180 Grados - Tzuyu & Tú.

Capítulo ciento treinta

Re-diseño

—Ahora si ten cuidado con mi cabello, nunca me ha gustado tenerlo corto pero me obligan a tenerlo así— Aclaré a la estilista.

Poco a poco iba viendo como las hebras de mi cabello que ya estaba corto se separaban de mi.

Por lo menos con el cambio físico, el cabello corto por primera vez si me quedaba bien.

Sin nada más que hacer, volví a mí casa.

Y luego de las pequeñas cosas que había pedido, me dediqué a armar todo, no había dejado una habitación libre por nada.

Luego de un pequeño shock eléctrico momentáneo, terminé por fin con toda la instalación. O eso pensaba hasta que vi un pantallazo azul en el monitor principal.

Volví a meterme debajo de la mesa y al final era un cable de electricidad de la tarjeta gráfica mal colocado, procedí a repetir y reiniciar y la magia estaba hecha.

Configuré el sistema, abrí el navegador y empecé a instalar la lista de cosas que tenía como mínimo que tener.

Una media hora después y probar audio y vídeo por fin estaba preparado para algo que incluso ya había hecho, aunque no a un nivel tan profesional.

Me tomé una foto rápida para auto publicitarme y la subí a unas cuantas redes con un enlace respectivo y al encender la transmisión de un momento a otro pasé de tener tres espectadores a tres mil, luego quince mil y eso se fué multiplicando hasta llegar a cien mil en cinco minutos.

— ¿Qué hacemos hoy? — Pregunté ya que no tenía ni idea, lo hice en tres idiomas de paso.

Empecé a leer el chat y era virtualmente imposible, así que bajé la velocidad a un número que no entendía bien pero que era lo suficiente para entender.

La comunidad coreana me pedía a gritos que jugará el videojuego de moda que nunca ha dejado de estar de moda básicamente, League Of Legends, la otra comunidad me pedía a gritos de igual manera el videojuego de disparos del qué tan poco se había visto de mi pero que todos sabían que era bueno.

—Ya que por pesos primero se va a descargar e instalar el MOBA, primero jugaré a ese y luego al otro— Dije mientras empezaba a configurar todo.

Por lo menos mi conexión de internet era de casi un gigabit por segundo, así que literalmente la instalación tardaba más que la descarga, una vez que de instaló y puse lo otro en segundo plano, me conecté a mi cuenta secundaria.

Por fin coloqué mi cámara en pequeño y la de la computadora en primer plano.

—Vamos a empezar por fin— Dije como si nada mientras apenas veía los comentarios sobre mi cabello, así de lento iba todo.

Lo que no me gustaba tanto es que por ser el servidor coreano no podía cambiar mi texto ni audio, aunque podía leer, prefería letras romanas por mucho. Y también que la latencia era minúscula, la suficiente para aprovechar mis reflejos mano-cerebro.

—Ultimamente jugaba mucho esta campeona cuando tenía más tiempo— Elegí al persona que más sabía usar y me lancé directo a clasificatorias, así la gente jugaría mucho más serio.

Volteé a ver la segunda pantalla comprobando que todo estuviera correcto, de paso viendo que ahora el número de espectadores era el doble.

Empecé la partida cómo era corriente.

Aunque la nueva normalidad en niveles tan bajos hizo que empezara a matar como desquiciado y demostrando la mayoría de mis habilidades en poco tiempo.

—Creo que fué una buena partida— Dije mientras ya prácticamente estaba ganada. —Supongo que tengo que mejorar un poco más… no estoy al nivel de antes— Volteé a ver la segunda pantalla otra vez, pero sonriendo por la sorpresa de todos.

—Ey, aunque no lo parezca, soy casi tan bueno jugando videojuegos, cómo cantando, y en cuanto a eso, no soy ni la mitad de bueno rapeando en comparación— Expliqué.

Mi tardo siguió entre jugar unas partidas más, abrir cosas, después de comprarlas claro, interactúe un poco con las personas y me pasé al videojuego de disparos.

—No se qué tan bueno sea, nunca he jugado este con teclado y ratón— Aclaré para darle a buscar partida, lo que tardó un buen rato por el sistema.

Un minuto de preparación después y me di cuenta de que me era mucho más fácil así, nunca había hecho tantos destrozos en un tiempo de práctica.

Poco a poco iba rotando mientras mataba a quien pudiera ver.

Al final el resultado era obvio, gané.

—Ahora o dentro unas dos partidas más viene lo difícil, el sistema supongo que me puso con gente de menos estadísticas— Aclaré una vez más para buscar una partida más.

Se fueron haciendo más complejas, pero no tan difíciles.

Aunque parezca relleno, esto va a ser muy importante a futuro.