Pokemon: Lejos de Casa

Capítulo LIV

Los soldados junto a los pokemon se habían alejado, tras la orden de Zarez. Unos protegían la puerta de acceso a la habitación, otros vigilaban a los ninjas y a Thomas, y finalmente los dueños de los cinco Houndoom, mantenían sus ojos sobre mi.

Según mis estudios en el instituto, la quemadura de un Houndoom, te dolerá toda tu vida, no importa si te logras curar, el ardor estará allí siempre, por lo que la serenidad que tenían esos cinco pokemon era perturbadora. Un Houndoom en mi mundo es conocido por su hostilidad, pero, se conoce que si alguno de esos pokemon mantiene una calma anormal, es cinco veces más hostil y agresivo que los demás.

Constante veía a los ojos los Houndoom, pero me llevaba una aterradora y fría mirada por parte de estos, al igual de los soldados que los acompañaban.

─¡No te preocupes! Esos Houndoom solo atacarán si yo lo ordenó ─dijo la general─ Bueno continuaremos nuestro combate, justo con los pokemon que teníamos, ¡pero como venciste a Roserade! Usaré a otro pokemon.

─¡Eso es trampa! ─grito Thomas.

─¡Calla al heredero, Trexy! ─varios murmullos provinieron del lugar donde se hallaban la sublider y Thomas, quien, tomó la decisión a regañadientes─ ¡Bien! ─dijo la general que se subía las mangas de la chaqueta─ Libera a tu pokemon de fuego, que yo iré con Malamar.

Fire estaba envenenado, por lo que no duraría mucho combatiendo. Intente resignarme a liberarlo para luchar, pero la voz de Zygarde resonando en mi cabeza cambio las cosas.

─Confía en tus pokemon. Pueden estar heridos, paralizados, congelados, quemados o envenenados, pero aun así, lucharán por ti. Tienes una gran conexión con ellos, incluso con Golett, que no lleva más de un día contigo y ya dejo su marca en tu mano y al resto de tus pokemon. Cree en la conexión y fuerza que hay entre tus pokemon y tú.

Aún no entendía lo de la marca de Golett, pero era evidente que potenciaba la fuerza de la conexión y los ataques que ejercía, al momento de usar la conexión.

─¡Sal Fire!

Quede sorprendido al ver como Combusken, ya no estaba envenenado y parecía totalmente recuperado.

─Eso es una de las habilidades de la marca. Cura y revitaliza a los pokemon que tengan la marca tras pasar un período de tiempo ─explico Zygarde─. También otorga otras habilidades, pero, las descubrirás con el tiempo.

─¡Tu pokemon esta curado! ─exclamó Zarez─ ¡Muy interesante saber eso! ¿Pero será el mismo pokemon? Se que tienes a un Ditto y conozco sus poderes, así que te pido amablemente que liberes a tu Ditto, para confirmar si no estás haciendo trampa.

─¿Por qué dudas? ─intente que mi pregunta sonase ruda, pero la mirada de la general hizo un efecto contrario.

─He leído bastante sobre la historia del antiguo reino de Sier, y ninguno de los datos señalaba que la línea evolutiva de Torchic, fuese capaz de recuperarse de problemas de estado por si solos ─explico la general─. Es por eso que pienso en la posibilidad que estés usando a Ditto.

Tome la pokeball de Ditto de mi bolsillo derecho, y lo libere. La cara de todos fue de asombro al ver que realmente estaba usando a Combusken.

─Bueno ahora que veo que no eres de los que hacen trampa. Tengamos un combate dos contra uno ─señaló la madre de Fred─. Mi Malamar contra tus dos pokemon.

─Eso, ¿no sería hacer trampa? ─indiqué.

─Roserade es mi pokemon más débil, y ya tu Combusken tuvo un combate bastante difícil. Malamar es mi tercer pokemon más fuerte, de segundo como ves es Dusknoir ─el pokemon emergió del suelo─, y, mi pokemon más fuerte sigue en su pokeball. Si logras vencer a Malamar con tus dos pokemon, tendrás una ventaja en cuanto al número de pokemon, debido a que tendrías un pokemon de ventaja ante mi. ¿No te parece?