Reencuentro

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Damon seguía en lo suyo dándoselas de rebelde, comprándose su propio humo de ser un guerrillero, hasta que un día la mala suerte hizo que mientras hacía rayados en los muros de un edificio privado, se encontrara con militares, el no tenía miedo de aquello, no de las consecuencias que aquello pudiera ocasionarle, pero apenas reconoció el rostro inexpresivo de Dave, vislumbró que su panorama se vería particularmente negro, aun así se dejó llevar por la rabia que le producía aquel hombre, intentó golpearlo, pero fue detenido por otros dos jóvenes de bajo rango, entonces le escupió. El pelirrojo le abofeteó la cara y lo esposó con gusto. Le pusieron una mordaza en la boca, un saco de arpillera en la cabeza y lo llevaron arrastrando a una bodega mientras se quejaba, pero al estar la calle vacía y por la hora, nadie fue testigo de lo sucedido.

Una vez dentro, lo ataron a una silla y le dejaron allí a solas, sin posibilidad de soltarse y con la venda y la mordaza aún puestas.

Una vez terminado el turno de ambos muchachos al mando de Dave, este ordeno a Alex que trajera a Graham para una misión

Damon decidió que lo único que podría hacer en esas circunstancias, luego de varios intentos fallidos por liberarse, era intentar dormir, y lo hizo que a una hora indeterminada cuando sintió que Dave le susurraba en la oreja. – Te tengo una sorpresa, hijo de puta, espero que la disfrutes, maldito cerdo.

Primero ordenó al de lentes permanecer fuera vigilando los alrededores y entro solamente acompañado de Alex.

- Te prohíbo que hables, puede que dentro escuches cosas que te incomoden, pero no digas una sola palabra, ¿me oyes? – advirtió antes de que ambos hicieran ingreso al recinto.

- Entiendo. - respondió el de cabello oscuro muy intrigado respecto a los planes del contrario.

Al entrar Dave comenzó a besarlo apasionadamente, como el lugar no tenía ventanas, la visibilidad era poca, a pesar de que ya eran las ocho de la mañana, por lo tanto, Alex no pudo ver que alguien más se encontraba allí, así que devolvió el beso igual pasión, hasta que escuchó los quejidos de alguien, al instante alejó al pelirrojo de sí y estuvo a punto de hablar, pero calló siendo llevado por Dave a fuera, allí se reunieron con Graham y volvieron a entrar.

Esta vez si que encendieron las luces, Alex se escandalizó al notar que el sonido anteriormente escuchado por él provenía de un hombre secuestrado y Graham abrió sus ojos con mucha impresión.

- Adivina a quien encontré cometiendo actos vandálicos anoche, Graham. – pronunció el pelirrojo con tono más bien divertido descubriendo por fin el rostro de Damon quien se quedó en silencio debido a la sorpresa que le produjo ver al chico de lentes. – Exacto, al imbécil de tu ex. Hazte cargo. – Ordenó abandonando el lugar y llevándose a Alex del brazo. - Vigila al chico para que haga bien su trabajo. Ahora es tú responsabilidad que haga lo que sabes que procede en estos casos y de paso te desquitas tú. Sé que te gusta el muchacho y ahí está la causa de que no deje que se lo metas. Nos vemos. – Dijo despidiéndose de beso en la boca, dejando a Alex atónito ante sus palabras.

Graham no comprendía a qué se refería Dave al decirle que se hiciera cargo, en verdad sí, pero prefería hacerse el idiota, había acompañado al pelirrojo en una detención una vez y sintió mucho asco y miedo al ver las cosas que hizo con aquel pobre ser humano y lo violento que podía llegar a ser.

Quitó el paño que impedía que el de ojos azules hablara y comenzó a reprenderle.

- ¡Eres un idiota!, ¿acaso quieres que te maten? - expresó con tono enojado.

- ¿Cómo te atreves a usar ese tono conmigo?, ahora eres igual a ese perro con el que te revuelcas. ¿En verdad tan poca cosa eres que necesitas acostarte con ese animal para mantenerte en la milicia?, ¿ese grado de falta de talento tienes? – Dijo Damon soltando toda su ira y como forma de provocación.

- ¿Hasta cuando tengo que aguantar tus malos tratos? – replicó el de lentes con la voz un tanto quebrada.

Alex, alertado con los gritos y poco dispuesto a hacer pasar a Graham por todo lo que significaba tener que "hacerse cargo", se acercó a Graham y lo alejó de Damon.

- Mira, no tienes por qué obedecer a Dave ni actuar como él. Lo que sea que tu decidas hacer con Damon te apoyaré, no tiene por qué pasar por esto ni hacer con él cosas innecesarias. No diré una sola palabra, se que lo amas y que no quieres.

El de ojos azules no oía nada desde su asiento, solo vio la forma en que Alex abrazaba a Graham mientras le hablaba y gritó – ¡Eres una vil puta, Graham!, no puedo creer que me haya enamorado de ti.

- Sal, sal Alex. Yo me encargo de él. – dijo con tono calmo, el otro obedeció y l fin quedó a solas con su primer amor, se acercó a Damon, sacó su arma y disparó.

NA: quiero aclarar que esto ya estaba en las cosas que tenían que pasar en la historia, estaba en la estructura desde que hice los primeros cáp. ninguna relación con la mierda de ahora que me gustaría que no estuviera pasando, lamento no actualizar mis otros trabajos, pero ahora hay solo hay estos estados de ánimo;

 sentir rabia

cacerolear

sentir pena

llorar

WarsawDonde viven las historias. Descúbrelo ahora