Era la típica historia cliché, dos adolescentes, el era de otro país e iba a vivir a la casa de ella por un intercambio. Todo fue tan rápido y extraño, Elizabeth jamás imaginaría que Jughead sería la primera persona en la que confiaría de nuevo lueg...
─Así que.. ¿gimnacio con la rubia? ─Preguntó Jessica divertida.
Jughead río. ─Creo que ahora me odiara más de lo normal.
─Seguramemte. ─Río. ─Pero, porque te odia?
─No se si la palabra es odio, pero no me soporta, y creo que no soy de su agrado.─Habló este.─Aunque es divertido verla enojada y molestarla. ─Dijo divertido.
Ella sonrió. ─Mm, no me digas que ahora quieres pasar tiempo con la rubia.
Jughead la miró a los ojos divertido pero no dijo nada.
─¡Jones! ─Chilló su amiga pegándole en el hombro levemente.
─¡¿Que?!─Río.
─¿Quieres estar solo con la rubia? ─Preguntó sorprendida.
─No seas exagerada. ─Pidió Jughead. ─No es que quiero estar a solas con ella, algo me dice que tengo que acercarme. Quiero ser su amigo.
─¿Amigo con derechos?
─¡Ya! ─Soltó entre risas de ambos.
─Vamos a clase, que luego tienes que irte al gimnacio con la rubia. ─Soltó esta divertida mientras salían de él Azul y oro.
(...)
─¿Cuanto tiempo haces gimnasia?─Preguntó el pelinegro entrando a la cocina.
─Desde las 17:45 hasta las 19:45 ─Respondió la rubia.
─Bastante. ─Afirmó este. ─Pero me acostumbrare a tu ritmo.
Ella no respondió, simplemente se giró para tomar su botellita de agua ya llena y lo miró.
─Vamos. ─Ordenó.
Ambos caminaron hasta la puerta principal, pero antes de que salieran se escuchó un grito desde la escalera.
─¡Jughead! ─Gritó David, mientras bajaba corriendo.
La rubia y el pelinegro se frenaron y miraron a el chico presente. ─¿Que pasó?─Preguntó Jughead.
─¿Sabes conducir? ─Este asintió con la cabeza. ─¿Tienes licencia?─El volvió a asentir.
─Bueno, toma. ─Dijo tirandole un juego de llaves. ─Es del auto de Jacob, es porque vuelven de noche, y así no caminan tanto.
─Gracias. ─Soltó Jughead.
Betty le sonrió a su hermano y salió de la casa, Jughead abrió el auto del chico y ambos entraron.
─Espero que manejes bien, porque sino me iré caminando.
Jughead sonrió divertido. ─Tranquila rubia, que conduzco muy bien.
─Uy, que humilde. ─Habló esta mientras miraba por la ventana y Jughead empezaba a conducir.
─Of course. (En español:"Obvio") ─Soltó divertido para molestarla.
─Veo que te conseguiste una profesora que te enseñé, dime a ella ¿también la molestas?
─¿Celosa, rubia? ─Preguntó este sonriendo de lado.
Ella se giró con una ceja alzada para verlo conducir conducir sonriendo de lado.
─¿Celosa de que?
─De mi, y de mi supuesta profesora. La cual, siquiera existe. ─Soltó sin quitar su sonrisa.
Esta suspiró. ─¿Entonces, si sabías Inglés? ─El asintió.
─Idota. Me hiciste perder mi tiempo.
─Aja, como si te molestara, te gusta pasar tiempo conmigo. ─Habló y se giró a verla, y luego volvió a mirar al frente.
Esta negó y se dio vuelta para mirar por la ventanilla otra vez, no hablaría con el. Sabia que el la molestaba y no le daría el gusto, más sabiendo que podría caer en su juego.
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Me encanta escribir caps cortos:) el próximo cap va a estar bueno, lo subo hoy? COMENTEN
