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─Que tememos por aquí? ─Preguntó la ojiverde cuando reconoció aquel chico.
Este sonrío, había reconocido la voz femenina detrás suyo.
─¿Rubia? ─Dijo girandose para verla.
Esta se acercó a el sin ninguna expresión y se apoyó en aquella baranda, a su lado.
Había un silencio, bastante notorio, simplemente se escuchaba la música de fondo y la respiración de el pelinegro, era diferente, se oía diferente.
─Oye, ¿puedes respirar normal?
─No lo hago porque quiero, es el tabaco.─Soltó.
─¿Fumas? ─Se atrevió a preguntar.
─Hace más de tres años.
─Pero.. tienes diecisiete, ¿fumas desde los 14? ─Habló confundida.
─Mhm. ─Asintió, sacando una cajita de su bolsillo, donde traía sus cigarros y un encendedor. Prendió el cigarro y se lo llevó hacia la boca.
─Lo has ocultado muy bien en lo que llevas aquí eh.
─En la casa no fumo, me la aguanto. ─Aseguró, ninguno se miraba a los ojos, de las pocas veces que hablaron solo una vez se miraron el uno al otro.
Esta asintió con su cabeza. ─¿Y porque decidiste comenzar a fumar?
La cabeza de Jughead proceso rápidamente y pensó en aquella pregunta. ¿La rubia se estaba interesando en su vida?
─Tenía amigos, eso creía yo. Definitivamente no fueron buena influencia, y cuando mi abuela notó que- ─Este se frenó al notar que ese día no había llamado a su abuela.
Betty lo miró confundida, sin entender porque había parado de hablar.
─¿Que pasa?
─No llame a la abuela, no la llame en todo el día. Se supone que debo llamarla todos los días.
─¿Porque no lo haces?
─Siempre lo hago, es solo que hoy lo olvidé. Le enviaré un mensaje luego, en España será de mañana cuando llegue a casa. ─Aseguró.
─¿En dónde iba? ─Preguntó el, en realidad sabia donde había quedado, pero no sabía como seguir su anécdota.
─Mm. ─Dudo. ─Por la parte en la que tu abuela descubrió que fumas.
─Ah si. Recuerdo como me gritó. ─Sonrió al recordar a su abuela, la extrañaba. ─Ella me llevó hacia la escuela, y hizo que hablen con los padres de mis "amigos" ─Este hizo comillas con sus dedos. ─Y les dijo, no quedé expulsado de la escuela, pues no había hecho nada. Pero ella me sacó de ahí y me envió al colegio en el que sigo estando.
─Woow. ─Río la rubia. ─No conozco a tu abuela, pero parece una señora muy buena. ─Comentó Betty.
─Si que lo es, ella es muy dulce y cuidadosa, me cuido siempre. ─Aseguró con una sonrisa. ─Ahora dime algo tu ¿fumas?
─¿Yo? ─Preguntó con una ceja alzada.
Este asintió. ─Si, tu.
─Jamás probaría esa mierda, te hace mierda los pulmones. ─Aseguró indignada por la pregunta.
─Pero debes vivir la vida, ahora mismo, porque quizás mañana no puedes.
─No podré si hago eso, y mil cosas más, la vida puede vivirse sin esas mierdas, ¿porque hacerlo? ─Dijo sería. ─Puedo ser malhumorada, irresponsable y algo inmadura, pero no estúpida para hacer eso.
─Hey, tramquiila.─Soltó Jughead. ─¿Porque tanta negatividad contra esta costa? ─Preguntó señalando el cigarro que había terminado, para luego tirarlo hacia el patio de abajo.
─Primero, hace mierda tus pulmones, tienes riesgo de cáncer tanto en tus pulmones como en la boca, laringe (osea, la garganta) riñón, hígado y más partes del cuerpo. Segundo, acabas de contaminar mucho, por cada cigarro que tires contamina demasiado, imagínate que uno de esos contamina cincuenta litros completos de agua. Y tardan entre uno y diez años en degradarse.
Jughead se sorprendió ante lo que Betty había señalado, no creía que tirar el cigarro haría tanta contaminación. Y más se sorprendió al ver todo lo que Betty sabía, pues el no tenía idea, y jamás se lo habia puesto a pensár.
─Sin contar, que el paquete de cigarros cuenta con plástico, y suelen tirarlo al piso o por cualquier lado cuando abren el paquete. ─Agregó. ─Y se, se que no te interesa, y no dejarás de fumar con eso, pero que se va a hacer con los idiotas. ─Jughead río.
─Sabes, dejaré de tirar ese plástico, y déjate de tirar el cigarro. Porque si, tienes razón, pero no puedo dejar de fumar, no pidas cosas imposibles.
─No te creas importante, nadie te a pedido que dejes de fumar, yo solo e dicho que es una mierda. ─Aclaró.
Jughead sonrió y se giró para verla, esta hizo lo mismo. ─¿Tanto me detestas?
─No te detesto, es solo que eres muy positivo-
─Y tu eres muy negativa. completó el pelinegro
─Exacto, muestras personalidades chocan, no siempre te llevarás bien con todo el mundo.
─Mira,concordamos en algo! ─Soltó sonriendo.
─Shut Up. ─Dijo esta, girandose de nuevo.
[En Inglés "callate"]
─Sabes que si entiendo de Inglés, pero trata de no hablarme tanto así, porque por poco entiendo eso. ─Pidió Jughead, quien ya se había girado, ambos habían vuelto a mirar hacia afuera.
─¿Cuanto sabes de Inglés?─Preguntó curiosa.
─Algo, pero depende.
─¿Depende de qué? ─Dijo confundida.
─Mm, depende porque si tu quieres ayudarme, darme clases de Inglés, hablaría mejor el idioma. ─Sugirió.
─¿Y eso me beneficia en..?
─Pasas tiempo conmigo. ─Soltó divertido.
─Aja si, sigue soñando.
─¿Porque? ¿Que tiene de malo?
─Porque tengo cosas más importantes que hacer. Como por ejemplo, pasar tiempo con mis hermanos, dormir, mirar series, no lo sé, hacer ejercicio..
─¿Y una o dos horas por día te molestaría mucho? ─Insistió.
─Wow, tu si que tienes ganas de estar serca mío. ─Aseguró divertida y fingiendo estar sorprendida.
Jughead sonrió de lado y volvió a insistir. ─Al menos piénsalo, rubia.
─Mi nombre es Betty, no rubia, y si sigues molestandome, me asegurare que me digas Elizabeth.
Este río. ─Piénsalo, Betty. ─Este remarco Betty divertido.
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Buenass, les gusta¿?
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Right now | Bughead
FanfictionEra la típica historia cliché, dos adolescentes, el era de otro país e iba a vivir a la casa de ella por un intercambio. Todo fue tan rápido y extraño, Elizabeth jamás imaginaría que Jughead sería la primera persona en la que confiaría de nuevo lueg...