baje rapidamente y le ayude a ella.

—Tranquila—Le dije al ver que su cara mostraba un gran espanto y note sus inmensas ganas de llorar.

Llegamos a la consulta y le explique lo que pasaba, nos hicieron pasar de inmediato y acostaron a Isabelle en la camilla.

—No los quiero asustar pero si es lo que me estan describiendo no puede ser nada bueno, deben estar preparados—El medico dijo.

Asenti tragandome el nudo de la garganta y dejando un beso en la frente de Isa pero ella no decia nada, solo apretaba fuerte mi mano.

El medico comenzo a revisarla haciendo cosas raras que no entendia, una sonrisa se le formo en su rostro.

—No es nada—El dijo y mi cuerpo entero se relajo de nuevo.

Mire a Isabelle que cerro los ojos suspirando.

—¿Entonces que fue?—Le pregunte.

—Al decirme que habia sangrado me imagine lo peor pero solo fue una mancha de sangre, es normal en los embarazos, muchas veces sangran al principio de este, al medio o al final o quizas ni sangran pero no hay de que preocuparse.

Sonrei mirando a Isabelle.

—Las mujeres al estar embarazadas producen mucha mas sangre de lo normal y quizas una venita pequeña exploto y causo el sangrado—Nos explico—Tambien pueden ser las relaciones sexuales ¿Estan siendo sexualmente activos?

Los dos asentimos.

—¿Por que no lo mencionaron antes?—El sonrio.

Incomodo le segui la corriente.

—No tienen de que preocuparse, ademas es bueno. El sexo en el embarazo es beneficioso tanto para la madre y el padre como para el bebé. La relación de pareja se afianza en un momento muy especial, mejorando la conexión física y emocional, mientras que también es placentero para el bebé—Me atragante.

Eso si es mata pasiones, yo quiero que sea placentero para Isabelle no para mi hijo.

—Quien durante el coito recibe una mejor oxigenación del riego sanguíneo lo cual le provoca sensación de bienestar. Como veis, ventajas para todos—El doctor nos sonrió.

—¿Placentero para el bebé?—Pregunté.

—Así es pero no de la forma en la que estás pensando, el bebé se siente más cómodo ahí dentro provocándole felicidad.

Entendí sonriente.

—Pero no todo es felicidad—El dijo—Deberán bajar la intensidad un poco, si no quieres seguir sangrando eviten tener relaciones muchas veces seguidas.

—Si, está bien—Isabelle hablo.

Nos despedimos de el y salimos de la clínica.

—Te dije que todo estaría bien—Le sonreí.

—Si, pero ahora nada de relaciones—La mire con el ceño fruncido.

—¿Que? El doctor dijo que bajemos la intensidad no que dejemos de hacerlo. Además es bueno para el bebé.

—Pero no quiero pasar un susto como este de nuevo Tom.

—No volverá a pasar, solo nos calmáremos—Le dije y ella asintió riendo.

Llegamos a casa y vi la hora, aún tenía tiempo para pasarme por la academia.

—Me cambio y nos vamos—Ella me dijo.

—¿Para donde?—Le pregunté confundido.

—Yo a mi trabajo y tú al tuyo.

—¿Estas segura de poder ir a trabajar?—La acerqué a mi.

—Si—Me sonrió—Quiero ir—Enredo sus dedos en mi cabello.

—Está bien, pero me llamas cualquier cosa—Le dije.

—Lo juro—Dijo separándose de mi.

Le tome la mano y la volví a pegar a mi abrazándola.

—Llama a tu trabajo, di que te sientes muy mal y nos quedamos los dos acostados—Le susurre.

Ella río separándose.

—No Tom, tengo que ir a trabajar.

Le rogué con la mirada.

—No, en la tarde nos acostamos los tres y vemos una película.

—Esta bien—Dije como cuando Stanley no recibe lo que quiere.

Welcome to the fatherhood-Tom HollandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora