CAPITULO XLVII

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En ese momento un auto se detuvo a la mitad de la calle, bajo Lissa de este y al ver a su mama de pie pegada a la pared, se asusto, así que corrió rápidamente, el auto arranco estacionándose a unos dos autos más adelante y luego se bajó el abogado Johan; Lissa ya de cerca miro que David estaba encima de su padre y se acercó a David lo tomo de los hombros, lo jalo una y otra vez, pero era un gran hombre como para ella sola pudiera con él, así que el abogado corrió e hizo a un lado a Lissa y tomo a David de los brazos haciendo que de un solo jalón lo pusiera de pie, lo hizo para atrás y Richard se puso de pie limpiándose la nariz.

-¡¡Qué demonios pasa aquí!! -miro a David y su padre.

-¡¡ESTE EMPEZO TODO, COMO CARAJOS PUEDES ESTAR CON UN HOMBRE QUE BIEN PUEDE SER HASTA TU TIO!! -la miro furioso.

-Richard sabe lo que sentimos -David respondió mientras la miraba y luego miro con fastidio a Richard -Pero ni siquiera me dejo explicar las cosas, solo se limitó a insultarme y para variar tu madre quiso ayudarme y la empujo -dijo volviendo a enfurecerse.

-¡Papá te atreviste a tocar a mi mamá! -lo miro con odio, se acercó a su madre y se pusieron a un lado de David -Bueno al menos puedes tomarte la molestia de escucharnos -se acercó a David y le tomo la mano, Johan lo soltó.

-NO, ME NIEGO Y TE QUIERO LEJOS DE EL.

-Lo siento pero eso no se va a poder. Hoy más que nunca lo necesito a mi lado -su padre los miro.

-Gracias maldito por poner a mi hija en mi contra... -paso a un lado de ellos, abrió la puerta del auto y arranco a toda velocidad.

-Eve ¿estás bien? -David se acercó a ella tomándole las manos.

-Si David, muchas gracias -sonrió -Era si o si, tenía que saberlo -miro a Lissa.

-Madre pero no así, David tenemos el asunto este -miro a David -Bueno dejémoslo así, está bien.

-Lamento interrumpirlos pero me tengo que ir Lissa -dijo el abogado.

-O si, disculpa por esto que ha pasado y gracias por traerme -le sonrió.

-No te preocupes -se acercó a ella y le dio un beso en la mejilla, David miraba detenidamente al abogado acercársele.

-Estas muy cerca de ella -dijo de pronto, Lissa y Johan se giraron a mirarlo, el tenia mala cara hacia el abogado.

-David, no sea irrespetuoso, él es el abogado que me ayuda.

-Eso no tiene nada que ver con que este tan cerca de ti -fulmino al hombre el cual le sonrió con orgullo.

-David, entiendo que estés demasiado molesto con la reacción de mi padre pero no seas así con el.

-No te preocupes Lissa entiendo su sentimiento yo estaría igual con una mujer como tu... -sus ojos grises de volvieron a los de ella y le sonrió con dulce encanto. David no pudo más y se encamino a la casa siguiendo a Eve -Nos vemos Lissa -le sonrió y se subió a su auto, saliendo de ahí.

Lissa respiro profundo y entro a la casa, David estaba sentado en el sofá y enfrente de el Eve curándole el labio que sangraba, ella se acercó a ellos.

-Me permites mamá -Eve asintió le entrego el hisopo y se fue a la cocina. Cuando se acercaba a curarlo él se levantó y la dejo con la curación en la mano -todavía sangra ven acá

-Ya me voy -tomo su saco del perchero, Eve salió y lo miro, sabia que la presencia del abogado lo había molestado y no quería estar mas ahí.

-¿Ya te vas David? -pregunto Eve.

-Si gracias, tengo cosas importantes que hacer y ya es tarde, con permiso y gracias -se dio la vuelta, abrió la puerta y salió, dejando a una Lissa confundida.

-Te das cuenta lo que pasa verdad Lissa -miro a su hija que estaba de espalda mirando el hisopo y el alcohol que tenia en la mano.

-Yo no he hecho nada...

-Tu no, pero ese abogado hizo esa maldad.

-¿De qué hablas? -se voltio a mirarla.

-De que ya encontró el nervio principal de David y esto va hacer una guerra entre los dos. Lissa eres mi hija y tengo que decirte que se nota que David te quiere demasiado y para bien -sonrió.

-Lo sé, pero a mí el abogado no me interesa, para que quiero otro hombre en mi vida si ya está el.

-Eso espero por tu felicidad -se dio la vuelta y regreso a la cocina.

El amigo de Jordy dio con Támara, Owen y David el cual iba llegando al Hotel, estaba en el estacionamiento, no traía seguridad, se bajó del auto furioso, azoto la puerta y camino hasta el elevador, aprovecharon que caminaba y no prestaba atención a nada, le taparon la cara y lo arrastraron hasta la oscuridad.

-Vaya, vaya miren a quien por fin conozco -dijo el sujeto.

-¿Quién eres? -pregunto con enojo.

-Eso no importa, solo vengo a darte una advertencia, de lo que te andas metiendo, te recomiendo que después de esto ya no muevas un solo dedo para ayudar a la puta de Támara -se hinco frente de David que estaba pegado a una pared

-Tus amenazas no van a mejorar tu situación cabrón -dijo con furia.

-Está bien como quieras -se puso de pie -Denle la golpiza hasta que quede inconsciente y lo suben al elevador.



















CONTINUARA...

Límite De Amor Parte 1 #wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora