You warm me up ✧ KookTae

29

        Taehyung abrió los ojos repentinamente. El susto lo carcomió, por lo que se sentó en la cama, pero una fuerte punzada en la cabeza lo hizo quejarse. Había bebido demasiado la noche anterior. Comenzó a analizar su entorno cuando se dio cuenta de que Mark, un tipo que estaba en la clase de Lisa, dormía plácidamente a su lado. La sábana cubría parte de su cuerpo desnudo y en eso fue que Taehyung se espantó, porque el también estaba desnudo.

        Lamentablemente no recordaba nada de lo que sucedió el día de ayer, pero lo único que sabía era que le dolía el trasero.

        Y haciendo el mínimo ruido posible, se levantó de la cama, se vistió y salió corriendo del hogar. Miró la hora en su teléfono: eran las 6:10 am, aún tenía tiempo para llegar a la escuela.

        Había pasado un mes desde que cortó toda relación con Jungkook. Y para el castaño los días se resumían en: dormir, llorar, estudiar, follar e intentar seguir con su vida. Simplemente trataba de lidiar con el asunto a su manera, ya que aún lo amaba demasiado, tanto que dolía. Por esa razón llevaba un mes acostándose con cualquier ser vivo que se le cruzara. Porque necesitaba sacarse el tacto de Jungkook de su piel, sin embargo nadie podía quitarlo, nadie era capaz de hacerlo sentir tan bien como lo hacía el pelinegro.

        Y lo que más le resultaba molesto, era el hecho de que se había enamorado de Jungkook en un mes. En un mes había logrado hacerle sentir cosas que jamás nadie había logrado. Y lo odiaba por eso, porque en todos los instantes quería lanzarse a su brazos y besarlo, pero no podía y aún así, lo necesitaba más que nunca.

...

—Hola tigresa.— lo saludó el pelinegro mientras lo abrazaba.

—¡Ya! ¡No me digas así!— se quejó Taehyung como un niño.

Yoongi le había puesto el apodo de "tigresa" porque últimamente se acostaba con tanta gente. No tenía sentido alguno, pero por alguna razón a Taehyung le molestaba.

—Ya se, tu eres la tigresa y yo el adivino.— espetó Yoongi con una sonrisa.

        El castaño alzó una ceja —¿Adivino porque?

        —Porque se que ahora mismo te duele el culo. ¿O no?— las mejillas del menor tomaron un fuerte color rojo mientras que su amigo reía a carcajadas.

        —No es gracioso.— le dió un codazo.

        —Claro que lo es.

        —¡Hola chicos!— saludó Lisa, quien acababa de llegar. Los chicos la saludaron de igual manera —Taehyung-ssi...— canturreó
—Tienes que contarme todo con detalles, ahora mismo.

        —Está bien. Pero te advierto que no fue uno de los mejores.

        —Chicos, tengo que hablar con alguien, vengo en unos minutos.— avisó Yoongi antes de salir por la puerta principal de la escuela.

        Lisa y Taehyung se miraron confundidos, pero eso no evitó que el castaño comenzara a contarle su no tan genial experiencia con Mark.

        Su entretenida charla fue interrumpida cuando un círculo de alumnos se armó en la mitad del patio principal. Y como los curiosos que eran, Lisa y Taehyung fueron a averiguar de que se trataba. Como pudieron, atravesaron la masa de gente hasta llegar al medio del circulo, dónde yacía una pelea entre Taeyong y Mark.