Los días transcurrieron a gran velocidad, o al menos esa fue mi impresión respecto a ellos. Quizá solo era yo completamente aturdida y despistada con respecto al paso del tiempo debido a lo feliz y conforme que me encontraba con el rumbo que mi vida había tomado repentinamente. Por como cada pieza volvió a su lugar e incluso mejoró tanto con lo sucedido con mis queridos amigos y el chico tan lindo del cual me enamoré.
En un pestañear ya nos encontrábamos trabajando todos juntos en las preparaciones escolares de la graduación y también en las personales.
Acompañé a los chicos en busca de un lindo traje y ellos a mi en busca de un vestido.
A decir verdad ya estaban algo cansados por ir en tienda y tienda desde hace varios días y yo me había dado por vencida en encontrar uno que realmente me gustara o a ellos. Porque los pocos que vi que no me disgustaron tanto como otros, no convencieron a los chicos y negaron hasta el último momento.
No iba a hacerles caso alguno pero lograron convencerme con sus buenos motivos."No está a tu altura" "Necesitas algo mejor" eran algunos de ellos. Y no podía evitar morir de risa al escucharlos. ¿Cómo lograban exagerar absolutamente todo? Era impresionante.
Al menos ayudaban demasiado a mi autoestima, agradecía eso.Debido a esto optamos por ir en otro momento o pedirle a mi padre que me acompañara, él sabía mejor que todos nosotros sobre buenas tiendas de lo que fuera.
Algunas de las actividades, para la preparación de la graduación, consistían en hacer ciertas ventas o eventos en los que pudiéramos recaudar dinero el cual se utilizaría para diferentes cosas de la misma, por ejemplo; comida, bebidas, iluminación, sonido, decoración, el salón que debíamos alquilar para llevar a cabo la fiesta y demás.
Cada uno de los "equipos" formados se encargó de recaudar a su manera. Nosotros, usando la indumentaria vieja y que ya no se usaba de cada uno, decidimos hacer algo así como una venta de garaje.
En otra ocasión, también hicimos un lavadero de autos.
Nos divertimos mucho en ambas, sobre todo en la segunda. Al hacer algo de frío fue algo difícil ya que terminábamos mojados por completo y era inevitable que eso no ocurriera, por lo que nos turnamos de vez en cuando para ir dentro a cambiarse de ropa y tomar un poco de café, té, o chocolate caliente para recuperar la temperatura.Lo último en nuestros planes sería cocinar algunos cuantos platillos los cuales luego vamos a vender en las afueras de algunas empresas.
Sus empleados suelen trabajar en exceso y a veces no tienen tiempo alguno para consumir algo. El claro ejemplo era mi padre.El día acordado para ello llegó, como de costumbre esperaba con todo listo a que los demás aparecieran con el resto de materiales y comestibles.
Baekhyun y Chanyeol estaban conmigo desde la noche anterior y fueron de gran utilidad al momento de ir de compras y dejar todo más que preparado para comenzar en cuanto estuviéramos todos.Los tan esperados chicos no tardaron en tocar el timbre de la casa y luego de que Baekhyun abriera la puerta para ellos, se acercaron a nosotros para saludar y comenzar con todo.
-¡El delantal! -Exclamé señalando un estante donde se encontraban.- ¡Y no hagan un desastre! -Me dirigí especialmente a Chen, Chanyeol y Baekhyun, el trío encargado de hacer justo lo que no quería. Un gran desastre.
Los presentes rieron y luego de que (los que no tenían) se colocaran sus delantales nos pusimos manos a la obra.
De aquí para allá, de una receta a otra, de un platillo a otro. Así fue como transcurrió la mañana y gran parte de aquella tarde.
-¿En qué puedo ayudarte? -Un sonriente Taemin apareció a mis espaldas colocándose junto a mi a escasos centímetros de distancia.
-En lo que gustes, aunque en realidad no necesito ayuda, acabo de terminar aquí... -Volteé quedando frente a él y tomó mi mano suavemente.
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Mi amor por ti~ | Taemin y Tú
FanfictionBaekhyun, su mejor amigo, fue el amor de toda su niñez, pero fue Taemin quien robó su corazón, transformándose en su primer y único amor. Aquel amor que florecería cada vez más, año tras año. Hasta que por cuestiones del destino todo se volvió difíc...