180 Grados - Tzuyu & Tú.

Capítulo ochenta y dos.

Pastillas

El primer capítulo de nuestro programa salió al aire, dejando opiniones demasiado divididas, aunque al menos no solo negativas, empezamos bien.

Sería un episodio por semana, siendo los últimos tres los más importantes requiriendo nuestra presencia en un estudio para grabar las reacciones de otras personas y nosotros mismos.

Por lo menos no estaba tantísimamente atareado, dividí bien mi tiempo, siendo la primera mitad del día grabación de videoclips, la otra producción, así por más de dos semanas de extremo cansancio, en el que nada cambió, opiniones divididas aún, lancé Circles, siendo un videoclip ambientado en el renacimiento y caballeros, aprovechando mi cabellera larga.

Recién acabo aquél, se publicó, además de cortar mi cabello de una forma ya mucho más decente y elegante.

Sugar tardó un poco en hacerse, aunque solo por un margen pequeño, desde ese punto ya se empezó a archivar para lanzar un videoclip cada dos semanas.

En el proceso también me fuí barajando entre colaboraciones y grabaciones, una con una integrante de (G)I-Dle y Girls Generation.

Pese a tantísimas tareas a la vez, podía dormir bien, aunque un día aprovh9y caminé de noche hasta una farmacia cercana, comprando un nuevo paquete de somníferos de reserva, ya había hecho la receta previamente.

Para terminar de sazonar, tenía que cumplir un mínimo de presentaciones por canción promocional para entrar en las nominaciones de premios de fin de año, por lo que ya no tenía tiempo ni de pensar o de estar quieto.

Una de las semanas más movidas y agobiantes después, y ya se nos dió la notificación de nuestra requerida presencia en una semana para el programa.

Siendo el capítulo próximo el de las películas.

Luego el de la producción de canciones para finalizar con el del beso.

Se rebajó el ritmo cuando las producciones habían terminado, dejándome solo con las presentaciones y grabaciones.

El amor al arte y a una persona nunca me había costado tanto esfuerzo físico y mental.

Se lanzó Sugar y se grabó el episodio nuevo de We Got Married, solo nosotros hablando un poco sobre cómo llevamos esa situación.

Pese a que está un poco en segundo plano los lanzamientos de vídeos, no hay que restar que cada uno rompe los récords del de detrás, siendo yo la única persona que lo había hecho más de tres veces seguidas.

Eso es a lo que llamaba público híbrido, gente normal que solo le gusta la música, y los fanáticos del pop coreano que son mejores que bots, ambos públicos se mezclaron dándome aún más potencia.

Las opiniones del programa pasaron de ser muy mitad mitad, a más de apoyo, principalmente porque casi nunca se me había visto llorando ni abierto frente a cámaras más que solo un virus alegre donde estuviera.

En cuanto a Tzuyu y Once, increíblemente se lo iban tomando de a poco bien, de por sí Tzuyu triunfaba más en el exterior por ser extranjera, si el programa hubiera sido con Nayeon las cosas serían otro tema por ser nacional y muy querida por ello.

En cuánto a comunicación, manteníamos unas decentes pláticas, mientras ella tenía sus descansos yo estaba en espera para presentarme en escenarios, en la noche ambos estábamos libres de momento, y en la mañana nos daba tiempo para darnos los buenos días.

Físicamente era todo lo contrario, como era costumbre, ya recordaba el porqué muchos al rededor de Astro decían que no querían salir con ellos pese a tenerles gusto, las agendas son horrendas.

Uno de entre los tantos días ajetreados, tenía problemas para dormir, por lo que tomé un par de somníferos cómo era costumbre, ya que esperaba que hicieran efecto alrededor de un cuarto de hora después, no me había despedido de Tzuyu, recién llegaba a casa.

De un momento a otro empecé a perder mucha fuerza, luego estabilidad, cayendo de golpe al piso.

Lo próximo que vi era la claridad de una ventana a través de mis párpados.

Además de un frío agobiante por las venas.

Cuando abrí bien los ojos, me di cuenta que no estaba ni en mi sala ni en mi habitación personal, estaba en un hospital con una vía intravenosa y el uniforme de paciente.

Mi teléfono estaba a un lado, en la mesa de noche, a lo que lo tomé, recién desbloqueado vi como tenía demasiadas llamadas perdidas, muchos mensajes y en general, muchas notificaciones.

Comprobé la fecha, notando que eran cuatro días después de lo que recordaba.

Inmediatamente llamé a mi manager.

— ¿Qué pasó? — Pregunté desde mi línea. —Tuviste una sobredosis, entraste en coma, por lo que veo ya saliste de él y no tienes daños— Dijo Desde su lado.

— ¿Ah? — Pregunté atónito. —Las pastillas para dormir que compraste son cuatro veces más potentes que las que tenías, por lo que tu sistema no pudo con ella— Dijo explicando, aunque en ese momento entró una enfermera.