𝙰 𝚙𝚘𝚠𝚎𝚛𝚏𝚞𝚕 𝚌𝚛𝚎𝚠

•.¸♡ ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ ᴄɪɴᴄᴏ ♡¸.•

—Tu turno, Rayito. —dijo Tyler.

—No lo sé, no quiero volver a lastimar a alguien. —dijo Ray con una mirada triste.

—No lo harás. —alentó Spencer. —Ahora exactamente, ¿qué pasó?

—Solo quería ayudar a Ryan, lo prometo. Pero cuando tomé su mano lo electrocuté... dos veces.

—Qué extraño... ¿a quién más electrocutaste?

—A Andy, pero no fue mi culpa, él fué el que tomó mi mano.

—¿Pero qué hiciste antes? ¿causaste fricción en tu mano con algo? —preguntó Spencer.

—Probablemente estabas cerca de una fuente de energía o... ¿luz? —dijo Dallon.

—¡Las luces del pasillo! —dijo Mikey.

—Puede ser que sí, porque cuando se fundieron las luces del pasillo, incluso a Ray se le esponjó más el cabello. —argumentó Ryan con una risita.

—También creo un poco en esa opción, eres muy listo amor. —dijo Ray dirigiéndose a Mikey.

Mikey simplemente se sonrojó y le dedico la sonrisa más dulce que pudo a Ray.

—Entonces... se podría decir que, ¿Ray se alimenta de la energía? —pregunta Pete.

—Algo así... —respondió Spencer.

—Pues ya veremos dijo el ciego. ¿Crees que puedas hacerlo otra vez, Ray? —preguntó Andy.

—Bueno... Supongo que así aprenderé a controlarlo la próxima vez. —dijo Ray.

—Pero aquí no hay focos, niño listo. —dijo Pete.

—Pero sí hay sol, —defendió Spencer. —puede que funcione, ya que el sol es la fuente más grande de energía, no pierdes nada con intentarlo Ray.

El rizado suspiró, se puso de pie y entrecerró los ojos al mirar casi directamente al sol. —¿Y qué se supone que deba hacer?

—Intenta lo mismo que yo hice. —respondió Gerard. —Concéntrate lo más que puedas.

Ray le hizo caso al pelinegro, recordó que cuando se fundieron las luces, las había señalado, así que hizo el mismo movimiento aunque se viera gracioso.

Extrañamente funcionó. No le sucedió nada al sol, pero a Ray sí.

Como el sol es una energía más potente que la de un simple foco, el efecto en el rizado fue más escandaloso.

El cabello de Ray se esponjó demasiado, tanto que en ese momento podría audicionar para ser la nueva imagen de Nito e instantáneamente le darían el papel.

Sus venas ahora se marcaban todas y cada una de ellas a través de su piel, tomando un color dorado muy brillante al mismo tiempo que se empezaba a formar un aura del mismo color a su alrededor.

—¿Es un mal momento para comentar que ahora sí tenemos excusa para decirle Rayito de sol? —preguntó Pete.

Ray pensó que era suficiente y se detuvo, igual no había sido mucho tiempo pero no sabía cual era su límite, así que era mejor prevenir que lamentar.

—¿¡Ahora qué hago para dejar de brillar!?

—Pero amor, tu siempre brillas. —dijo Mikey.

—Bebé, te amo pero no es momento. —contestó el rizado.

—Descarga tu energía sobre algo. —dijo Dallon.

—¿Sobre qué? —pregunta Ray.

—No sé, pero si lo haces sobre mí te puteo, mamón. —dijo Pete. —Y el golpe va más fuerte si es contra Patito. —continuó mientras abrazaba a Patrick por la cintura, el rubio tenía miedo, así que correspondió rodeando el cuello del moreno con sus pálidos brazos y ocultando su rostro en su hombro.