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Taehyung se removió sobre la cama cuando escuchó su alarma sonar. Estiró su brazo y tanteó la mesita de noche hasta tocar su teléfono, lo tomó y apagó el molesto ruido que lo había despertado. Aún con sus ojitos cerrados, se volteó en busca del cuerpo cálido de su Jungkookie, sin embargo, se encontró con una fría sábana vacía. Su labio se abultó inconscientemente hasta que un olor a café lo hizo ponerse de pie.

        Con ayuda de su mano, rascó su pecho desnudo para luego meter sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón de chandal. Empezó a caminar perezosamente hacia la cocina, encontrándose con el mayor leyendo un libro apoyado contra el mesón de la cocina mientras que con una mano sostenía su taza de café.

        Se acercó hasta el a paso lento, y cuando estuvo en frente, los ojos de Jungkook se separaron de su libro para encontrarse con los del menor. Ni siquiera le prestó atención a la mirada divertida de Jungkook, así que solo tomó el café que tenía en la mano para dejarlo sobre el mesón y así poder abrazarlo. Y una vez más, el exquisito aroma varonil del mayor lo hizo perder la cordura.

        Jungkook cerró su libro y lo dejó a un lado para poder abrazar a la persona que amaba.

        —Buenos días, lindura.— murmuró con suavidad, dejando un besito sobre su cabello.

        —Buenos días, amor. ¿Dormiste bien?— sin romper el abrazo, se separó un poco para poder mirarlo.

        —Si estás a mi lado, todos los días dormiré bien.— su cabeza se escondió en la curvatura de su cuello para dejar suaves besos ahí.

        Taehyung se sonrojó —¿A que hora tienes que estar en la escuela?— preguntó luego de unos segundos de silencio.

        —Como en veinte minutos.— bufó —Y tú, tienes que estar allá en...— se separó para mirar su reloj de muñeca —, cuarenta minutos. Así que desayuna y báñate.— sus manos se deslizaron por todo su cuerpo hasta llegar a su trasero, donde apretó a su gusto el culito ajeno.

        —Llevo dos semanas seguidas de exámenes, no quiero.— habló con voz de bebé mientras cruzaba sus brazos.

        —Vamos, te quedan dos semanas más y todo se acabará. Aguanta un poco más. ¿Si? Además, te a ido bastante bien.— le sonrió.

        —Que bueno que hoy es viernes.— soltó una risita nasal.

        Se separó del cuerpo ajeno para sacar un plato hondo de uno de los estantes y la caja de cereales que estaba sobre el refrigerador. Jungkook tomó su taza de café y fue a sentarse a la mesa, y segundos después, llegó el menor con sus cereales con leche servidos.

        —¿Qué harás después de clases?— preguntó Jungkook luego de beber un sorbo de su café.

        —Pensaba en jugar videojuegos en casa. ¿Por qué preguntas?— se metió una cucharada de cereal a la boca.

        —¿Te molesta si te acompaño? No tengo nada que hacer, además quiero pasar a ver a tu abuela y también estar contigo.

        Taehyung sonrió —Bueno, entonces te veo después de clase.— el mayor miró la hora en su reloj y se puso de pie —¿Ya te vas?— puchereó, viendo como desaparecía en el baño.

You warm me up ✧ KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora