𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 61

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—Betty. —la llamó el pelinegro, mientras está jugaba en el agua.

La chica se volteó para verlo. —¿que pasa?

—¿Porque quieres ir al gimnacio? Eres perfecta.

Ella se sonrojó, pero negó. —no lo soy, Jughead. Y no importará cuántas veces me lo digas , porque importa que yo me lo crea.

El suspiró, y se sentó más cerca poniendo sus pies bajo el agua. —¿que es lo que no te gusta de ti?

—Mis piernas. —murmuró con una mueca. —y mis brazos. —confesó.

—¿Es un chiste? Betty, porfavor. —este se metió lentamente, flotando a su lado. —Betty, es tu cuerpo. Debes amarlo, porque esas piernas, son las que te hacen caminar y moverte día a día. Esos brazos, son quienes te dan fuerza para moverte, estirarte y tomar cosas.

Esta asintió, no muy segura ni convencida. —ven aquí. —pidió Jughead.

Ella le sonrió débilmente, para acercarse a él y rodear su cintura con sus piernas, quedando pegados mientras ambos flotaban. —¿me amas? —se atrevió a preguntar.

—Si. —asintió.

—Entonces, hazlo por mi. Amate por mi. —Betty lo miró algo confundida.—te amo, y no me gusta que te sientas insegura, que debas ir a un gimnacio para tener tu "cuerpo perfecto".

Los ojos de la rubia se cristalizaron, no era notifica para Jughead que ella tenía bastante desconfianza con su cuerpo, y lo había notado hace tiempo, no le gustaba eso.

—Okey. —asintió esta con lágrimas.

El sonrió y tomó su mejilla, para besarla.

Horas más tarde, ambos chicos volvían hasta la casa. Al llegar, se encontraron con Mitchael y Nicolás, quienes estaban por irse.

—Chicos. —sonrió uno de los mayores.

Betty los miró con una sonrisa confundida. —¿saldrán?

Nicolás miró a su esposo y ambos sonrieron avergonzados. —si, volveremos mañana.

Jughead bajo su vista, avergonzado. —nos veremos mañana, subiré a darme una ducha. —sonrío y salió de ahí.

La rubia rió. —nos vemos mañana. —asintió con una sonrisa para subir hasta su cuarto.

Betty caminó hasta su cuarto, y vió a David sentado en la cama. —hasta que alguno se digna a llegar.

—¿Jacob salió con Jessica?

El rubio asintió. —si, aunque al menos no ha visto más a Evelyn.

Esta suspiró. —Jessica es una buena chica, de eso estoy segura. —aseguró, sentándose en su cama. —debería ducharme.

Right now | BugheadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora