Límite De Amor Parte 1 #wattys2019

CAPÍTULO VI

A la mañana siguiente Lissa había decidido hablar con su padre sobre la oportunidad que le ofrecía David.

—Hola papá  —lo saludo, mientras entraba a la cocina mientras se servía una taza de café.

—Hola hija, Buenos días ¿Cómo has amanecido?  —le sonrió.

—Muy bien gracias ¿y tú?

—También bien.

—... papá —la miro —Quiero hablar contigo sobre lo que el señor Hoffmann nos menciono anoche.

—Sobre la ayuda para ejercer tu carrera.

—Si... —miro de reojo a su padre.

—Supongo que la aceptadas o ¿Dejaras pasar la oportunidad que te brinda David? —arqueo una ceja.

—No, es justo lo que necesito —dijo mientras jugaba con sus dedos.

—Muy bien hija. ¿Quieres llamarle o...

—Preferiría ir personalmente, creo que es lo mejor si le voy a pedir ayuda ¿No crees?

—Tienes razón. Te doy la dirección y en un momento le llamó para decirle que vas en camino... —soltó la taza y saco su móvil, tecleo unos cuantos números y llamo, cuando le respondió, salió al jardín unos minutos, después entró de nuevo. Tomó una libreta, escribió la dirección y se la entregó.

—Aquí está la dirección, ya le dije que irás en un rato, dijo que te recibirá en cualquier momento.

—Gracias papá —tomó la hoja y corrió a su habitación para arreglarse, no planeaba llegar en pantalón de mezclilla, una blusa con un youtuber estampado.

*******

David llegó a su oficina, se puso a trabajar directamente, tenía demasiado que hacer incluso tendría que salir New York varias veces. Mientras estaba en lo suyo su móvil sonó, miro la pantalla y era Richard.

—Hola David.

—Richard Buenos días, que raro que me llames.

—Sí, la mayoría de veces tú me llamas, pero hoy te habló por mi hija.

«¿Lissa le había pedido que llamará? ¿Por qué no hacerlo ella misma? Le daba vergüenza o algo así » pensó.

—A ver dime.

—Mi hija ha decidido aceptar tu ayuda que le ofreciste anoche.

—Oh...si, muy bien  —sonrió.

—Te llamó para ver si en tu agenda llena la podrías recibir hoy...

«¡¡ HOY MISMO!! No puedo desaprovechar la oportunidad de verla de nuevo. Es una mujer excepcional y joven. Claro que la atendería y botare lo demás » pensó nuevamente.

—Claro, dile que en cualquier momento la recibiré, la estaré esperando con gusto.

—Gracias amigo.

—De nada. Hasta luego.

—Hasta luego  —colgó, mientras seguía pensado en que la tendría en su oficina sentada frente a él, solos...

Lissa tomo un pantalón negro junto a un saco del mismo color, una blusa blanca de mangas cortas, unas zapatillas de color blanco y un bolso pequeño de mano color negro; salió de su habitación, bajo las escaleras, Elizabeth estaba en la cocina cuando la vio.

—Tu papá me a comentado que irás a ver a David  —le sonrió.

—Si...aceptaré la ayuda que me ofrece  —le devolvió la sonrisa.

—Que bueno. Tu papá me pidió entregarte las llaves de la camioneta para que vayas  —extendió las llaves a su mano.

—Oh...gracias. Me voy ya por que se me hace tarde y no quiero entre tenerlo demasiado, se que es un hombre muy ocupado.

—Que te vaya muy bien Lissa.

—Gracias  —se dio la media vuelta, salió a la calle se acercó a la camioneta, abrió la puerta, subió y arrancó hacia el tráfico de la ciudad por la tarde.

Continuará...

Esta historia esta siendo editada por eso los cambios espero la disfruten.