Fragancia [Taegi/Yoontae] Historia Completa

Veintiocho

Desperté con un fuerte dolor en mi vientre, me sentía realmente mal y ninguna posición en la que estuviese aliviaba el dolor, sentía como la temperatura en mi cuerpo subía paulatinamente y los temblores se apoderaban de mi a cada minuto.

- Chu-ungha... Me tomaré el día... Y-yo creo que estoy entrando en celo... Será mejor que no vaya – dije entre quejidos.

- Tae oppa, ¿necesitas algún remedio, quieres que vaya a verte?

- No... No te preocupes, estaré bien, además... No puedes dejar a Jin hyung solo... Y-yo estaré – solté un quejido – bien, estaré bien si me tomo mis medicamentos.

- Oppa por favor, si no te sientes bien avísame, iré inmediatamente.

- Prometo avisarte cualquier cosa.

Colgué la llamada y me envolví con una manta, los calambres se hacían más fuertes y sentía mi respiración pesada.

 Entré a la cafetería con un pequeño regalo para mi novio, compré un libro de fotografía que habíamos visto en una librería, le prometí enseñarle de una manera más profesional, pero para mi sorpresa Taehyung no era quien estaba detrás de la barra.

- Hola bienvenido... ¿Min...? Disculpa no recuerdo tu nombre, soy muy malo recordando nombres – Dijo el chico de anchos hombros detrás de la barra.

- Soy Min Yoongi, tu debes ser Kim Seokjin, Taehyung me ha hablado de ti – respondí intentando ser lo más cortés posible.

- Si, ese mismo soy, un gusto. Cuéntame, ¿qué te puedo servir hoy? – dijo sonriendo.

- Y-yo... En realidad, yo buscaba a Taeh...

- Ah... Taetae no vendrá hoy, mi hermana recibió un llamado de él diciendo que no se encontraba bien para trabajar, una lástima...

- Gracias por la información, yo me retiro entonces.

- Vuelve pronto Min Yoongi – se despidió el Seokjin mientras agitaba rápidamente su mano.

Era muy extraño que Taehyung no fuese a trabajar, por lo que decidí ir a visitarlo, quizás estaba realmente mal y necesitaba un poco de ayuda.

Al llegar a su departamento toqué varias veces el timbre, pero no hubo respuestas; intenté recordar la clave de ingreso, pero me fue imposible por lo que insistí golpeando la puerta.

- Tae soy yo, Yoongi; Seokjin me dijo que no te encontrabas bien. Bebé abre la puerta.

Después de vario minutos sentí como el seguro de la puerta se abría y poco a poco pude ver a mi omega, él lucía realmente pálido y con un brazo apoyaba su peso contra la muralla, no me miraba solo mantenía la vista hacia el suelo, pero entre su cabello húmedo pude ver como hacía muecas de dolor.

- Tae, dios, ¿Qué pasa? – me alcé sobre el para tomarlo entre mis brazos, sintiendo reiterados quejidos de su parte.

- N-no... No hyung – decía en pequeños susurros.

Cerré la puerta rápidamente y lo cargué entre mis brazos, agradecí tanto que su departamento fuera pequeño; lo recosté y él encorvó automáticamente su cuerpo volviéndose un ovillo.

- Mierda, Tae dime que pasa – le exigí intentando correr el cabello húmedo de su frente.

- Es-estoy en celo, hyung – dijo finalmente.

Me sorprendí ante su respuesta; mi cabeza comenzó a funcionar automáticamente, un omega en celo requiere del cuidado de su alfa, quizás así mi omega se sentiría mejor.