v i j f

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ꈍ◡ꈍ

Había llegado el día, y desde que despertó no pudo dejar de estar inquieto, preguntándose qué iba
a pasar, a donde irían y demás, y a pesar de no saber si lo era o no, prefería creer que sí era un cita, y
no estaba más lejos de la realidad. Keef no era tan capáz como pensaba de hacer una acción tan simple como mover la boca y decir tan solo cuatro palabras, siendo la cita disfrazada por una salida por su cumpleaños, pero ambos sabían que no era solo eso.

Se juntarían a las seis de la tarde a fuera de la pastelería, a esa hora no hacía tanto calor, y todavía faltaba para que la oscuridad reinara en el cielo, era un buena hora para salir.
El por qué escogieron juntarse ahí
era bastante simple, ninguno conocía la casa del otro, y sentían que sería
un poco raro que lo hicieran tan de
la nada, aunque probablemente solo era un sentimiento algo tonto.

Después de saludarse y ver con claridad la felicidad e emoción del otro Keef empezó a guíar a Gir, emprendiendo una caminata por las calles de la ciudad. Gir se preguntaba a donde lo llevaba, si es que iban al cine lo encontraría algo cliché, pero no le molestaba con tal de estar al lado de Keef, grata fue su sorpresa
al ver donde estaban. ¿Patinaje en hielo? Eso era nuevo, le gustaba.

── ¿Algunas vez has patinado en hielo, Gir?── Ansioso por una respuesta, con una sonrisa cubriendo sus claros nervios.

── No, ésta será la primera vez que
lo hago.── Curvó sus labios sin temor a dejar ver su emoción, Keef suspiró aliviado al no haberlo arruinado.

Ya en la pista Gir se aferraba a los brazos de Keef, este le insistía que
era mejor agarrarse del barandal pero se negaba, él pelirrojo ya había ido algunas veces con Tak, podría decirse que tenía algo de experiencia.
Después de algunos minutos Gir logró andar sólo, aunque igual prefería estar cerca de Keef; ambos se reían e intentaban no perder el equilibrio al estar tan cerca del otro, fue un momento agradable para los dos.

Al ya acabarse su tiempo volvieron a caminar por la calle, ahora sin ningún rumbo fijo, él azabache sugirió ir a comer helado, cosa que hicieron.
Hablaban de cualquier cosa mientras comían de su helado, llegando al parque y sentándose en una banca para seguir hablando, ambos ya se habían comido sus helados.

── ¿Sabes, Keef? Me gusta alguien desde hace un tiempo.── Miró al cielo al hacer la pregunta, y luego sus dedos entrelazados entre sí con una leve sonrisa y un sonrojo igual de pequeño. Keef se asustó.

── ¿Oh enserio, y quién?── Lo miraba esperando una respuesta, tratando de prepararse para un rechazo de forma indirecta a pesar de seguro no conocer a la persona de la que gustaba.

── Es pelirrojo y es realmente lindo, se llama Keef.── Deshizo el agarre de sus propias manos y puso la izquierda sobre la del mencionado, sonriendo y esperando su respuesta.

── Ya veo. ¿Puedes cerrar los ojos
por un momento?── Gir le hizo caso, tenía un leve presentimiento sobre
lo que venía, y si era lo que creía lo esperaba con ansias. Sus deseos se cumplieron y sus labios se unieron, un beso simple, pero suficiente para ambos en esos momentos.── Tú también me gustas.

Ambos estaban felices y con sus corazones latiendo, no tenían nada más que decir por el momento. Al rato por fin se decidieron por irse
del parque, comenzando a dirigirse
a la casa de Gir, despidiéndose al llegar a la entrada.
Gir pasó de largo a su familia y fue directo a su pieza, tirándose a su cama para luego tomar su celular
e escribirle a Mimi, sí fue una cita,
y estaba muy contento por aquello.

panqueques y chocolate    [KaGr] [HIATUS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora