Encuentro de sentimientos

~121~

Saber que vamos a tener un bebé es de las mejores cosas que me ha pasado en la vida.
Veo a Minnie Ki sonriente, y eso me encanta demasiado, el viento sopla suavemente y puedo notar el pequeño vientre sobresalir en medio de su camisa holgada.

Hace tres semanas que nos enteramos del bebé, y admito que lloré cuando la doctora nos entregó la ecografía, era demasiado para mí.
He comenzado a pintar una de las habitaciones, ya que Minnie Ki dijo que quería escoger los colores y se decidió por un tono lila pastel y blanco, el marco de la ventana es un tono café oscuro, y los estantes que quiere son verde manzana, esos nos los entregaran dentro de dos días.

Por el momento se ha quedado en casa, sin clases y sin trabajo, la doctora Min Suk nos dijo que descansara un par de días, ya que el estres podría afectarle al bebé, que se relaje y que no piense en nada mas que en comer y dormir... me causó gracia, pero le recetó algunas vitaminas y nos dió algunos consejos para que todo este proceso sea tranquilo y sin sustos.

- Jongie!- me llamó mientras entraba a la sala

- Sí bebé?- le pregunté desde la cocina, estaba cocinando el platillo favorito de Minnie Ki o del bebé o de los dos juntos, la obsesión por las pastas había aumentado, aunque yo sé que debo tener un poco de cuidado cuando a antojos se refiere, ya que si su deseo por algo es demasiado debo cambiarlo por alguna fruta o tostadas, o simplemente un jugo...

- Tengo hambre...- dijo- No... corrección: tenemos hambre!- exclamó y no pude evitar reír por lo bajo.

- Esta bien...- dije y saqué la ensalada- Empieza con esto, luego te daré la lasaña, y recuerda que hoy iremos a la otra ecografía, Min Suk dijo que tu monitoreo sería cada tres semanas...

Minnie Ki asintió y se concentró en su comida, le serví jugo y solo tendría que esperar los últimos minutos para que la lasaña estuviese lista.
Con premura de parte del señorito embarazado la saqué y le serví de igual forma.

Comimos tranquilamente.
Y luego le ayudé a Minnie Ki a tomar un baño.
Entre juegos pudimos ducharnos y al salir le ayudé a vestirse con ropa abrigada, ya que estabamos empezando el invierno, y por nada del mundo quiero que se enferme, menos en estos momentos.

Salimos y Minnie Ki tomó una siesta, mientras ibamos escuchando música tranquilamente, hasta que llegamos a la clínica.
Lo desperté y algo soñoliento nos encaminamos hasta el consultorio.

- Buenas tardes...- saludé a Min Suk

- Hola Jong, hola Min Ki- nos saludó ella amablemente- Bien, ya saben que hacer, por favor...- dijo y nos dió lugar para que pasaramos a la camilla donde Minnie Ki se sentó la vez anterior.

- Tranquilo...- me susurró él y rápidamente le miré

- Me sigo poniendo nervioso- le dije y tomé su mano, dejé en un beso en su frente y sonreí

- Oh... vaya...- la voz de Min Suk me sacó de mi burbuja con mi esposo

- Pasa algo?-preguntó Minnie Ki

- Los bebés están muy saludables chicos...

Espera. Espera. Espera, qué?

- Bebés?- pregunté yo, Minnie Ki y yo nos miramos mutuamente sin comprender

- Sí, no solo será uno, tendrán dos bebés...- ella nos sonrió y siguió analizando los detalles en la pantalla- Oh, este es su corazón- nos dijo y en la habitación se escuchaban los pequeños latidos- Aquí están sus piernitas, y estos son sus bracitos, a estas alturas la mayor parte de su cuerpo comienza a adaptar la forma normal, aunque aún no podría decirles el sexo de los bebés, sin embargo están muy saludables, ahora solo vamos a pesarte y les daré la ecografía...- se levantó y nos dejó solos mientras iba a su escritorio

- Son dos...- susurró Minnie Ki emocionado

- Tendré dos bebés...- dije yo sorprendido

- Yo los estoy cargando...- me dijo con una sonrisa divertida y lo abracé.

Aún no les habíamos dicho a mis padres ni a los padres de Minnie Ki, tampoco a nuestros amigos. Y debíamos decirles pronto, el vientre de Minnie Ki ya era notorio, no ibamos a poder ocultarlo...
Aunque tampoco estaba en nuestros planes hacerlo, mañana los invitaríamos a nuestro hogar para compartirles la mas maravillosa noticia...