Bajo la luna 🌙 [Caché] || One Shots [TERMINADA]

Neones [Parte 4]

Cartagena — Colombia
1:42 a.m.

Pov. Calle.

No vino. La esperé por horas en la puerta pero ella jamás apareció, sé que me lo dijo pero igual estaba decepcionada. Un amargo sabor se instaló en mi boca y yo quise aplacarlo a punta de tequila.

Tal vez se le habían complicado las cosas o... simplemente no quiso venir. Después de todo, solo éramos un par de desconocidas que habían coincidido por un tonto reto. No tenía porque venir.

Mis amigos bailaban a mi alrededor, felices y completamente sumergidos en el ambiente, pero aunque era mi cumpleaños, la fecha que más esperaba en el año, justo en este momento ya no tenía ganas de celebrar.

Lo que más me preocupaba era la razón de mi estado estado de ánimo. Hasta ayer, yo no la conocía, no sabía siquiera de su existencia. ¿Cómo es posible que me hiciera falta en un día?

Sebastián tenía una teoría, amor a primera vista. Pero eso no era real ¿o si? Según yo eso solo pasaba en las películas, nunca en la vida real.

— ushh marica, que mamera — me quejo en voz baja para mi misma — ya superalo

— hey, cumpleañera — me llama Laura, una de mis amigas que recién había llegado y me toma de la mano — ¿que haces aquí perdida? ¡Vamos! ¡Tenemos que celebrar!

Sonrio de lado. De nada servía seguir pensando en cosas imposibles, tenía ganas de quitarme este sentimiento de vacío de alguna forma y por eso la seguí.

Pasamos el resto de la noche bailando, quise olvidarme de todo pero siempre, de forma inconsciente, giraba la cabeza de vez en cuando hacia la puerta, para ver si aquella chica de pelo turquesa entraba, pero jamás lo hizo.

Mi fiesta terminó al rededor de las 4 de la mañana y cada quien se fue a su cuarto para descansar pero por más que quise, yo no pude. A las 6, me rendí y me paré para ir a tomar desayuno. Podría pedirlo a la habitación, pero necesitaba tomar aire y caminar hasta el restaurante, me haría bien.

Caminé por el buffet eligiendo mi desayuno y decidí ponerme unos pancakes con un poco de dulce y un jugo de naranja.

Me senté en una mesa cercana y suspirando me digo a mí misma sonriendo.
—"Feliz cumpleaños"

— ¿Qué haces  aquí tan sólita? — Escucho una voz dulce y levantó la vista.

— Poché — digo sorprendida — ¿Qué haces aquí tan temprano?

— vine a comer algo — responde encogiendose de hombros.

Estaba sola y parecía que tampoco había dormido bien por las bolsas oscuras bajo sus ojos.

— Yo pensé que estarías durmiendo — dice y sonrio

— Eso quisiera.

— ¿qué tal estuvo la fiesta? — me pregunta bajando la mirada

— bien  aunque no viniste — digo y un atisbo de tristeza aparece mi voz

— lo siento — Se disculpa — lo intenté, pero al final no pude.

— tranquila, no es nada. Igual entiendo que tenías que estar con tu hermana.

— sí — asiente — anoche fue un caos. él estúpido de su novio estuvo molestando de nuevo.

— ¿su novio? —pregunto confundida.

ella asiente suspirando jalando una silla para sentarse frente a mí.

— Nico, el chico del que hablábamos ayer ¿recuerdas? — me pregunta y yo asiento forzandome a ocultar mi sonrisa.

Así que no era novio de ella, sino de su hermana.